Alicia o la última fuga

Estaba acostumbrado a ver mucho psicópatas, personalidades retorcidas, y locura del mundo real en cada película de Claude Chabrol, sin embargo en esta, se mezcla la fantasía con el surrealismo, y nadie parece ser malo, simplemente están ahí por alguna razón. Los primeros 20 minutos uno piensa que será la típica historia de la mujer secuestrada por un excéntrico millonario, pero poco a poco vamos entrando un una lógica que no es de este mundo.

Murallas que un día existen y otro no, portales que se abren por la noche, personajes que aparecen y desaparecen, niños que no parecen niños, escenarios de ciudades que se asemejan a una pesadilla sarcástica y no a la realidad. Un cierto aire a Stalker de Tarkovsky, en esa "Zona" donde la lógica pierde sentido.

La mujer, que si bien es una actriz bonita, pero un tanto inexpresiva, le cae como anillo al dedo el papel, por la indiferencia con que trata a los personajes que la rodean e intentan perturbarla sin éxito.

El final no lo esperaba, pensé primero que había viajado en el tiempo, que estaba en otra dimensión, luego que el millonario viejo era una especie de fantasma o vampiro que aparecía en diferentes fases de su vida (niño, joven, adulto y viejo) y finalmente se nos revela que está en el purgatorio, justo luego de morir. La pobre mujer, finalmente fue condenada al infierno en un solemne descenso por la escalera al oscuro sótano de la mansión que no deja lugar a dudas.

Como contras, algunas actuaciones un tanto livianas, sin mucho esfuerzo por transmitir los sentimientos de los personajes. También le falta una introducción que nos explique mejor la personalidad de la mujer de la cuál sabemos poco y nada. Pero se soporta, no aburre, y el final deja buen gusto.