Cabezas huecas

Sin lugar a dudas, una de las mejores y más gamberras comedias de los 90, que nos cuenta el secuestro de una emisora con armas de pega por unos nobles, pero descerebrados miembros de una banda de rock, para que retransmitan una maqueta suya, tras elucubrar que esa es la única y más rápida forma de que el público conozca su obra.
Dirigida, por el unas veces acido y las más irregular Michael Lehmann, y con un casting de verdadero lujo (aparte de unos divertidísimos Steve Buscemi, Brendan Fraser y Adam Sandler, con el cojonudo contrapunto de Joe Mantegna, como el resabiado disc jockey, cabe destacar al injustamente menospreciado Michael Richards, como el escaqueado del secuestro, que se pasa toda la película de escondite en escondite, en un papel prácticamente calcado de su Kramer de Seinfeld).
Absolutamente recomendable.

Sin dudas, el paso del tiempo afecta favorablemente a una cinta. Me refiero solamente al impacto que generó en un determinado público la temática tratada en éste film. El "Rockero-Heavy" que hace lo imposible por hacer conocer su música, algunos tips propios en los dialogos, el humor basado en la ignorancia de los protagonistas, ( por algo la tradujeron "Cabezas Huecas" ) Situaciones bizarras, y divertidas. Aun así, en la lejanía del estreno, miramos esta película sin la dura vara para medir, y disfrutamos a estos hoy famosos actores, en sus inicios, con una sonrisa de aprobación.

Es una gran comedia. Sin pretensiones, pero entretenida. Una de esas pequeñas joyas de los noventa, época en la que se hacían películas que no pretendían cambiar el mundo o gustar a los críticos casposos de turno, pero que tenían corazón. Es una comedia amable que te hace revivir la ingenua rebeldía adolescente del rock. Para mí será siempre una de esas pelis que te levantan el ánimo un domingo de resaca o en las horas previas a dar un concierto (en la línea de "Escuela de Rock", pero, sin doblaje por favor). Si sólo tiene un 5 es porque muchas veces la gente vota con delirios de grandeza y las gafas de pasta atornilladas al entrecejo, no se puede valorar desde el mismo punto de vista, "La Casa de los Espíritus" y "Road Trip"; o "Ninotchka" y "Borat" . Lo dicho, muy recomendable para rockeros, jóvenes y viejos, con ganas de pasar un rato agradable.

Pues eso, una comedia de heavys fracasados que montan un pollo de la leche para que pongan su maqueta en la radio y así hacerse famosos. Sin pies ni cabeza, pero tampoco se lo puedes pedir a la historia para que tenga gracia. A la película le salvan las interpretaciones y los diálogos, que son buenos

Pero sin duda, para que guste tiene que haber a tu alrededor colegas y litros.

Vi esta película sin expectativa alguna ni lectura de críticas ni valoración del público ni siquiera cuanta taquilla hizo simplemente la vi por su trío actoral principal. Actores que a mí personalmente me gustan bastante y que en esta película me han sorprendido. Viniendo de la reciente y horrenda Billy Madison de Adam Sandler ya me esperaba cualquier cosa de esta cinta y la verdad es que me ha sorprendido gratamente sin llegar a ser una joya.
Los tres protagonistas roban el show con momentos altamente desternillantes y aunque estén pasados de vueltas los tres con muchas cosas improvisadas y sobreactuadas si llegan a hacer reír a diferencia de otras películas y sobretodo entretiene y mantiene toda la cinta en vilo pese a que el espacio de la cinta sea tan pequeño como una emisora de radio y alrededores.
Sin tener un guión que sea original si parte de una interesante premisa donde traslada ese mensaje con críticas hacia la música comercial y el enchufe que hay en el mundo musical incluyendo el playback, que a modo de sátira se meten con esos temas y es algo que personalmente me ha gustado bastante y que eleva aún más la aparentemente simple película.
En definitiva, Sandler, Buscemi y Fraser llevan todo el peso de la película con mensaje incluido pese a que las dos chicas florero entorpezcan el desarrollo de la trama y no te rías tanto dentro de lo que cabe. Interesante.