Donde caben dos

Muy poca cosa la película de Paco Caballero. No es que un servidor esperase gran cosa del producto en sí, pero teniendo en cuenta que Kiki, el amor se hace, habia supuesto una sorpresa en el panorama español, uno si se esperaba algo más inspirado que una comedieta prototípica.

Partimos de la base de que el sexo como herramienta de atracción para el público puede funcionar. Películas como Instinto Básico, Toc Toc, Kiki el amor se hace o incluso Anticristo, han jugado previamente con este elemento como parte de la historia y han supuesto grandes éxitos tanto en lo financiero como en lo profesional. En España, por poner un ejemplo, incluso hay películas que intentaron en su día utilizar un nombre vinculado a lo sexual (Semen: Una historia de amor) para intentar alentar más al público.

Pero, en Donde Caben Dos hay poco donde inspirarse. Partimos de que el film intenta jugar a una especie de Robert Altman de Swingers. Los personajes están poco desarrollados, salvo un par de pinceladas (el que antes era un fiestero y ahora lleva traje y habla en inglés, las que fuman porros, el que no se encuentra así mismo, el seco, la confundida). Sinceramente, nada que no se haya visto antes.

Las historias podrían tener su aquel, pero tampoco tienen ningún tipo de profundidad ni gracia. Como han dicho TODAS LAS CRÍTICAS, se podría exceptuar la única historia que no ocurre en el bar de swingers, que aunque a mí tampoco me pareció del otro jueves, si que es cierto que tiene algo más de mala baba y da alguna sorpresa. En el aspecto negativo, sin dudarlo la historia de los primos, carente de sentido o gracia, pese a tener a dos grandes actores y que más que provocativa queda en patética. La historia del glory hole tampoco me llamó la atención (principalmente se revolotea sobre el mismo tema durante toda la duración del metraje, sin profundizar un ápice en nada) mientras que las de las parejas que se intercambian con Arévalo y Echegui...pues bueno, alguna idea buena pero la realización plana como el resto. La otra, una copia de Resacón en las vegas. Ingeniosa poner la idea aquí, pero se le saca poco jugo al volver a estar plagada de los estereotipos.

Los actores eso sí ponen todo el caché que tienen (sobresaliendo como siempre Luis Callejo que es una JODIDA HACHA INTERPRETATIVA). Nadie queda en excesivo ridículo aunque bien es cierto que otros (Ricardo Gómez por ejemplo) no están tan inspirados (tampoco es que el personaje facilite las cosas).

Por otro lado, y COMPRENDIENDO QUE SE SUPONE QUE ES UNA COMEDIA, uno no se ríe más que una o dos veces. Los diálogos no son más que comparsas para intentar dotar a cada personaje de un extremismo (ya sea sexual o convencional) que sinceramente no funciona. Algunos de ellos (Miki Esparbé o Verónica Echegui) además cambian repentinamente sin sentido, sin que el espectador sea capaz de conectar con ellos y sin que nadie entienda por qué hacen lo que hacen.

Otro par de cosas que quería comentar:

-No hay NINGUNA explicación de por qué una pareja iría a un club de swingers, salvo por la liberación sexual o por los clásicos ¨problemas de pareja¨. Ningún personaje se sale de la ecuación habitual en ese aspecto.
-A diferencia de Kiki (dónde los personajes se intentaban comprender tanto a ellos, como a sus parejas y sus filias) aquí nadie intenta reflexionar sobre su sexualidad o sobre las razones que les han llevado al sitio.
- QUÉ OBSESIÓN CON QUE EL BARMAN DEL LUGAR TENGA QUE SER UN SALIDO OBSESO CON LAS INSINUACIONES SEXUALES. Ocurre más que a menudo en esta clase de películas, que cualquier persona que trabaje en el sitio en sí, tiene una conducta lasciva contra los CLIENTES. Es como si una película se ambientase en un sex shop y el dependiente le metiese un consulador por el culo a los clientes nada más entrar. Además de ser una conducta harto inapropiada para los clientes, espantaría a cualquiera que tuviese sus dudas o inseguridades sobre el lugar (claro que en esta película esta clase de personajes no aparecen).
-No se profundiza sobre como la sexualidad, las parejas y demás nos pueden cambiar.
-Todo el eroticismo y lo sexual, se limitan a oír constantemente gemidos y ver de pasada a gente teniendo sexo fingido. Es principalmente lo que ocurre. Eso y el cartel con todos los actores en supuesto momento de éxtasis orgásmico. El resto nada de nada. Ni provocador, ni incisivo ni nada.
-Último, que manía con jugar con la dicotomía de personajes (o son unos salidos que buscan en todo momento follar o son unos inseguros y tradicionales) ¿No podrían haber jugado con algún personaje intermedio? ¿Tanto daño habría hecho?

En fin, sinceramente no merece la pena. Es un intento y se agradece, pero es un intento demasiado simplón y de humor blanco como para darle una oportunidad.

