Mazinger Z (Serie de TV)

Dice el tópico: si me tocara revisar hoy en día las series que me marcaron en una determinada época... con ésta me lo pensaré muy mucho el hacerlo, porque el recuerdo tan fantástico que me dejó aquel Koji Kabuto, aquellos malvados absolutamente icónicos, aquella Afrodita A que despechaba los entuertos con absoluta destreza y eficacia (¿sería posible lanzar los misiles hoy en día algo así en un dibujo animado?), aquella canción de los títulos iniciales, aquellos episodios de los que ni se recuerdan los argumentos, aquel diseño simétrico y demoledor de Mazinger Z que para mí suponía la aceptación tal cual de aquel inmenso animal tecnológico como un ente con entidad propia (es decir, sabíamos que Koji Kabuto pilotaba, cómo olvidarlo: planeador abajo!!! con eco reverberante, pero ese bicharraco en realidad cobraba vida propia, sólo le faltaba hablar. ¿Hablaba?)

Y termino este recuerdo breve de la serie que me inspira respeto, más que respeto: si esta serie me da respeto, más que respeto, es por culpa, por la excelente caracterización de esos villanos, sí, el de las barbas blancas y el que hablaba con él embutido en una pantalla en plan Gran Hermano, y de esos episódicos malos que aparecían y dejaban de hacerlo como el Guadiana. Para tener más presente el recuerdo, tengo que revisar, creo que lo tengo aún por ahí, un album mítico de dibujos animados de la televisión ochentera, en la que o veías Mazinger, Hombre Rico, hombre pobre, y las dos películas del sábado, o amigo mío, no existias en este mundo. Porque, para rememorar los vestigios de ese tipo de pasado, buscar ese album que tengo por ahí perdido es mucho mejor que dar con ello mirándolo por Internet.

La infancia es ese período de tiempo en el que parece que no vas a crecer nunca, en la que los problemas no existen, en el que eres invencible y todo será para siempre (o al menos hasta la semana que viene). Y de ella casi todos guardamos recuerdos maravillosos e imborrables: los amigos, los deberes, las niñas y las series con las que crecimos. Mazinger Z era una de las series que veía todas las tardes y que nunca podré olvidar (la otra era Comando G). Las veías, alucinabas y luego te ibas con los amigos y soñabas que eras capaz de volar, que tenías super poderes y yo qué sé que más. Y eras feliz y disfrutabas porque eras un niño y en tu pequeño mundo sólo cabía la fantasía, la amistad y poco más.
Koji Kabuto era el protagonista principal y quien dirigía a Mazinger que es una de las series de mayor impacto en el género "mecca" (robots de combate). Entre los malos destacaban el diabólico Dr. Hell y un memorable Barón Ashler (mitad hombre, mitad mujer). Quien la haya visto la tendrá asociada para siempre a sus nostálgicos recuerdos de la infancia y quien no la viera pues probablemente le suene todo esto a chino (perdón, a japonés).

Paradójicamente, aunque Mazinger Z fue unos de los primeros animes que llegue a ver en los últimos años de los 80 (al igual que Heidi), no tuve la suerte de ver su serie, sino de ver primero su película, y dado que era niño, poco me importo, ya que en su momento conocí a este personaje. Más de 10 años después tuve la gracia de enganchar su serie en televisión, y la verdad es que pese a ser bastante antigua, me resulto amena y con gracia, y hasta interesante desde el punto de vista de ver como era el anime por los 70.
Por ello no me puse muy puntilloso con ella por el hecho que puede que el tiempo le pueda haber hecho mella o puede que no haya envejecido bien, sino que la mire con gusto. Justamente algo similar sucedió cuando vi unos de los primeros largometrajes de astroboy de los 60, que pese a su animación, le encontré su encanto por lo clásico y antiguo.
En definitiva, esta serie puede llegar a gustar a jóvenes, nostálgicos o incluso a aquellos que a veces encuentran algo que les da gusto y encanto (me parece que no tengo las palabras para explicarlo) en estas antiguas series de animación japonesa, que marcaron una época en la cuál ni siquiera había nacido.

Me da igual que ya tenga sus años, sin duda este es el mejor anime de todos, desde pequeño siempre me ha apasionado este gran robot que me ha metido al mundo del anime y de los mechas, y disfrutaba con pasión como Mazinger se enfrentaba a los monstruos mecánicos.
Hoy en día, a pesar de haber visto muchos animes con mejor calidad, mi mentalidad no ha cambiado nada, sigue siendo el mejor anime de todos, aunque también debo incluir excelentes y maravillosas secuelas como Mazinkaiser o Shin Mazinger, pero lo que es la serie de los 70 no me importaría en absoluto verla de nuevo, es más, estaría encantado de ver los 92 capítulos, por muchos fallos que le busquéis para mí seguirá siendo el mejor anime de todos, y sin duda también el héroe de mi infancia, y tal y como se dijo en Viewtiful Joe "Todo el mundo tiene un héroe", y el mío es este.

Para mi Mazinger es felicidad absoluta. Nací en el 73, soy de la Generación Mazinger. Igual que otros fueron de la generación Elvis, o de la generación Beattle, los de los 70 somos de la generación Mazinger. Igual que para Machado su infancia es un patio de Sevilla donde madura un limonero, para mi la infancia es Mazinger Z. Y eso son palabras mayores. Tango muchos recuerdos -y por suerte el 99% felices- de mi infancia: la pandilla, las travesuras, las gamberradas, las chicas que te gustaban, los partidos de fútbol contra el edificio de al lado, el bote, el palo, el pañuelo, el churrobá, el escondite..... pero si he de reducirlo a un solo concepto, a una sola palabra.... sería MAZINGER. Como dicen todos, recuerdo perfectamente que lo echaban los sábados por la tarde despúes del telediario, y ya se me ponían los pelos de punta con la canción de inicio... La maldad, el poder.... Pero el momento de planeador abajo, la piscina abriéndose y Mazinger asomando era algo sobtrenatural, algo que me alejaba de la vida, de mi mismo.... el bien sobre el mal, hombre y máquina fundiéndose... no puedo explicarlo, pero aún hoy, en este momento, se me ponen los pelos de punta... Y recuerdo a mi madre y a mis dos hermanos conmigo, absortos y emocionados como en nigún otro momento de la semana.... Por supuesto yo tenía un Mazinger y mi hermano otro, que nos trajeron los reyes... Pero era guapísimo, de muy buena calidad e idéntico al original, con esa cara increíble, mediría unos 50cm y tenía puños fuera y fuego de pecho (una especie de flechitas naranjas que salían del pecho). Los puños fuera salían a bastante velocidad, con un mecanismo de muelles o algo así que apretabas un botón y salían disparados... Cuantas horas pasamos jugando con estos Mazingers...Lo recuerdo y casi lloro...ya no lo tengo, donde estará??

No sé, en definitiva, algo que te ha marcado tanto, que 30 años después lo recuerdas con tanta emoción, es algo mágico, va más allá de la razón, es sentimiento, es vida, es MAZINGER Z!