"Una gran mujer", como se tituló en español. Es un drama impresionante visualmente, por su atmósfera, sus colores, la temperatura y la iluminación tan cuidados, que dibujan constantemente escenarios preciosos, fríos y cálidos, que se mueven a la par del desarrollo de los personajes. El verde y el vinotinto muy presentes. Además de eso y su estupenda fotografía, la película se ambienta en Leningrado (1945). Tras la Segunda Guerra Mundial la ciudad está en ruinas junto con el espíritu de sus ciudadanos. Entre ellas dos mujeres, Iya y Masha, que deberán cargar la fuerza para salir adelante con los hijos y reconstruir la ciudad. También es una película que habla sobre el amor no correspondido, la miseria y la desesperación cuando todo se ha perdido. Es demoledora y todos los elementos trasmiten muy bien el sentimiento de nostalgia y tristeza.

Una de las películas que más esperaba del 2019 y que afortunadamente pude ver en la corta edición del FICCI60, y una película de las que no se pueden perder. Ambientada en el Río de Janeiro de 1950, nos muestra el interior de una conservadora familia portuguesa, centrada en la relación de dos hermanas: Eurídice y Guida, quienes se ven obligada a luchar juntas e individualmente en un entorno opresivo y machista, que las aleja de sus propios deseos y aspiraciones. La relación de ambas es un refugio contra ese ambiente, hasta que la vida de ambas toma rutas aparentemente distintas y alejadas, lo que las lleva a seguir sus vidas de formas independientes pero unidas por el recuerdo y el amor: una vida invisible. Bello título que recoge mucho de la esencia del filme, que es muy original y huye constantemente de los tópicos en los que uno creería que pudo haber caído. Es una película bella, dura, dolorosa y luminosa al tiempo. Una joya. Ganó el premio a Mejor película en la sección Una cierta mirada de Cannes 2019.

Bueno finalmente vi la película más reciente de ese particular director de cine norteamericano. Lo respeto y me gustan varias de sus películas, en especial sus primeras, pero he tenido algunos problemas con sus últimas. Con "Da 5 Bloods" ya había anunciado que le tenía un poco de miedo a verla, pero ese miedo fue desapareciendo un poco al empezar a verla. Cuenta la historia de 4 excombatientes afroamericanos que regresar a Vietnam muchos años después en busca de los restos de uno de sus compañeros y de un tesoro escondido.

Desde el inicio la película tiene buen ritmo a pesar de su duración, pero en esta oportunidad la he disfrutado mucho en toda su primera parte y más de la mitad. Me gusta el planteamiento del guión y la caracterización de los personajes (el personaje de Delroy Lindo, un afroamericano pro Trump, simplemente colosal), el humor negro que siempre está en sus películas, acá está muy bien logrado y me reído en muchas partes. También no deja de tocar fibras muy sensibles y temas complejos dentro de todo este entramado y esta búsqueda grupal de un pasado lleno de dolor, sangre y traumas. Se encuentran con la hostilidad de algunas personas locales, y los prejuicios de siempre de parte y parte. También en esta ocasión no me molestan sus documentos de archivos entre el inicio y mitad de la película, además de los datos históricos donde expone el racismo en las mismas guerras. Sin dejar de mencionar la excelente fotografía, y la música de Terence Blanchard, que también añade la música del gran Marvin Gaye. Una muy buena dirección y reparto. En ocasiones también recuerda al cine o a una película especial de Tarantino, aunque ambos directores tienen sus puntos de convergencia en su estilo.


PERO vuelvo a tener un problema con su tramo final (tranquilos que no haré spoiler). Por donde empezar. El giro que toma al final me parece muy facilista, gratuito y predecible, y llegados a este punto ya la emoción que tuve a lo largo del filme fue bajando abruptamente. Y remata con nuevas imágenes de archivo o escenas contemporáneas y otras cosas que aunque me parecen interesantes e importantes me parecen que simplemente sobran en la película. No es necesario. Pero el director siempre quiere reafirmar con resaltador su mensaje. Quiere darle todo en la boca al espectador, retregarle o no dejarle nada a pesar ni a hilar, cayendo nuevamente en eso que siempre me molesta en varias de sus películas. Puedo entender por qué lo hace, él es un activista y siempre lo ha sido, pero creo que debe confiar más en su arte como medio de expresión y en el espectador capaz de asimilarlas. Eso es todo. Pero debo decir que en su mayor parte me gustó. Recomendada.

Bello documental realizado por el hijo del director, que se llama igual. Y es todo un deleite para los amantes del cine de ese gran director de cine ruso, el gran poeta del cine y uno de los cineastas o artistas que personalmente más idolatro. Un repaso a través de su voz por un material de archivo que vale oro, con grabaciones de su intimidad, detrás de escena de sus películas, repasando cada una de sus películas, su filosofía de vida y de trabajo, su mística y metafísica. Su hijo solo se encargó de organizar el material y darnos este estupendo regalo. Una maravilla.

Hace rato la tenía pendiente para ver pero hasta ahora le saqué tiempo porque sabía que era una película que requería un estado de ánimo especial. Hittman sorprendió hace unos años con esa buena película "Beach Rats", donde siguió explorando dramas de la juventud y de los adolescentes. La película se estrenó en los dos únicos festivales de cine que pudieron estrenarse este año Sundance (Premio Especial del Jurado) y Berlín (Gran Premio del Jurado), con premios en ambos. La película me ha gustado mucho. Como me lo imaginaba es un golpe en la cara. Cuenta la historia de una adolescente que vive en la zona rural de Pennsylvania, que se entera que está embarazada y al no poder realizar el aborto en su estado decide en compañía de su prima hacer el viaje a Nueva York para hacerlo. E inicia una travesía y una odisea llega de angustia, drama y dolor. Me recordó mucho a esa obra maestra del gran director rumano Cristian Mungiu (4 meses, 3 semanas, 2 días), que seguro inspiró a la directora, porque esa contaba otra odisea de dos amigas en el proceso de un aborto con varias semanas encima en Rumania.
La película es muy naturalista como lo fue su anterior película, casi documental, sin música pero con una precisión y delicadeza en los planos y su lenguaje visual, que te ves metido en ese espiral de tensión y emociones sin ninguna tregua. Me gusta también lo que no se dice pero se sugiere, ese lenguaje simbólico y la atención a los pequeños detalles y gestos que te dan información sobre el embarazo y sobre la vida de estas dos adolescentes que se enfrentan al ritmo de la ciudad en una búsqueda de la muerte y la vida al mismo tiempo. También muestra una bella relación de amistad y apoyo entre mujeres. Tengo que mencionar que el guión y la dirección de Hittman es excelente, apoyado por dos actuaciones estupendas de sus dos jóvenes actrices Sidney Flanigan y Talia Ryder. Es una joya sensible, delicada y a la vez dura y devastadora. De lo mejor que he visto en este accidentado 2020 en cuanto a estrenos de cine. Y el título es perfecto, porque cuando descubres su significado una luz aparece y alumbra un poco más la historia y su oscuridad.