Haz click aquí para copiar la URL
Antigua y Barbuda Antigua y Barbuda · Fea
Críticas de Rodolfo Lasparri
1 2 3 4 5 10 13 >>
Críticas 61
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
9
10 de enero de 2016
60 de 73 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo que realmente sorprende de esta película es el inteligente uso de la técnica al servicio de la narración. La insistencia con los planos secuencia, la constante dorsalidad del protagonista y el uso del fuera de campo confirman que la posición de la cámara es una elección moral y no estética. Dicho de otra forma, los planos no están allí porque “quedan bonitos”. Los planos tienen una función clara al margen del texto y las carantoñas de los actores. Damas y caballeros, les presento algo en peligro de extinción: cine puro y duro.

Tres hurras por László.

- No cortes, leches.
El plano secuencia te aleja del corte, del montaje, del cine, y por contra, te acerca al terreno del teatro, del relato sinfín. La proyección de uno mismo es inmediata y palpable. El tedio, el silencio, lo que no-interesa y lo que no-sucede son retratados y filmados. Con el plano secuencia se aumenta la sensación de estar allí.

- La dorsalidad nos condena.
Su espalda nos obliga a ir siempre detrás. A perseguir. A no ver. A no llegar o a llegar tarde. A no estar donde-toca. Cierta sensación de hacerlo mal. De perder el norte. De perder el sentido. Y sobre todo, de ser un perro. Un perro atado a no más de un metro de distancia. La relación de ideas es inmediata. Correas para ellos, cadenas para el público. Es difícil no tener sensación de asfixia. De agobio. De desconcierto. De cárcel. De campo de concentración. Por más que quieras, László no te suelta. Esa sensación queda evidente con el último plano. El bofetón es casi milagroso. No lo digo yo, lo dice la cámara.

- Y lo mejor. Querer ver y no poder.
¿Porque no ver? Venga va. Hagamos un ejercicio de sinceridad y huyamos de esas lecturas manidas sobre la construcción del horror en nuestra imaginación. Algunos no somos tan brillantes como para asustarnos de lo que imaginamos. Lo que realmente inquieta es no poder ver. El cerebro en su actitud insaciable quiere resultados. Quiere saber el final de las historias y sobre todo quiere ver los peligros que hay a su alrededor. No ver, se percibe con impotencia, vacío y sobretodo, desesperación. Uno se pone realmente nervioso. El acierto para acercarse a ese infierno nazi es innegable. No ver, afecta directamente a nuestra voluntad y por ello a nuestra libertad.

Lászlo Nemes en su opera prima y mediante un uso inteligente del lenguaje, nos encadena y nos priva de la libertad de ver. No se si es la mejor forma de acercarse a Auschwitz, pero sin duda es de las más sensatas y decentes. Y a estas alturas, sorprender con "otra película de nazis y judíos" no es nada fácil. Hip! Hip!

¡Ah! y lo que diga Boyero, ni caso.

¡Hurra!
Rodolfo Lasparri
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
22 de enero de 2015
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
El director Juan Taratuto cambia de registro y empieza a ganarse la simpatía de una parte del público que andábamos un poco distantes con sus comedias hiperdialogadas, característica casi imprescindible del cine de éxito argentino. Hoy, el giro es, prácticamente, de 180 grados. Nos encontramos ante un drama de pocas palabras y de una profundidad emocional que se agradece. El caso, es de tal seriedad, que quien firma, prefiere no juzgar aquello que se le escapa de su universo particular; el contenido propio del film en relación a la muerte de un ser querido.

Es fácil encontrar la muerte en el cine. El proceso de banalización que la transforma en espectáculo, circo, entretenimiento o herramienta narrativa para dar giros en las historias que se nos cuentan forma parte del ADN de cualquier guionista. La muerte, siempre presente, funciona como arma para hacernos reír o para hacernos llorar, o para lo que quieran, pero siempre tiene un fin. Son pocas las veces que alguien trata con su convivencia sin buscar ese llanto o esa risa o ese fin. En fin. Sin ninguna pretensión dogmática la película de Juan Taratuto, narra una historia que no se la puede catalogar con conceptos al estilo de triste, reflexiva o contemplativa. Es, en todo caso, una historia vecina, amiga o conocida.

