Haz click aquí para copiar la URL
España España · Las Palmas
Críticas de Oscar
1 2 3 4 10 20 58 >>
Críticas 287
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
9
1 de julio de 2021
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Estamos posiblemente ante una de las mejores obras maestras de su director Rafael Gil, una película que consiguió la declaración de interés nacional y el primer premio del Sindicato Nacional del Espectáculo.

El germen de esta película se encuentra cuando Rafael Gil, ya en su adolescencia leyó los Cuentos amatorios de Pedro Antonio de Alarcón, que le fascinaron. Por lo que la ocasión de llevarla al cine le entusiasmó, consciente de que tenía en sus manos una obra importante de la que podría salir una gran película.

Así se expresaba el propio director en una revista de cine: “La novela de Alarcón es un argumento intenso y áspero que se desarrolla en terrenos andaluces, pero es que él pudo con su pluma dar a aquellas tierras el fuerte e intenso colorido dramático que en su obra se deja traslucir. Las afueras de Cuenca son ideales para el desarrollo de esta obra, donde se respira el aire enrarecido por el drama”.

Una película que aprovecha muy bien la idea del paisaje como elemento catalizador de las reacciones de los personajes y es un elemento clave del cine romántico literario y que alcanza su máxima expresión en la gran Cumbres Borrascosas, escrita por Emily Bronte y filmada por William Wyler en la mejor versión en 1939.

Todos los elementos técnicos de El clavo brillan a gran altura y muestran la enorme pericia de Gil para integrarlos en un relato coherente que atrapa el corazón del espectador en cada instante. Ciertamente y siguiendo las costumbres de la época, hay una cierta tendencia a la grandilocuencia, al exceso de dialogo e incluso en ocasiones a la sobreactuación, tanto de actores como de situaciones. Quizá estos elementos impidieron en su momento considerarla como obra maestra como Cumbres Borrascosas.

La crítica fue muy entusiasta con la obra y en singular coincidencia con el público. Coincidían en considerar El clavo como una de las películas que merece figurar entre los títulos más destacados de la cinematografía española. Se destacó la maestría de Rafael Gil y la gran unidad de la película en la que el espectador queda prendido hasta el final y en la que el matiz, la delicadeza, el detalle, adquieren una reveladora importancia.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Oscar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
1 de julio de 2021
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Uno de los tándem que hacen que esta película tenga un interés especial es el enfrentamiento escénico de dos talentos de la interpretación como Arturo Fernández y Francisco Rabal, también el atractivo de una estrella genuina del momento como la gran Carmen Sevilla, una de las mujeres más carismáticas del cine español.

Camino del Rocío es un melodrama que narra las peleas y rivalidades de dos hombres, uno de ellos trabajador y orgulloso (Rabal) y el otro un ocioso señorito andaluz (Fernández), que se disputan el amor de la hermosa Esperanza (Carmen Sevilla), una muchacha envuelta en un dramático enredo familiar.

El telón de fondo es la Feria de Sevilla y el célebre camino del Rocío, perfectamente ambientado con imágenes reales y que será donde el desenlace tendrá su adecuado lugar.
Camino del Rocío tiene un trasfondo que recuerda mucho a la película “Te querré siempre” de Roberto Rossellini, sobretodo la resolución de la película en una procesión.

Se ha dicho también que Camino del Rocío es una película “folclórica”. Y es cierto que en la película de Gil hay ambiente andaluz, canciones rocieras, celos un tanto convencionales, pero también el buen hacer de Rabal y Fernández, muy bien compenetrados y el encanto superlativo de Carmen Sevilla. Es una película bien realizada, con un bonito color, excelente fotografía del gran José Aguayo.

La secuencia cumbre es desde luego la procesión del Rocío, realizada con gran despliegue de medios y que vuelve a demostrar una de las mejores cualidades cinematográficas de su autor, como es la facilidad por captar en imágenes la imaginería popular, el ambiente y las costumbres de las gentes del pueblo. Transmite autenticidad, realidad, cercanía popular.

La película fue estrenada en Madrid el 5 de diciembre de 1966, obteniendo una respuesta muy positiva por parte del público, y sobretodo continuó lanzado al estrellato musical y cinematográfico a Carmen Sevilla.
Oscar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9
18 de noviembre de 2020
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Estamos ante un episodio de la historia de España llevado a la pantalla con un rigor histórico magistral y del que estamos poco acostumbrados, ya que siempre que algún director lleva a la pantalla algún episodio relacionado con este periodo concreto de la historia siempre lo hace desde la caricatura, la revancha, la mentira y la manipulación maniquea que trata como imbéciles a los telespectadores para inculcarles lo malo malísimo que eran unos y lo bueno buenísimos que eran los otros.

