Más que una película, parece una obra de teatro. La mayor parte se desarrolla en un bosque, y está muy enfocada a apreciar cualquier cosa menos lo típico espectacular de las películas. Es algo parecido a Lars Von Trier en "Dogville", aunque no tan exagerado. Sobre todo el director se centra en que valores la sencillez del film y a la vez las grandes actuaciones de todos los personajes, los diálogos y la banda sonora de Neil Young.

Tiene algunos trozos un poco lentos, pero a mí no se me ha hecho pesada para nada. El personaje del indio dice muchas frases profundas a las que no a todas les he sacado el verdadero significado, pero la verdad es que te cautivan. Desde luego, es muy original y de vez en cuando da gusto ver algo diferente, sobre todo por la forma en la que está hecha, aunque pueda llegar a ser algo friki. Si es que a este Johnny Depp le han encantado siempre hacer trabajos así... y yo que se lo agradezco.

Intenso thriller con un buen reparto y una buena dirección. Sólido guión. Antonio Resines demuestra que es uno de los actores más potables que hemos tenido y que tenemos en nuestro país. Sabe hacer tanto papeles cómicos ("Los Ladrones van a la Oficina", "El Oro de Moscú...") como serios. Llama la atención la corta pero solvente intervención de Sancho Gracia. José Coronado no lo hace mal, pero quizá sobreactúa un poco queriendo aparentar ser demasiado tipo duro.

A este tal Enrique Urbizu no lo conozco y por lo que he visto en Filmaffinity no parece que haya dirigido muchas películas, pero ha sabido coordinar de una manera bastante aceptable tanto la forma de interpretar que tiene cada actor como meter un entorno interesante según las escenas.

No me gusta cuando se generaliza el cine español de tal manera que ya no se quiere ver ningún film nacional, y se tienen prejuicios hacia todos. Critico muchísimo a los sectores que se limitan a juntarse con los actores y directores que son acordes a sus ideologías políticas y a exponerlas abiertamente, siempre de la misma forma. Por otro lado, el mologuista Goyo Jiménez dice, en tono de broma, que las películas españolas son un coñazo porque están basadas en vidas españolas. Es cierto que en ocasiones las historias quieren ser tan sociales que pueden empachar un poco, aunque este género no me desagrada.

De todas maneras es por películas como "La caja 507" por las que siempre defiendo que hay que darle una oportunidad al cine español. No es una obra de arte, pero sí que deja una ventana abierta a la esperanza de que haya más variedad y más aceptación por parte del público.

Descubrí "Mr Brooks" un poco por casualidad. Me puse a buscar películas de Kevin Costner recientes, y vi "El último voto", que está entretenida, pero Costner no parece Costner. Entonces vi "Mr Brooks", y me llevé una sorpresa muy agradable. Este hombre había recuperado el gancho que tenía en "Los intocables" y "JFK", aunque los años no pasen en balde.

El guión es muy bueno, cada personaje encaja perfectamente en la trama. Mención especial a William Hurt, el "Pepito Grillo" del señor Brooks que le incita a hacer cosas horribles. Tiene mucha personalidad. Demi Moore, aunque su actuación sea aceptable, es quien menos me gustó. El final me encantó, aunque no voy a dar detalles ni en el spoiler siquiera.

Para abrir boca, diré que la película viene a ser una especie de "Dexter" (la serie de televisión), aunque a su manera. Kevin Costner es un empresario de renombre, casado, con una hija, y querido por toda la ciudad, aunque tiene un lado oscuro: le encanta matar a las parejas mientras practican el sexo. No cuento más, pero os diré que la trama se complica bastante, y los giros son bastante acertados.

¡Disfrutadla!

No es de las mejores películas de Clint Eastwood, pero es que el listón que se ha marcado este tío está tan alto, que digo que no es de las mejores y aún así merece la pena verla. Muy recomendable a los amantes del cine de intriga.

Aparte de su usualmente gran manera de dirigir, Eastwood esta vez nos muestra a un policía retirado que deberá resolver un caso de consecuencias inimaginables, incluso con tintes personales. No digo más para no estropear la película. Un guión de matrícula, salvo por una escena del final que detallo en el spoiler (leérosla sólo si habéis visto la película, porque es muy spoiler), pero vamos, una pequeña mancha de nada.

Jeff Daniels no es que haga una actuación de Oscar, pero como siempre lo tendré asimilado al colega de Jim Carrey en "Dos Tontos muy Tontos", pues me ha gustado, más que su interpretación, su papel.

Siempre me han gustado mucho las películas de Woody Allen, pero no sé por qué me daba la sensación de que "Vicky Cristina Barcelona" me iba a decepcionar. Tiene algunos aspectos potables, y es por ello por lo que la he aprobado, pero muy por los pelos.

Allen ha conseguido con Barcelona y Oviedo lo que hacía con Nueva York. Nos conduce por algunos de sus lugares más emblemáticos, pero a la vez nos envuelve en ese ambiente puramente bohemio. Lo que en Manhattan eran los bares de jazz en Barcelona son restaurantes con buenas bodegas y banda sonora al más puro estilo Paco de Lucía.

Tampoco hay que dejar pasar el perfil de sus personajes. Gente acomodada, con un nivel social e intelectual alto, que viven las relaciones humanas muy intensamente. Es más, en esta ocasión quizá esa moldura se rompe con el personaje de Bardem. El personaje de Rebecca Hall es más de Allen, pero Bardem lo veo un poco llevado al extremo. De todas maneras, ese es el estilo que caracteriza a este director y que ha cautivado durante más de 30 años a sus seguidores, entre los que me incluyo.

Pero ahora empieza la parte desagradable. De sobra es sabido que la nueva musa de Allen es Scarlett Johansson, al igual que Diane Keaton lo fue en su momento. El problema está en que él siempre, como buen genio, ha estado un poco tocado el ala, y eso con los años se acrecenta. Da la impresión, aunque me resisto a creerlo y espero que no se confirme en sus próximas entregas, de que se está convirtiendo, dicho en plata, en un viejo verde. Esto es algo que me esperaba en su plano personal, no hay más que ver sus líos con la china esa que adoptó. Pero no creí que llevase eso a sus películas.

Woody Allen siempre ha sido bastante filosófico en temas como la muerte, los matrimonios, la amistad, las clases sociales, etc, y siempre con mucha diligencia y elegancia y humor inteligente. Pero no hay que ser un forofo y aplaudir todas sus películas por el mero hecho de ser suyas. En mi opinión, en esta ocasión sigue teniendo muchos tintes allenianos, como he apuntado antes, pero se queda muy atrás con "Desmontando a Harry", "Annie Hall", "Maridos y mujeres", "La última noche de Boris Grushenko" o "Misterioso asesinato en Manhattan". Y no pongo más títulos por no alargar más esta crítica.