Haz click aquí para copiar la URL

El séptimo sello

Drama Suecia, mediados del siglo XIV. La Peste Negra asola Europa. Tras diez años de inútiles combates en las Cruzadas, el caballero sueco Antonius Blovk y su leal escudero regresan de Tierra Santa. Blovk es un hombre atormentado y lleno de dudas. En el camino se encuentra con la Muerte que lo reclama. Entonces él le propone jugar una partida de ajedrez, con la esperanza de obtener de Ella respuestas a las grandes cuestiones de la vida: la ... [+]
<< 1 10 11 12 20 48 >>
Críticas 239
Críticas ordenadas por utilidad
13 de septiembre de 2011
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Habitualmente paso de la visión de la película a la votación y a mi crítica escrita con la menor contaminación posible. En esta ocasión, para variar, he leído primero aquello que pensaban mis coleguillas de FA. Mi opinión primigenia, respecto a "El séptimo sello", no ha variado en absoluto; aunque tal vez sea por la amplia coincidencia y la admiración casi general que despierta la, posiblemente, mejor historia medieval que se haya contado nunca en pantalla. Algunos compañeros que confunden lo de crítico con cítrico, y se ven obligados a insultar si no les gusta o no entienden lo que ven, deberían relajarse cuando un tipo de cine no les llega y olvidarse de exigir explicaciones que satisfagan sus elementales instintos. Negar el séptimo sello, y perdonad la comparativa, es como negar un orgasmo por no conocer exactamente qué procesos químico-nervio-mentales intervienen en su consecución.

Es posible que yo tampoco sea capaz de descifrar toda la carga filosófica que el guionista y realizador quiso verter sobre el papel y el celuloide, pero es que ni siquiera me lo planteo; sé como cualquier inteligente mariposa que hay flores que no debo chupar. Aún así no considero que ésta sea de una disquisición excesivamente complicada. A veces nos obcecamos y buscamos respuestas incluso donde no hay un germen de pregunta.

Yo, que cursé estudios infantiles en una aldea sin luz eléctrica y sin agua corriente, entre animales tan salvajes como yo, viendo de noche el crepitar del fósforo en el cementerio y frente a caminos que podían llevarte a un lejano lugar donde acaba la Tierra; entiendo perfectamente los temores y cavilaciones de Bergman y de Antonius (Max von Sydow) ante el merodear de la muerte, los intentos por evitarla y la inevitabilidad, aunque el castillo parezca inexpugnable, una vez que ha puesto una cruz sobre tu nombre y la hora en que tendrá lugar el jaque -mate.
Sinhué
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3 de febrero de 2019
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Para un espectador que vea por primera vez la aclamada obra ( como tantas otras) del ya histórico director Ingmar Bergman “El Séptimo Sello” o que incluso nunca haya oído hablar o indagado sobre cuestiones tan disparatadas como pueden ser a priori el sentido de la existencia o el absurdo de la vida probablemente se queden estupefactos ante lo que se encuentren en la pantalla cuando visionen esta película. Algunos consideraran la opción de dejarla a la mitad por aparente falta de sentido, otros barajarán la alternativa de hacerse una investigación en profundidad sobre lo planteado por este “descerebrado” en la historia delante de sus pupilas e incluso algunos curiosos puede que, picados por el gusanillo de la certeza de saber que lo que se le está planteando ante sí supone una de las cuestiones más trascendentales que se ha debatido constantemente a lo largo de la historia de la humanidad, decidan aventurarse a descifrar esa llamativa sensación de apatía y angustia que envuelve el halo de un arrastrado caballero que vaga de vuelta a casa sin motivación alguna tras regresar apesadumbrado de las Cruzadas en la Suecia medieval.

Ahora bien, sea cual sea la reacción producida en cada cual, es de obligada advertencia comunicar que nada de lo visto en esta película podrá dejarte indiferente, ya sea para bien alabando la osadía de su planteamiento ( y más si tenemos en cuenta la época en la que fue estrenada) o para mal considerando que este autor se ha devanado demasiado los sesos para al final dejarnos con la misma incógnita y sensación amarga con la que empezamos a estudiarla. Como veis, una cosa es segura, y es que puede que si aún no la has visto pocas películas vayan a dejarte igualmente conmocionado como lo hace la presente cinta en comparación con los refritos prefabricados que nos quieren vender actualmente como revolucionarias.