Aquí no ocurre eso. Es un gran trabajo dirigido por Roberto Bodegas y con una interpretación brillante de Manuel Alexander, de sus últimos trabajos. Así como también el de Andrés Resino como el presidente de las Cortes. Para los aficionados a la historia les será muy grato ya que en todo momento está basado en el testimonio en primera persona del equipo médico del General Franco y de gran número de historiadores que se han acercado a esos delicados momentos con rigor científico. Dos testimonios fueron esenciales para abordar la enfermedad y el último periodo, los del doctor D. Vicente Gil y D. Vicente Pozuelo. Dos médicos que acompañaron buena parte de la vida del general. Y el testimonio de los médicos que lo atendieron en la hora final, todo el amplio grupo que componían en equipo habitual, de entre los que destaca el doctor D. Vital Aza y D. Hidalgo Huertas.

Cuando se tiene una buena base histórica resulta aceptable el trabajo cinematográfico que sale de ella. Una película televisiva hecha con rigor, seriedad, respeto, que no cae en la caricatura, ni en la burla facilona ni en el insulto previsible de los que no leen ni se informan de nada pero sin embargo lo saben todo y dan lecciones a todos.

La película refleja con exactitud los meses y semanas desde que se percibió con mayor seriedad la enfermedad de Francisco Franco como algo irreversible. Según su hija, doña Carmen, Franco asumió entre el 14 y el 16 de octubre que estaba en trance de morir. La película narra muy bien esos días y especialmente el 18 de octubre en el que, consciente de la gravedad de su enfermedad, Franco se encierra en su despacho y escribe de su puño y letra el que sería su último mensaje a los españoles.

También la película recoge con fidelidad como a pesar de ser consenciente de su enfermedad, siguió sometido a una presión estresante atendiendo los graves asuntos políticos que se iban sucediendo en esos días como eran los frecuentes atentados terroristas d la organización criminal E.T.A o la invasión de Marruecos al territorio del Sáhara.

Una de las escenas más impresionantes de la película y también retratada con gran rigor histórico es la de la operación de emergencia que se le realiza improvisadamente en el botiquín del Regimiento de la Guardia de El Pardo la madrugada del 4 de noviembre, envuelto en una alfombra porque aun no se había terminado una camilla adecuada a la estructura de El Pardo.
Tanto en la película como en los testimonios reales de los médicos que lo atendían, queda patente que nunca jamás recibieron presión alguna en ningún sentido y que hicieron lo que estimaron conveniente. Fueron las circunstancias y el desarrollo de la enfermedad los que dictaron los acontecimientos.

Y aunque la película no lo desarrolla, también refleja someramente esa preocupación del pueblo español ante la enfermedad de su jefe de Estado. En realidad fueron muchos los ciudadanos que cada día se acercaban a las puertas de El Pardo y luego del hospital La Paz. Muchos rezaban por él, llevaron flores y ofrecieron su sangre e incluso algunos sus órganos por si fuera necesario. Los periódicos contaron el gesto de una niña llamada Paloma Trujillo que cada día llevó una flor para Franco a la Paz.
Y por último destacar el gran trabajo de ambientación, fotografía y decoración. Las reproducciones de las estancias del palacio de El Pardo son portentosas.

En definitiva, una película fundamental para todos los que quieran saber y estudiar sin prejuicios ni manipulaciones lo que sucedió aquellos días de noviembre en los que falleció el General Francisco.F.
Oscar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9
29 de octubre de 2020
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
El éxito y el prestigio del gran Rafel Gil que ya acumulaba en 1947 le decidieron a emprender su mayor obra, un empeño casi imposible por sus características pero que se hacía necesario realizar: la adaptación cinematográfica del Quijote.

La productora Cifesa aceptó con entusiasmo el proyecto de la filmación de la inmortal obra de Cervantes y no escatimó en gastos para su producción. Rafael Gil leyó varias veces el Quijote antes de escribir el guión, para el cual contó con el apoyo de Abad Ojuel y de Armando Cotarelo, designado por la Real Academia Española de la Lengua. Siempre se enorgulleció de que en toda la película no se pronuncia ni una sola frase que no hubiera sido escrita por Cervantes, por ello estamos ante la primera adaptación fiel e íntegra de la novela y no una recreación como serían las adaptaciones posteriores. Así lo reconocieron, entre otros Luis Buñuel y Orson Welles, como la mejor película jamás filmada sobre la epopeya cervantina.

Don Quijote de la Mancha es una auténtica superproducción española, con unos exteriores muy cuidados, unos decorados espectaculares de Enrique Alarcón, una fabulosa fotografía de Alfredo Fraile, que convierte muchas escenas en auténtica recreación pictóricas de las páginas de la novela y una excelente, aunque excesiva por momentos, banda sonora del prestigioso Cristobal Halffter.

Con un reparto de lujo: Rafael Rivelles como un excelente Quijote, lo mismo que Juan Calvo logra con su Sancho el papel de su vida. Junto a ellos destacan Sara Montiel en sus comienzos artísticos. También con secundarios de lujo como Manolo Moran, Julia Caba Alba, Fernando Rey en el papel del bachiller Sansón Carrasco.
Esta película obtuvo la mención de honor del I Certamen Cinematográfico Hispanoamericano, así como diversos premios para Rafael Rivelles. La película fue recibida con entusiasmo por la opinión pública española, por la crítica especializada y por intelectuales de reconocido prestigio.

