Vista dos veces en mi vida, la segunda al no recordar años después que ya la tenía vista (tal era el nulo recuerdo que había dejado en mi, por otra parte, maltrecha memoria), he aquí mi primera impresión:

"Malísimo spaguetti western hispano italiano, realizado de forma absurda por Aldo Florio, que ya nos había obsequiado con otras perlas, tales como "El sol bajo la tierra", del mismo pelo aunque algo mejor (bueno, sí, menos mala).
En esta ocasión la cosa decepciona hasta extremos irritantes, no en vano esta cinta es un claro ejemplo de film menos que vulgar, una verdadera pérdida de tiempo inmisericorde.
Y esto sucede porque el ritmo es inexistente, las escenas de acción se componen casi exclusivamente de tomas donde se ven a los intérpretes tirando tiros se supone que a sus enemigos, por supuesto disparando decenas de balas del mismo revólver. Y es que eran un chollo estas armas, no había ni que recargarlas. Las balas no se acaban nunca.
Y es una pena porque no comienza mal. Supongo, digo yo, que esto es parte del trabajo de uno de los tres guionistas (sí, en efecto, cuantos más peor...) José Antonio de la Loma.
Y además, las interpretaciones son nulas, no existiendo el menor estudio psicológico de los personajes. Su descripción está vacía de cualquier contenido y sólo con ver los ropajes que visten es para echarse a correr. Ni siquiera la indudable belleza de una joven Mónica Randall salva es plúmbeo espagueti (mejor dicho, western europeo), que sin duda es de lo peor que he visto en mi vida.
Aburrida hasta la exasperación, resulta un paquete del que hay que huir como de la peste.
Áridos paisajes de Esplugas del Llobregat (Barcelona), donde fue rodado el film. Y es que en la coproducción está metido el Sr. Balcázar."

Vista por segunda vez, debo decir que sí, es mala, pobre, muy mediocre, pero quizás no se merezca el cuasi desprecio con que la despaché en mi primera impresión.
Pero, vamos, que no merece la pena.

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