“El Séptimo Sello” constituye una de estas obras que aúna de manera soberbia la conjunción de una narrativa rica llena de significados y simbolismos con un aspecto formal determinante para añadir la carga dramática y emocional que pretende el cineasta. Al contrario de lo que pueda pensar el espectador, no se trata ni de una historia bíblica ni basa su contenido puramente en la religión, aun que esta se vea envuelta. La clave que se esconde detrás de esta alegoría (y que posteriormente influiría sobremanera en la filmografía de otro de los grandes de nuestro tiempo como es Woody Allen) es uno de estos temas inmortales que por más que cambien las costumbres y los tiempos en las sociedades siempre se mantendrá común a las inquietudes de cada persona. Estamos hablando, sin lugar a dudas, de la condición postmoderna del sentido de la vida y como consecuencia de la ausencia de respuesta ante tal pregunta, del absurdo de la existencia ( temas ya iniciados por Kierkegaard y Schopenhauer).

Todo elemento en esta historia se dispone como soporte para entender este planteamiento filosófico que Bergman establece perspicazmente desde el primer momento de la película cuando hace que la muerte visite al caballero para reclamarlo ante la desidia de este tras quedar horrorizado de lo vivido en las Cruzadas (podemos suponer). Se construye así una dialéctica entre ambos personajes, un juego con dos opciones pero que, como en aquella partida de ajedrez, el movimiento de las piezas solo va a posponer el inevitable final, la muerte. Ante esta inevitable certeza de la cual no es posible escapar, solo queda preguntarse ante el sentido de la existencia, de lo vivido y lo que está por venir, lo que nos espera al otro lado de la puerta. Es curioso comprobar cómo el cura al que acude el caballero está representado también por la muerte, como aludiendo que la religión y la muerte conducen a lo mismo, esto es, a la nada ( o si se quiere por otro lado a una “verdad” protectora) o como de igual manera los únicos personajes que se acaban salvando son la familia de José y María con su hijo, dejando entrever que este supondría el salvador tras la devastación sembrada por la peste como una especie de castigo divino ante los pecados cometidos por el hombre en las cruzadas.

Con este fabuloso marco histórico de referencia, Bergman se sirve así para exponer no un suceso medieval ni bíblico si no algo tan profundo y universal como el mismo sentido de la existencia, para plantear que significa la condición individual del “yo” cuando la muerte es una realidad incuestionable. Una reflexión sobre la condición humana que ya supone una obra emblemática para la historia del cine, donde al igual que con José ( el comediante que se reía de la vida y que era el único que más cercana veía a la muerte) nos es revelado la paradoja de nuestra presencia, el absurdo de la existencia.
Diego Cova
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
27 de mayo de 2019
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Realmente cuando estaba a punto de ver esta película, no estaba muy seguro de que pensar ya que todas las reseñas que había leído sobre esta, solo había visto críticas positivas así que la conseguí y me atreví a verla y solo puedo decir que estoy impresionado, no necesitas de los mejores efectos especiales ni de la mejor cámara para hacer una obra de este calibre y te das cuenta de que lo más importante de está película recae en el guión, en las actuaciones y dirección y así debería ser con todas. Es una de mis películas favoritas de todos los tiempos, esta llevada a cabo de una manera magistral y este debería ser el tipo de cine que más seguido debemos de ver en el cine.

Sin importar que seas una persona religiosa o no está película toca temas que siempre han intrigado al ser humano como lo es la: Bondad y la maldad y como está se presenta en nuestras vidas de una forma u otra; Es una película que nos habla acerca de la fe y de como está ha estado presente en la humanidad desde el principio de los tiempos, nos habla también del miedo a la muerta ya que no sabemos que sea lo que siga después de nuestra vida terrenal.

La metafísica es sin duda uno de los puntos centrales de está película ya que la muerte nos es presentada como la antagonista de está historia, la historia nos ofrece personajes muy entrañables e interesantes, en lo personal me encanta el tono y el guión de está película, me encanta este cine.

