Toy StoryAnimación

De las mejores películas de los 90 echas por animación. Donde la tecnología respecto a la animación no era tan grande, llega Pixar y !PUM¡. Te saca un peliculón para toda la familia donde hay, acción, amor, miedo, tristeza... Combinas esos géneros y tienes esta película. La edición para ser los 90 está demasiado bien echa, el guion es simplemente una obra de arte y la música a marcado en la infancia de la mayoría. Una gran película para todas las edades, recomendada al cien por cien.

Pocas cosas que no se hayan dicho se pueden decir ya sobre esta película. Una cinta que marcó un antes y un después en el género, que hasta ese momento se llamaba cine de dibujos animados y pasó a ser el denominado cine de animación. Así que se puede decir con rotundidad que Toy Story fue un producto revolucionario que cautivó en su día a los amantes del género. Después de 25 años sigue siendo una referencia, tanto por la nostalgia que despierta en aquellos que crecimos pensando que los juguetes estaban vivos como por su faceta técnica. De hecho, a mí me gusta más ahora que cuando tenía 5 años porque empatizo mucho más con los personajes al comprenderlos mucho mejor. Así que ni por asomo es un filme hecho exclusivamente para niños. Se toca durante la segunda mitad del visionado los temas de la amistad y la aceptación, y de buena manera a mi modo de ver. De pequeño este metraje dejó en mí, y en otros muchos niños, la curiosidad de si realmente los juguetes se movían y hablaban cuando no estábamos.

Estoy leyendo algunas críticas que valoran injustamente a esta película porque se han hecho películas posteriores con una animación más desarrollada, pero eso es lógico. Es injusto valorar negativamente a esta película por eso sabiendo que ha pasado mucho tiempo desde que se hizo y sabiendo que fue la primera película de Pixar. En fin. El caso es que es en la historia de la película donde encontramos lo bueno, que parece partir de un antiguo proyecto llamado La Tostadora Valiente, que por cierto, La Tostadora Valiente es mi película favorita de todas las que he visto en mi vida. Y Toy Story ha sabido mantener la esencia de esa antigua película de cine independiente y hacerla más apropiada y comercial para el público infantil. En mi opinión, La Tostadora Valiente supera a esta y por eso recomendaría antes La Tostadora Valiente. Pero hay mucho prejuicio con el cine de animación, en realidad una sola película de animación puede abarcar múltiples géneros, en este caso, sobre todo, se centra en el género de aventura. Muchos pueden pensar que una película de aventura es sobre un héroe que tiene que rescatar a alguien, pero en películas como esta la aventura sucede en el interior del personaje, no fuera de él. Claro, al menos esa es la esencia que conservó al basarse en la película de La Tostadora Valiente, en la que en aquella película la aventura era la vida misma, y en esta solo afrontar los miedos para alcanzar los objetivos. Así tenemos una historia que nos muestra el lado feo de la vida, que es cuando se comporta de forma injusta con los seres más débiles, pero estos la pueden hacer frente con la valentía y la perseverancia. Tanto en la película de la que proviene esta, por tener la misma idea, como en esta, son los personajes en principio amigos del protagonista, Woody, los que suavizan la historia con su carisma y el humor que aportan a la historia, pero que a su vez acaban actuando como villanos del protagonista al haber perdido la fe en él y, además, injustamente. Y ese es un momento álgido de la película en la que ya le empiezan a romper el corazón al espectador y en la que al protagonista le conviene hacerse amigo de su rival inicial puesto que sus aparentemente amigos iniciales se habían puesto en su contra. Es una historia que hasta al mismísimo protagonista, Woody, le resalta su egoísmo y sus más viles defectos, sin permitir que nadie en la película quede como el personaje bueno, pues todos sacan lo peor de sí mismos, pues ningún juguete es perfecto. Esa particularidad que ofrecen los personajes de la película es lo que hacen de original e interesante a su historia y, por supuesto, es una primera idea que se ha perdido en las secuelas, provocando que las secuelas sean inferiores a la película original, aunque no malas. También cabe mención la música de la película, que en cada escena en la que ocurren cosas crueles para los personajes o mostrando un estado mental enajenado al vivir en un mundo de fantasía, pero cruel más que benévolo, se les acompañan temas musicales que le añaden una atmósfera de tensión emocionante. Por todo ello, y porque la pueden disfrutar entendiendo inconscientemente los elementos ya mencionados tanto niños como adultos, esta película figura como una de mis películas favoritas, lo que no se puede decir lo mismo de sus secuelas.

Esta película solo se podría resumir en una canción:

"Hay un amigo en mí
Hay un amigo en mí
Cuando eches a volar y tal vez añores tu dulce hogar
Lo que te digo debes recordar
Porque hay un amigo en mí
Sí, hay un amigo en mí

Hay un amigo en mí
Hay un amigo en mí
Y cuando sufras aquí me tendrás
No dejaré de estar contigo, ya verás
No necesitas a nadie más
Porque hay un amigo en mí
Hay un amigo en mí

Otros habrá tal vez mucho más listos que yo
Eso puede ser, tal vez
Mas nunca habrá quien pueda ser
Un amigo fiel y tú lo sabes

El tiempo pasará
Lo nuestro no morirá

Lo vas a ver, es mejor saber
Que hay un amigo en mí
Hay un amigo en mí
Hay un amigo en mí"

Es una carta de presentación de unos personajes impresionante. Llena de magia, amistad, cariño, ternura, unos personajes entrañables, un malo más malo que nunca, algo de drama y mucho de humor y comedia, Steve Jobs, con su compañía Pixar, junto a Disney, nos traen una de los mejores películas de todos los tiempos.

Antes de la 2º, 3º y 4º, esta tenía un 10. Pero, se queda en un 8 porque sus secuelas superaron a la original en muchos aspectos y en tramas. Además han sabido llevar al cine a estos personajes de una forma magistral, elevando sus evoluciones y maduraciones, incluso llevando la máquina de conflictos al extremo.

Pero, "Toy story I", la sigo considerando un éxito y una película importante que se convirtió en un clásico en la animación contemporanea para siempre.

Toy Story, como muchas películas de animación, va mucho más allá del simple divertimento para niños. Por eso, este largometraje no solo destaca por ser el primero de Pixar y el primero animado únicamente con efectos digitales. Y en esta pequeña crítica, quisiera centrarme en un aspecto de la cinta: el tema de la realización personal.