Un inusual y original thriller que mezcla acción, sátira social y ciencia ficción, extremadamente enérgico y entretenido. Neill Blomkamp debuta con esta cinta producida por Peter Jackson, que cuenta con un presupuesto de 30 millones de dólares. Su guión combina dos ideas aparentemente compatibles, como son el racismo y los extraterrestres, con un resultado realmente innovador, aunque tenga momentos de verdadera absurdidad.

La película se inicia como un falso documental, para luego dejarse llevar por unos sorprendentes efectos especiales y por la violencia salpicando la pantalla literalmente. Los alienígenas (cuya apariencia física es la fusión entre el Dr. Zoidberg y un langostino) han invadido Johannesburgo, una descomunal nave oculta el cielo africano, sus tripulantes fueron encerrados en campos de concentración. El Distrito 9 se ha convertido en un gueto de favelas, donde la corrupción, el delito y el tráfico de armas han invadido sus calles, y los sudafricanos se dividen en defensores de sus derechos y en partidarios de expulsarlos.

'District 9' no deja de ser una propuesta diferente e inteligente, que emplea un humor esperpéntico para elaborar una crítica de la sociedad y la política estadounidense. Sus inevitables paralelismos con el ahora acabado apartheid en Sudáfrica, influyen en que la película sea una visión aún más realista y seria de la segregación racial. Pero es inevitable que el film acabe por adentrarse en un terreno hostil, en el que no encuentra salida ni siquiera en la convencional acción inspirada por el estilo visual de los videojuegos.