Pues érase una noche de verano y yo andaba con cierto gusanillo de cine español. Y es que ya que estamos en crisis, y en los JJOO de este año no nos comemos un rosco, mi inocente "yo interior" quería autoconvencerse de que al cine español aún se le podía dar méritos, de que podía ser ese bastión del cual los españoles podemos sentirnos orgullosos... ERROR.
Después de hacer un aleatorio, en el nombre de la pantalla de mi ordenador apareció caótica Ana.

Y es que como buenos españoles, siempre pecamos de lo mismo... siempre. No aprendemos; creo que preferimos errar una y otra vez. Ahí va:

1. Tetas, más tetas... ¿y sabéis que? pechos(por ser más finos vaya). Esta noche creo que soñaré con los pechos de Manuela Vellés. Y es que he llegado a la conclusión que una de las acepciones en el diccionario de la R.A.E. de utopía podría ser: cine español sin abuso de escenas de sexo. A mi ya me alegra la vista, pero podría ahorrarse la mitad de los planos.

2. ¡Venga PRETENSIÓN! Si si, que a los españoles nos gusta mucho la escenita de Manhattan y la estatua de la libertad a lo 360 grados... Pues aunque no venga a cuento... ¡añadamos 30 minutos en New York porque si! Quizás de esta forma, confundan a Medem con W.Allen y le den el Óscar inclusive.

3. Bebe... esta chica ni canta bien ni actúa bien.

4. El papel principal en torno al cual gira toda la historia... es más neutro que el pH 7. No expresa, no siente, no tiene opinión... Un constante vacío que esperas que durante el transcurso del argumento se llene; ERROR.

5. Venga y ya que estamos, hablemos del cáncer y de lo trágico que es. Si si, ya que está tan presente en la actualidad ponga señor Medem ahí esa puntita de dramaturgia en la mitad del filme (pese a que no venga a cuento y sirva para rellenar 10 minutos más de película).


En fin, los mismos errores cinematográficos de siempre. Aunque también dicen que los sabios se equivocan muchas veces antes de serlo. Aún espero ansioso que salga algún sabio de entre las oscuras cavernas del cine español actual. Sigo aguardando...

Es común que, usualmente, mire de reojo y con cierto escepticismo los títulos que me ofrece el canal TCM autor.
Ofrece, como muchos sabréis, películas consideradas de "cine independiente". Ese cine que se asemeja a un ligue fugaz de discoteca antes de llegar al catre, dónde hay claramente dos opciones a sufrir:
1.Te decepciona y demuestra que te ha estado engañando con patrañas (ahorraré mencionar tanto títulos como nombres).
2.Te sorprende gratamente dejándote un dulzón sabor de boca.

Brick es de las segundas. Una lección de como realizar CINE NEGRO desde una fresca perspectiva, prescindiendo de lo clásico.

Sin sombreros ni avituallamientos de corbata, sin persecuciones a gran velocidad entre los rascacielos, ni mujeres despampanantes de portada sujetándole los abrigos a los pintorescos gángsters del momento. No viven tampoco los protagonistas en exuberantes mansiones con piscina, ni sus detractores en pequeños apartamentos de los suburbios. No veremos prostitutas, ni apuestas ilegales en mesas de juego, ni clubes soterrados de jazz. Menos aún reuniones a escondidas en un dinner café con señoritas vestidas de uniforme. Apenas hay balas, ni armas, pocas pistolas. Nada de robos en joyerías o bancos. ¡Y no! no hay sicarios con más músculo que en MHYV y acento de país del este. Caéis en la errata si pensáis que visualizareis a negratas del Bronx o Harlem blandiendo Hammers con bandanas enroscadas en el pescuezo y más oro que China en las próximas olimpiadas...

Y droga... pues sí, algo de droga sí que hay. ¡Joder que esperabais!... algo de negro tendrá.

Por eso y mucho más me gusta Brick, una pequeña joya escondida en los entresijos del cine independiente.

Maldigo el día en que perdí media hora de mi preciada vida viendo tal bazofia. Tendría que ser una ¿obra? autodestructible para el bien de la humanidad. Llamadme optimista pero creo que podría haber grabado una película mejor con los 2 megapíxeles de la cámara de mi móvil. En serio os lo digo, no estoy exagerando, rotundamente no.
No se os ocurra verla, ni pensarlo siquiera. Yo la enganché de casualidad en la 2, un sábado a las 4 de la mañana y con drogas alterando mi organismo, por eso aguanté los 30 minutos, deberían darme un premio. Oliveira dámelo; pero en forma de cine no.


P.D. Lo peor de todo es que la Wikipedia tilda al director de: el más prestigioso de su país, ¡buf!
P.D. 2 Se han dado casos de ceguera crónica en personas que pudieron verla al completo.