Tras la devastación emocional que supone la desaparición de un ser querido, ¿qué queda? Algo parecido a un desierto. Un desierto donde se aconseja construir un castillo tarde o temprano. La reconstrucción, que nos señalan ya desde el título, trata de este mismo proceso para juntar una pierda con otra. En este caso, el cartel es revelador. Un abrazo con otro.

El actor Diego Peretti se lleva el aplauso por doblete. Por protagonista y co-guionista. Es quien le da forma a ese Eduardo deambulador que come con las manos y ya no repara en las formas. Queda clara así, la total implicación del actor con este proyecto, al fin y al cabo, pequeño.
Rodolfo Lasparri
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
16 de diciembre de 2014
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
El director James Gray, le pide por tercera vez, a Joaquin Phoenix que le ayude a contar una historia tan antigua como el polémico oficio. Hay dos tipos de personas, las que les gusta Phoenix y las que no saben aplaudir. The Immigrant, que así se titula en su versión original, trasciende fronteras y nos invita a mirar de cerca el vestido de la estatua de la libertad, donde encontramos barro, algo de sangre, y mucha mierda. Marion Cotillard, en una interpretación brillante, es la prota-que-agoniza. La incorporación de Jeremy Renner al relato se limita a cumplir con el protocolo narrativo, con intención de conseguir un tempo dramático exquisito. Gray lo consigue y puede presumir de magnetismo visual. Sin saber porque, el espectador cada vez pestañeará menos. Quedarse en el Lower East Side de New York de 1921 sería cantarle una sonata a la miopía. Gray nos habla de hoy. Nos habla de mujeres inmigrantes y de hombres que solo ven cuerpos desnudos.
Rodolfo Lasparri
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
16 de diciembre de 2014
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un hombre, una mujer y un director con ideas. Dos escenarios y algún foco sin trípode. Siete años de relación. Él quiere ser padre. Ella, madre. Ella hace fotos. Él no sale en ellas. Una oportunidad laboral para ella a 10.000Km. Una promesa: “en un año vuelvo y le damos vida.” Skype como testimonio, sacerdote, oxigeno y juez. Hay cosas que solo se pueden hacer hoy. Formato íntimo y de poca producción. Contra la crisis: austeridad, ideas y planos secuencia de 20 minutos. ¿Es la respuesta barcelonesa de la madrileña Stockholm (2013)? Sería decir demasiado. Las dos están entre lo mejor de nuestro cine actual. Las dos esconden grandes momentos. Las dos brillan. Eso si, al dúo Tena-Verdaguer, les falta ganar en vulnerabilidad. Aunque lloren, no se desnudan. ¿Era necesario meter los carteles en negro de los días transcurridos?
Rodolfo Lasparri
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
30 de noviembre de 2014
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Se habla del mejor trabajo de DreamWorks. Puede. Los objetivos son claros. Reír, soñar, creer y crecer, pero sobretodo volar. El equipo de rodaje convive, en todo momento, con las nubes. Saben de la envidia humana al pájaro y te dan alas durante dos horas. Pero alas de dragón. La chica, el chico, el padre, el simpático, el gordo o los gemelos se las pasan en el aire durante todo el metraje. Las texturas de la piel de los distintos dragones se pueden mascar. Los elementos como el fuego o el agua ya no son problema para la productora de Spielberg. Cierto giño a la espada laser y algún detalle más, hará que los seguidores de Star Wars vean en el joven protagonista, una especie de Luke Skywalker vikingo. Lo que le falla, y seamos sinceros, es que el dragón más mortal y único ejemplar de la especie “furia nocturna”, letal, mortífero, rápido, silencioso, invisible e implacable se llama “Desdentao” y no tiene carácter. Su parecido con el antiguo Stitch de Lilo&Stitch, da firma a sus creadores pero pierde peso y sentido en la historia vikinga. Por más que lo intente Dreamworks continúa haciendo pasteles de arándanos.
Rodolfo Lasparri
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 3 4 5 10 13 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow