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Zorba, el griego

Drama Un joven escritor inglés viaja a Creta para tomar posesión de una pequeña propiedad que ha heredado. En el viaje conoce a Zorba, un hombre de carácter vitalista y de costumbres primitivas, que ejerce sobre él una gran influencia. (FILMAFFINITY)
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Críticas 36
Críticas ordenadas por utilidad
27 de abril de 2020
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Al ver Zorba nuevamente luego de 56 años, tuve la satisfacción de encontrar que esta película continúa teniendo la capacidad de transmitir la fuerza, la alegría y la humanidad de Zorba, el encanto y el candor de Basil, la sensualidad reprimida de la viuda, el estado decadente de la madama, la ignorancia y el primitivismo de los habitantes del pueblo.
Cada personaje está interpretado magníficamente por sus protagonistas. Entre los principales, un poderoso Anthony Quinn; un joven y retraído Alan Bates; Irene Papas, bella y determinada como una diosa de la mitología griega; y Lila Kedrova, quien logró una actuación equilibrada entre el ridículo casi jocoso y el patetismo de su ocaso.
La música de Mikis Theodorakis, además de ser hermosa como pieza de arte, está absolutamente imbricada en cada escena como un protagonista más, potenciando así las emociones y sentimientos desprendidos de cada situación que estaba ocurriendo.
Termino con el reconocimiento al hacedor de esta magnífica película, Mihalis Kakogiannis, quien además de ser su Director escribió el guión basado en la novela de Nikos Kazantzakis, sabiendo conservar y enriquecer las bondades narrativas y la profundidad de los contenidos de la novela, algunos de ellos expresados en la novela y en la película como reflexiones de Zorba.
Dora
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21 de julio de 2022
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un clásico europeo de los años sesenta, de un director, del que no he visto nada, que se consagró con esta cinta, realmente muy aclamada, tanto por la estética como por el mensaje, realmente profundo y vitalista.
Anthony Quinn está magnífico, como siempre. Alan Bates también, en uno de esos papeles que le hicieron un gran actor,. Irene Papas tan seca como siempre, distante y fragil, como si escondiera un gran dolor que no quiere que se sepa, que la gente descubra qué le ocurre. Pero la que me ha sorprendido de manera muy grata ha sido Lila Kedrova, en uno de esos papeles histéricos y semi propios que probablemente la caracterizaron a lo largo de toda su carrera, al menos en los papeles que yo la recuerdo.
La historia es tierna y costumbrista, enérgica y vitaminada. A lo mejor la felicidad consiste en eso, en vivir la vida con una cierta inconsciencia, de manera despreocupada, con sinceridad y sin enemigos. Eso, naturalmente, no te reporta ni grandes éxitos profesionales ni un status económico, pero a lo mejor te hace más feliz.
Tiene un mensaje profundo, sincero y que hay que ver de vez en cuando, porque nos recuerda lo que somos y lo que vivimos y queremos ser en la vida.
Me llama la atención lo abrigado que están en la película y lo que llueve. Tengo a Creta por una isla de calor, en cualquier época del año y con poca lluvia.
Otra cosa que me llamado la atención ha sido la apetencia sexual que tiene el protagonista por las viudas, mujeres necesitadas de afecto y sexualidad que no quieren terminar su vida afectiva sin volver a sentir el fuego de la pasión.
Me ha parecido una gran película, verdaderamente inolvidable.
ÁAD
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25 de abril de 2023
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
(Fabio) Cannavaro, Bubulina, el extranjero y la viuda (no precisamente) feliz.
De Aristóteles a esto, madre mía el pueblo griego, no se puede llegar más alto ni caer más bajo. Así como Venganza de Pierre Morel estaba claramente patrocinada, al respecto nada disimulaban, por el ministerio de turismo francés, esta que ahora nos ocupa no hace falta decir o aclarar que igualmente por el griego, visita nuestras islas, ya verás lo bien que lo pasas disfrutando del sabor/olor local, de las costumbres más tradicionales, esa solera, y arraigadas, de los paisajes y el paisanaje, venga.
Qué barbaridad, cuánta atrocidad, qué salvajada, madre del amor hermoso, la parte final es walking dead, Hiroshima y Nagasaki, Holocausto caníbal, el apocalipsis y el armagedón. Lo cual, claramente, es pasarse, el salto, desde ese costumbrismo árido cómico blando siniestro a tanto despelotado voraz genocidio, es demasiado grande, no estábamos preparados para tanta/semejante hecatombe disparate, nos pillaron desprevenidos, con la guardia baja, para tanto aquelarre y aguafuerte, se les fue la mano, se pasaron de frenada, derramaron la copa, apuraron las heces.
Lo que podría haber sido una chula tragicomedia llena de humanidad, inteligencia y humor y mucho desparpajo (como así es en buena parte, casi hasta el final) degenera en estrambote y descojonación, en horror y depravación, en abismo y perdición, puro terror, llanto y crujir de dientes.
Qué grande es Anthony Quinn y qué malo es Alan Bates. Qué bella Irene, esa mirad intensa, y la otra, Lila dice, rusa francesa, vaya mezcla más estupenda, bien aunque se pase de vuelta.
La película, al fin y al cabo, si le miras el diente, no hace falta ser Einstein, no puede ser más negra, atroz y revulsiva ¿repulsiva?, la mirada sobre la condición humana es abominable, ni títere con cabeza, veamos, tenemos al hombre sin atributos, a la nada perfecta, menos peso o poso que el mismo viento, ni un pedo tiene menor consistencia/presencia (casi peor que Keanu Reeves, ese hombre, en alguna de esas mal llamadas comedias baboso románticas), no llega ni a fantasma siquiera, qué pereza y falta de sustancia entereza, él, no puede ser más blando, muermo y cobarde (¡cómo -no- actúa cuando la atacan a ella! y ¡cómo se queda!, circulen, aquí no ha pasado nada, la vida sigue, manda, el muerto al hoyo y el vivo haciendo el ridículo a bote pronto), Alan, sigamos con el botarate mequetrefe rimbombante caradura sinvergüenza indigno de Antonio que se vende al primero que pasa, sí bwana, cuánto le quiero jefe, y que es un completo desastre, como bien apunta o reconoce, peor que la peste, por donde pasa no más ya la hierba crece, arrasa, arma de destrucción masiva, el ébola en forma humana, con la francesa hotelera de tanto almirantazgo llena como pobre loca desesperada desquiciada y alelada y, ese remate, con el pueblo más burdo, mezquino y bruto y atrasado y espantoso espeluznante del mundo conocido lleno de cafres y miserables, de bestias humanas crueles y retrasadas hasta los topes y bordes, ni el Greco o Goya, ni el mismo Dante.
Tampoco explican bien las cosas, no se gradúa el desastre o tragedia, nos lo echan arrojan a la cara de mala manera, a mala idea, tremendismo cazurro que gusta mucho a los de fuera, ese primitivismo romántico desaforado que entusiasma tanto a los civilizados, contemplar la barbarie como un bello antropológico culto espectáculo, hay que ver qué interesante, qué curioso, cómo se comportan estos primates, estos pueblos paleolíticos, llega demasiado destartalada descontroladamente cuando menos o no tanto te lo esperas, como si nada.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ferdydurke
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29 de abril de 2023
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Anthony Quinn era un actor racial, camaleónico como pocos y de una personalidad arrolladora, no imagino a otro actor interpretando a Zorba. La esencia del griego rural, supersticioso, mujeriego, bebedor, amigo de sus amigos y vital hasta la extenuación. Frente a el un Alan Bates, un hombre indeciso, un poco pusilánime, intelectual y reflexivo que es el contrapunto a un Zorba que es todo lo contrario, como se suele decir, los polos opuestos se atraen y complementan, por oto lado una magnífica Irene Papas (muy guapa por cierto) como la dolinte viuda joven, victima de los prejuicios del pueblo, que sin hablar prácticamente cuánto expresa con su mirada, que gran actriz que era la señora Papas. Ese tono que tiene tan neorrealista de la sociedad cretense de la época es muy atractivo, un clásico a redescubrir.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
zuriman
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11 de julio de 2017
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tenía muchas ganas de ver esta película ya que mucha gente me había hablado muy bien de ella, y de su historia llevada a cuestas por un personaje único.
Y es que sin lugar a dudas uno de sus personajes protagonistas es magnífico. Zorba es un anciano griego que se cruza en el camino de un joven inglés que decide viajar a Creta para explotar una mina que ha heredado, y así hacer resurgir a un pueblo un poco dejado. Una mina de la que también busca hacerse rico, pero nunca pensaba que esa mina le iba a hacer rico emocionalmente; y que Zorba le narrará sus experiencias y sus visiones sobre la vida tras sus vivencias.
Y es que el personaje que es un hombre sin estudios; es un gran sabio. Un gran hombre con una gran preocupación. Y dicha preocupación es la muerte y lo que hay después. ¿Qué deja el ser humano tras unos años de vivencias cuando se da el último suspiro? ¿Quién recordará a esa persona que deja de vivir, y que sentirá en ese último momento inevitable en todo ser humano?
Este hombre dará constantes lecciones a este joven que desperdicia sus años dorados sin vivir el momento y todo lo que le ofrece la vida. El miedo a la decepción y al rechazo, hace que este inglés no disfrute de su día a día; y el viejo griego se lo recordará en todo momento para que disfrute el momento. Porque al fin y al cabo, la vida es un instante, y en nada uno se arrepentirá de lo que no ha vivido.
La película es interesante y convence en muchos aspectos. Es verdad que cuenta con ciertos momentos que resultan un poco pesados, y hacen que al final en general el film no resulte tan redondo como uno espera en compendio con otras escenas.
Actoralmente el film es muy bueno. Anthony Quinn realiza un trabajo soberbio, y se ha convertido en uno de sus personajes más famosos. Junto a él un gran Alan Bates dando vida a ese inglés que abre los ojos a la vida, una increíble Irene Papas que regala una interpretación desgarradora; y una impresionante Lila Kedrova que le valió su merecido Oscar.
En fin, "Zorba el griego" es un mítico film que aunque cuente con momentos que decepcionan un poco, en general convence bastante. Y ello es gracias a su personaje protagonista lleno de mensajes aleccionadores, unas buenas interpretaciones, una preciosa fotografía y una banda sonora mítica.
icaro_81
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