Trata acerca de la travesía de un caballero llamado Antonius Block que junto a su escudero regresa de las cruzadas y nos encontramos con una Suecia en plena peste negra, en ese momento espléndidamente representada aparece la muerte, así que nuestro protagonista la reta a una partida de ajedrez en la cual apuesta su vida y esto nos puede hacer pensar de algunas formas ya que la vida es un juego donde básicamente tratamos de no morir pero sin embargo este es un juego que nunca vamos a ganar, de una forma u otra.

Sin duda alguna puedo decir que es una de mis películas favoritas, la dirección es increíble, tiene unos planos preciosos, las actuaciones son magistrales, en mi opinión la muerte de Ingmar Bergman es uno de los mejores personajes que el cine nos ha presentado, el guión es sublime, el director supo llevar a cabo esta historia fantástica.

Héctor Abraham

CSYH
Abraham Herrera
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
5 de mayo de 2020
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Quiero entender, no creer. Esta premisa ha acompañado al ser humano a lo largo de su existencia. Durante siglos ha intentado abordar desde su punto de vista los entresijos de la vida y de la muerte, responderse a las preguntas que nos hemos hecho todos alguna vez, si hay algo después de la muerte o no hay nada.

El protagonista de la película no es distinto a cualquiera de nosotros. Bergman sitúa su historia en la Suecia del siglo XIV, pero perfectamente podíamos estar hablando de la actualidad, porque realmente esta es una historia atemporal. Un caballero vuelve de las Cruzadas atormentado y lleno de dudas por toda la sangre y muerte que ha visto en Tierra Santa, luchando para un Dios que permite el sufrimiento de la gente y que aún por encima difunde una plaga terrorífica como es la peste negra, que asola toda Europa dejando a su paso solamente muerte.

En ese tiempo agitado, nuestro protagonista es visitado por la muerte para llevárselo, pero el caballero le propone una partida de ajedrez. Si gana la muerte, se lo lleva, pero si gana el caballero, lo deja vivir. Realmente es una argucia para ganar tiempo, para tratar de entender las preguntas que le aterrorizan y le atormentan. Me parece sencillamente maravilloso, jugarse vivir o morir con la muerte jugando al ajedrez.

La fe en Dios es recurrente durante toda la película (realmente en toda la filmografía de Bergman), mientras el caballero y su escudero van conociendo a diferentes personajes que se unen en su trayecto de vuelta. La mayoría de ellos fervientes católicos creyentes, que no piensan en nada más que el salvar sus almas pecadoras porque llega el juicio final. Otros sin embargo, también intentan creer en algo más que las tonterías que dicen los sacerdotes y los monjes sobre Satanás, incluso quemando mujeres inocentes a su paso.

Mención a parte merecen los dos personajes que al final consiguen evitar a la muerte, María y José con su niño pequeño. Una metáfora enternecedora del genio Bergman. Desde un principio, nos muestran a estos dos personajes puros, llenos de vida, incluso José tiene visiones de la Virgen con un niño y pudiendo ver a la muerte, a diferencia del resto de personajes. La salvación de la humanidad pasa por ellos, por su descendencia. Me parece sencillamente antológico, digno de un genio como es Ingmar Bergman.
Bermu
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de mayo de 2005
9 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con "El séptimo sello", Igmar Bergman creó una de las piezas más fabulosas de la historia del cine, considerada una de las mejores obras del director sueco. La película nos presentará a un caballero tratando de retrasar su muerte con una partida de ajedrez contra la pálida dama (aunque aquí es un pálido señor): de esta forma va prorrogando lo inevitable, buscando en la Suecia medieval algo que pueda dar sentido a la vida, enunciando las más antiguas preguntas sin respuesta, como que hay detrás de la muerte, o si existe un Dios de alas inmensas que nos ampare. A través de su aventura, el caballero y su escudero se cruzarán con diversos personajes y vivirán multitud de experiencias, todas ellas memorables: desde momentos de felicidad tintados de un lirismo rural a tenebrosas escenas de muerte, pasando por momentos humorísticos y livianos. Al terminar "El séptimo sello", queda un sabor agridulce pero agradable, que es consecuencia de una película maravillosamente estructurada, lírica y con unas actuaciones fabulosas. Obra maestra indiscutible.
Barón Vadeaux
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 10 11 12 20 48 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow