Las producciones de Gary Sanchez Productions suelen ser comedias de sal gruesa para digerir sin demasiadas pretensiones y si uno entra al cine a ver este tipo de películas muy mala debe ser para que no encuentre algo de diversión. Nunca entenderé que se use un varemo de intelectualidad para criticar una comedia como la que nos ocupa.
La primera parte no me apasionó y esta, a priori, no pintaba mucho mejor. Will Ferrel me parece insoportable y Mark Whalberg me cae bien por lo que la cosa estaba balanceada...y con los “abuelos” me pasaba exactamente lo mismo. Mel Gibson me gusta y John Lithgow nunca me ha gustado. Un acierto de casting para mi modo de ver.
La historia mil veces vista pero con unas situaciones cómicas muy conseguidas.
La cara de cabreo de Whalberg está siempre muy conseguida y su vis cómica junto a Will Ferrel ha quedado ya demostrada.
Recomendable para los que busquen pasar un buen rato.

Después de la decepcionante LA TORRE OSCURA no tenía yo demasiadas ganas de gastarme 9 euros en otra adaptación de una obra de Stephen King...máxime cuando son, casi siempre, películas de muy baja calidad. Salvo CADENA PERPETUA, EL RESPLANDOR, CUENTA CONMIGO y media docena más, si es que llegan, casi todas las incursiones de Hollywood en la obra del prolífico King han dejado mucho que desear. Dicho lo cual:
IT es una de las mejores películas de terror juvenil/adolescente de toda la historia. A pesar de su larga duración no se hace pesada en ningún momento y todos los actores, especialmente Bill Skarsgard y Nicholas Hamilton, lo bordan. Todos los niños funcionan como en aquella pequeña obra de arte de Bob Reiner, STAND BY ME, en la que la dirección de actores era de matrícula de honor. Muschietti como un veterano artesano de los de antes nos ofrece un recital de verdadero cine dirigiendo la orquesta con precisión de reloj suizo. Todo un hallazgo.
El comienzo, la presentación de las complejas personalidades de los buenos y de los malos, la acción, la fotografía, la ambientación ochentera y, sobre todo, una sensacional banda sonora hacen que te olvides de lo poco que nos presentan a Pennywise que entra directamente a "matar".
No vi la miniserie que adaptaba el mismo libro y tampoco he leído la novela de King por lo que, seguramente, la he visto "virgen" y es por eso, quizás, que me ha sorprendido, me ha asustado y la recomiendo a todos.
Para más adaptaciones como esta: Cuenta Conmigo maestro.
Y por favor...sin compararla con nada.

Es verdaderamente un placer recibir un nuevo título de la cinematográfia argentina que tantas sorpresas agradables nos hace llegar cada año. EL CIUDADANO ILUSTRE tiene toques berlanguianos y otros propios de García pero la contundencia de su historia le hacen tener personalidad propia gracias a un guión potente y un reparto de verdadero lujo.
Divertida, chocante, entretenida, llena de ese humor descarado que tanto éxito cosecha en España. Oscar Martínez por si solo justifica la compra de la entrada de cine...esta impresionante y sus compañeros de reparto lo siguen como en una película coral.
Los directores hacen un experimento único y el resultado es perfecto.
Una película muy recomendable.

Me gusta el cine de comedia, el suspense, la acción y me encanta el cine de terror. Sobresaltarme con esos sustos que se ven venir pero que te asustan es lo que hace que me contenten fácilmente con este tipo de películas. No vi la secuela anticipada porque no me llamaba la atención ni el cartel ni el trailer y como me había sucedido lo mismo con EXPEDIENTE WARREN que solo disfrute con la segunda a pesar de no haber visto la primera y en esta ocasión he decidido verla por un trailer muy llamativo y con sustos garantizados.
OUIJA, EL ORIGEN DEL MAL asusta...mucho. Te ata a la butaca y te impide cerrar los ojos. Te ríes de miedo y eso es lo que busca el director que ha orquestado una catarata de sustos precisos que llegan en el momento más/menos esperado.
Se nota que se lo han pasado "de miedo" haciéndola y se agradece, en estas fechas tan apropiadas para el cine de terror, una película tan sincera como esta que no engaña a nadie.
Muy recomendable.

El cine chileno no es muy prolífico pero tiene una gran calidad. El hecho cinematográfico es cara por barato que se pueda llegar a hacer y en América Latina tienen la extraordinaria habilidad de conseguir verdaderas obras maestras con una escasez de presupuestos que nunca se llega a hacer presente.
LA MEMORIA DEL AGUA es una de esas películas que logran cruzar el atlántico y se merecen una atención especial. Matias Bize nos ofrece una historia llena de amor y llena de dolor con unos actores en estado de gracia que se desangran ante los espectadores de la sala de cine en un ejercicio de desnudez espiritual impactante.
Benjamín Vicuña nos llena de ternura y nos hacer sentirnos cercanos a el y Elena Anaya vuelve a demostrar lo gran actriz que es.
Una película pequeña que se hace inmensa en nuestros corazones.