Los timadores

Timar, timan un montón. Sobre todo entre ellos, y a sus vidas. Buena película de género. Actores magníficos así como buena dirección.
Lo mejor: La Houston, que sobrecoge por su maldad-frialdad.
Lo pero: Reiterativo en el engaño madre-hijo quizás...

Ciertamente el que el director fuera Stephen Frears me ofrecía serias dudas sobre esta película. No me gustó nada "Las amistades peligrosas" aunque reconozco que está bien hecha. Me pareció horrible, delictiva, "Mi hermosa lavandería". Pero "The Queen" es más que aceptable y el planteamiento de "Los timadores" resulta tan atractivo que por fuerza tenía que ser agradable de ver. Pero al final los timadores han timado a los espectadores.

Porque en vez de timadores podían ser, por ejemplo, "Los Vendedores de Coches", "Los Fruteros", o "Los Electricistas". Una película con ese título, con tres timadores, cada uno diferente, con distintas especialidades, es que está pidiendo a gritos que se unan para hacer el timo del siglo. Una cinta ingeniosa, divertida, inteligente, con los protagonistas planificando y desarrollando metrculosamente el golpe.

Pero nada de eso. Los personajes, demasiado histriónicos, van de un lado para otro mostrando sus neurosis o complejos, los trapos sucios familiares, pero de una manera muy superficial, del todo intrascendente. Todo sin ritmo, sin una trama desarrollada, a saltos. Casi se sacan de la manga una rivalidad forzadísima entre los personajes todo para que haya algo de emoción en la cinta, claro está, sin conseguirlo.

El resultado final resulta hasta grotesco, entre otras cosas, por la profunda amoralidad de los personajes. Quizás lo único positivo de esta película son los diálogos de John Cusak con su madre, el único momento en que el director plantea con realismo el mundo del delito y el engaño y la idea de la rehabilitación o condenación que trasciende hasta el final.

Esta buena película alcanzó cierta notoriedad en su época, y cuatro nominaciones a los Oscars (la dirección de Stephen Frears, el guion adaptado de Donald E. Westlake sobre una novela de Jim Thompson, Anjelica Huston como principal y Annette Bening como secundaria).

Es una de las más destacadas en la amplia y exitosa carrera del director británico (“Las amistades peligrosas”, “Alta fidelidad”, “The Queen”…). La cinta resulta interesante, al presentar de forma original y minuciosa la personalidad de los tres protagonistas, muy bien interpretados, especialmente las dos mujeres: Una Anjelica Huston que había ganado el Óscar como secundaria cinco años antes por “El honor de los Prizzi”, y una deslumbrante Annette Bening como mujer fatal. El pulso entre los personajes de ambas, que se odian profundamente, y el entretenido juego de astucias que desarrollan los tres, unidos a la conocida pericia de su director y a una buena factura técnica hacen del film una buena experiencia cinematográfica.

Peliculaza que se soporta por cuatro pilares sólidos como rocas, como son sus inolvidables personajes y la tremebunda historia que se establece entre los tres, tan llena de ambición y maldad como carente de escrúpulos, despojando del típico glamour novelesco a lo que al fin y al cabo no son más que gangsters bien vestidos y convirtiéndolos en personajes de los que es mejor mantenerse alejado o verlos en esta estupenda peli.

Interesantísima película la que nos produce aquí Martin Scorsese y nos dirige Stephen Frears, con un trío de actores en estado de gracia. El hombre de la peli es el siempre eficaz y competente John Cusack, debilidad mía desde hace tiempo, actor sencillo y para nada dentro del club de los que se creen megaestrellas, que nunca deja una mala actuación. El actor decidió cobrar mucho menos de lo que en él es habitual sólo por poder participar en esta película, ya que era fan de la novela en la que está basada e, incluso, ya siendo sólo un veinteañero quería hacerse con los derechos de la misma. El actor se ve aquí entre dos mujeronas de armas tomar como son la especialmente sexy aquí Annette Bening, actriz maravillosa que no se corta a la hora de enseñar su anatomía y su buen hacer como actriz, y una espectacular Anjelica Huston con un look impresionante que te deja con la boca abierta. El duelo de estas dos actrices es la que te hace seguir la película sin querer perderte ni un sólo diálogo. Cine negro con una magnifica banda sonora de Elmer Bernstein que sin duda tiene el sello de este veterano compositor. Muy recomendable.