Son las diez de la noche, enchufo Netflix y entre todo el fastfood aparece este titulo. Me apetece reírme un rato. Miro las votaciones de filmaffinity... 5.6 bueno...lo normal para este tipo de producto. No baja de 5, se podrá ver sin cabrearse, me vale. Pongo el tráiler y aparece Ernesto Alterio en una escena que me recuerda gratamente a "Perfectos Desconocidos". También sale Raúl Arévalo. Vale, pienso que al menos me reiré un rato. Vamos. Le doy al play y muerdo el anzuelo... oh no!. Lo siguiente son casi 2h de un tedio infinito. Todo el elenco de actores españoles actual dentro de la misma película, 3.9 MILLONES DE EUROS!, Netflix por el medio y este señor llamado Paco Caballero hace este despropósito. Tengo que decir que me gustan las comedias españolas, les pido poco, con reírme al menos 10 veces, ya me vale. Pasan los minutos, 15min, 30min y aun no me he reído ni un poco, ni una ligera mueca, esto va mal...empiezo a suspirar, los personajes me empiezan a caer mal, buff, buff. Todo el elenco de actores haciendo de si mismos, todos en los mismos papeles que les hemos visto mil veces, encasillamiento máximo, diálogos insoportables, 0 ritmo, 0 gracia, todo a 0. A falta de 20min la quito. No puedo mas. La meto en mi lista de Peores Películas y me pongo a escribir esta critica para desahogarme un poquito. Pienso en que lleva a este director a realizar esta película. El tío tendrá una voluntad, algo de determinación ¿querrá reflejar sus inquietudes? imagino que alguna, ¿Sus deseos?, ¿alguna intención?, ¿algún objetivo?, ¿alguna finalidad?, ¿alguna aspiración?, ¿interés?, ¿ánimo?, ¿idea?, ¿plan? ¿un encargo? ¿la cosa se torció? ¿perdiste el interés?. Hasta nunca Paco Caballero.

Hasta la fecha Paco Caballero ha dirigido un poco de todo, empezó como la mayoría de los directores con los cortometrajes, luego dirigió varias series de televisión y hace unos años nos presentó su opera prima. "Perdiendo el este" es una comedia que sirve como secuela de "Perdiendo el Norte". Ahora nos presenta su último trabajo, una película sobre el mundo de las relaciones de pareja y sobre lo difícil que es hoy en día separar el sexo del amor. El guion está escrito por el propio Paco Caballero junto con Daniel González, Eric Navarro, Eduard Solà.

La historia se divide en varios episodios, vemos desde una novia desesperada, porque acaba de perder el anillo de compromiso, tras una noche de desenfreno, hasta una pareja atrapada en la rutina que decide pasar una noche loca, dos primos separados desde la infancia y un grupo de amigos que quieren experimentar cosas nuevas. Toda la trama transcurre en una sola noche y es en esa noche donde los protagonistas descubrirán como va a transcurrir el resto de sus vidas.

La película engancha desde el principio, sobre todo gracias al gran elenco de actores, cada uno tiene un papel que se desempeña a las mil maravillas. Vamos pasando del drama a la comedia en todo momento. Como en todas las películas que se dividen en varias tramas, unas funcionan mejor que otras. Algunos giros funcionan muy bien y pillan por sorpresa al espectador. Caballero juega muy bien con los espacios y con la forma de dirigir. Destaca sobre el todo el uso de las sombras.

Estamos ante la comedia picante del verano, el cartel ya te indica donde te metes, pasaras un rato más que agradable. Sobre todo, es recomendable ver la película con la mente abierta y desprendiéndote de los problemas del día a día. Cabe destacar las escenas de los créditos finales, de los más divertidas vistas en mucho tiempo. Aunque no es una película redonda, merece la pena acercase al cine a verla. La cinta hace un pequeño homenaje a otras películas como Airbarg y Resacón en las Vegas. El club de intercambio de parejas donde transcurre casi toda la película espectacular. La música también me ha gustado bastante.

Lo mejor: Los títulos de crédito finales.
Lo peor: Que el espectador espere otra cosa.

Pueden leer esta crítica con imágenes y contenidos adicionales en: http://www.filmdreams.net

Con la sombra de ‘Kiki, el amor se hace’ en mi imaginario, ‘Donde caben dos’ se me antojaba como una película que intentaría emularla en el tono pero a la vez (por su premisa) satirizaría y juzgaría mucho a todos los personajes. Y justo ahí es donde personalmente creo que la película triunfa.

Todos los personajes están muy humanizados y los gags cómicos funcionan a la perfección. Me parece que para el tipo de película que es, arriesga mucho. Hay una reivindicación sana del deseo como pocas veces he visto en la gran pantalla. Se integran temas como el intercambio de parejas, las relaciones no monógamas o el incesto desde la más completa naturalidad. Y el contar con tantas caras conocidas interpretando este guion hace que uno se replantee cosas y tenga ganas de debatir al terminar el visionado.

Mención especial a las interpretaciones de Pilar Castro, Verónica Echegui y Aixa Villagrán y también a la deliciosa selección musical.

Por poner un pero, el speech del final me parece que subraya innecesariamente algo que la película ya ha contado (y bien) a lo largo de su metraje.

Una peli ligera, tremendamente actual, necesaria y recomendable.

Una vez más me reitero en que cuando en una película se habla más de sexo de lo que se practica, mala película es. En esta ocasión, al menos la trama no parece improvisada, y las actuaciones son aceptables. Hay por ahí cada comedia española llena de presentadores de televisión, monologuistas y humoristas varios, que no hay por dónde cogerlas.

Quien espere ver sexo en esta producción, se va a llevar un chasco. Alguna tetilla se ve, pero en todas las escenas salen con calzoncillos o tanga.

Por lo demás, es lo esperable en este tipo de temática: personas que se enfrentan por primera vez a una situación sexual distinta de la habitual, e intentar hacer un chiste con ella. Metes cuatro o cinco de esas situaciones, y ya tienes hecha una película de fragmentos. Las unes con un hilo conductor (en este caso un local de intercambio de parejas y más), y a correr. Así se hacen películas como churros.