Un oficial de la legión se juega la guardia con un compañero y gana y, a resultas de cambiarle la guardia, el compañero resulta muerto en su lugar. Esto le hace replantearse su vida y unos años después decide hacerse sacerdote.

Antes de vestir los hábitos definitivamente, le envían a su casa y se encuentra con que la familia está desunida y metida en todo tipo problemas, que él, como casi-sacerdote, deberá solucionar.

La película está cargada de moralina de la época. No es de las más cargantes ni noñas, pero personalmente creo que es una película que ha envejecido muy mal. Hay otras mucho mejores que, a pesar de que se les nota el tiempo, disculpando algunas cosas, aún se puede ver con agrado. P. ej. "Marcelino pan y vino" o "A mí la legión".

Ésta, como curiosidad de la época.

Esta película me ha parecido una estupidez. No obstante la salva un poco la primera mitad.

Siendo honestos, es posible que siendo americano lo viera de otra manera. Pero, para cualquiera que no sea americano, la figuras míticas del béisbol no significan nada, no inspiran ningún tipo de sentimiento.

En fin, hasta que desbarra con las figuras del béisbol, creyendo que crea un clímax, se deja ver.

El viejo sheriff, defendiendo la justicia, se enfrenta el poderoso. Este malvado decide darle una lección a ese don nadie que se cree que puede pedirle cuentas a un hombre poderoso. Poco sospecha el malvado que ha provocado la furia de un hombre excepcional, un veterano de gran experiencia en combate, al que toda su organización se las verá y deseará para pararle.

¿A alguien le suena este argumento? Pues eso, lo hemos visto cien veces: contra un capo de la mafia, contra un traficante, un proxeneta, un cacique local, una compañía que quiere que venda su negocio,/terrenos etc

Probablemente en su momento fue original. Los actores tienen más calidad y no es tan exagerado como las películas actuales. Pero es lo que es: Las aventuras de un boina verde del oeste en un western crepuscular.