Rafael Gil hizo un gran trabajo a la altura de su tiempo y su versión del Quijote era la que en aquél momento se tenía que hacer. El éxito popular fue respetable aunque no apoteósico, pero sin embargo la película tuvo una buena distribución hispanoamericana e incluso gozó de relevancia en Estados Unidos, donde se hicieron copias para las Universidades que sirvieron de estudio a todos los hispanistas del momento. Hasta incluso recibió una oferta de Hollywood que Rafael Gil tuvo que desechar.

Esta película fue capaz de captar en imágenes el espíritu de Cervantes, su fiel adaptación del texto, un logro nada fácil de conseguir. Secuencias como la de los molinos de viento, el ataque a los rebaños de ovejas o la batalla de don Quijote contra los odres de vino, son antológicas y parecen sacadas literalmente de las páginas de don Miguel de Cervantes.
Es cierto que es imposible adaptar todos los capítulos, pero la intención de rodar los más posibles y con un ritmo cinematográfico es meritorio. Se trata de un acercamiento con devoción y humildad y no con pretensión de ofrecer una visión particular del texto.
Oscar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
6 de octubre de 2020
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Después del gran éxito que supuso a película “Novios de la muerte”, el gran Rafael Gil se anima con otra película de aventuras, una nueva película legionaria y es cuando Rafael García Serrano y Rafael J. Salvia escriben “A la Legión le gustan las mujeres y a las mujeres les gusta la Legión”. Una historia imbuida del mismo espíritu que la anterior. Aunque esta está ambientada en la guerra civil española y tratada en tono de comedia muy al estilo Mel Brooks.

El estreno fue el 16 de marzo de 1976 y aunque esta vez no igualó el éxito de “novios de la muerte”, se trata de una obra muy divertida y digna de reivindicación, sobre todo si se contempla la posterior “La vaquilla” de Berlanga, realizada sobre un argumento muy similar a esta, personajes muy parecidos y golpes de humor bastante iguales.

La película tuvo un gran coste: 75 localizaciones distintas y 78 actores. Una de los atractivos de la película es la capacidad de tratar el tema de nuestra guerra civil sin odios, sin manipulación, sin revanchismos, sin concesiones a lo épico. Se trata de una película de humor dentro de un encuadre heroico.

“A la Legión le gustan las mujeres…” es una película coral, muy al estilo de las que gusta hacer a Berlanga. La historia de un grupo de legionarios que abandona los placeres del descanso cuando tiene que enfrentarse a un núcleo de Brigadas Internacionales capitaneado por el perverso coronel Merdy (personaje inspirado en Andrés Marty, el carnicero de Albacete, sobrenombre que se ganó por su crueldad y crímenes). Cuando uno de los alférez cruza la línea enemiga para ir a ver a su novia y es descubierto, sus amigos legionarios montan una operación secreta para rescatar a la novia del alférez y, de paso, capturar al coronel de las Brigadas internacionales.

El guión de García Serrano es espléndido, como toda su obra literaria, chispeante, repleta de autenticidad que se expresa a través de escenas deliciosas, como el intercambio de viandas entre los dos bandos en un descanso del combate, las tribulaciones de un oso mascota que tiene uno de los legionarios, o los personajes femeninos, todos ellos vivísimos y atractivos.

El tono de comedia aumenta cuando se acerca la farsa en que los legionarios tienen que hacerse pasar por republicanos al estar a punto de ser descubierto por el anarquista Chimbo. Pero entre las bromas o el heroísmo limpio de algunas situaciones, se deslizan ideas punzantes y cuidadosamente trazadas: el carácter anárquico del español que hace al anarquista ateo odiar a los comunistas y al final cambiarse de bando. El espíritu de amistad inquebrantable, la simpatía por todos los combatientes españoles y la condena sin paliativos de las Brigadas internacionales. Magistral la escena en la que Merdy se cuadra ante el retrato del dictador Stalin, o la forma ignominiosa y humillante con que es capturado por los legionarios.

El reparto está muy correcto, dando el director a numerosos actores secundarios la oportunidad de lucirse en papeles importantes y con grandes oportunidades de brillo. Fernando Sancho es el malvado Mendy, en tanto que Rafael Hernández es el anarquista y los legionarios son Manolo Codeso, Francisco Cecilio, Manuel Gil, Venancio Muro y el genial Ricardo Palacios en el papel de el Pemán, tal vez el más gracioso de todos.
Junto a ellos destacan cómicos como Juanito Navarro o Blaki, bellezas como Susana Mayo, Mirtha Miller, Mabel Escaño y Patricia Granada, que hacen gala a la segunda parte del título de la película.

Las escenas cuarteleras poseen una gracia indudable y una picardía apenas disimulada. Toda la obra es alegre y venturosa, una expresión de amistad y jubilo aun en un escenario bélico. En definitiva una película de aventuras divertidas sin grandes pretensiones muy digna de ser rescatada.
Oscar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 3 4 10 20 58 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow