Y es que es imposible que no te guste el simpático Mumble, con sus bailes, canciones, aventuras junto a sus amigos cubanos y demás historias que harán que durante 90 minutos tu cuerpo se traslade a otro mundo lejano, más real y menos repetido que el pesado de Eragon, donde la realidad y la animación se mezclan con bastante éxito. George Miller ha conseguido que una simple historia de pinguino entretenga y divierta a mayores y peuqeños por igual. Grandes números musicales y gran banda sonora, además de tener un espectáculo visual muy poco visto en el cine, en general, no solo en el de animación.

Sin duda, la película de animación del año y el film de estas navidades, por mucho fuego que suelte el dragón.

Película que tienes que ver si quieres pasar un pedazo de rato....en tu sofa o cama, con tu chico/a, perro/a...y así poder hablar de como os ha ido el día, de donde coméis mañana, de porque dos grandes actores como Samuel L. Jackson y Andy García hacen estos guiones tan usados, de porque Ashley Judd hace siempre el mismo papel, de porque España no gana ningún Mundial de futbol, etc.

En todo caso, espera a que te la echen en la tele pero te recomiendo por tu economía que ni la compres ni la alquiles, porque siempre puedes ver algo mejor.

Podía haber sido una obra maestra, sino llega a ser por los malditos Ewoks, que haciendo películas ellos solos está muy bien, pero no se que pintaban ayudando a destruir el Imperio Galáctico, con un par de flechas, cuerdas y palos, cuando a Han Solo, Luke y compañía les cuesta la vida aniquilar algun soldado imperial con pistolas laser.

El comienzo es explosivo, y las batallas del final sonl las mejores de toda la saga, incluso mejor que la del Episodio III. Música de Oscar , al igual que sus efectos especiales. Lo dicho, no es la mejor película de la saga, pero sí una grandiosa película de aventuras y ciencia ficción.

Tuvo que ser en Londres y no en Nueva York, y tuvo que ser en un drama con toques de thriller y no en una comedia, donde el gran Allen creara su mejor película hasta la fecha, seguida muy de cerca por Poderosa Afrodita. Un guión de los mejores que ha habido en décadas, con interpretaciones muy buenas. Woody consigue sacar la sensualidad y el erotismo que no consigue Michael Bay en La isla de la diosa Scarlett Johanson, y Jonathan Rhys Meyers hace un papel soberbio, por muchas críticas que haya tenido.

Perfecta la banda sonora con toques operísticos, al igual que la fotorafía. Y desde aquí un toque de atención a Hollywood por no considerar a esta película como una de las favoritas a los Oscar. Si es que los hay sin cerebro.....

Un gran Gerard Depardieu interpreta a Vatel, maestro de ceremonias del rey Luís XIV de Francia, en un escenario bello visualmente, con una decoración excelente, buenas interpretaciones en general, y la siempre efectiva música del genial Ennio Morricone. ¿Volverá a hacer Roland Joffé una obra maestra como La Misión?