Insoportable. Una falta de respeto para el espectador, al que considera, poseedor de una mente adivina y superpoderosa, ya que el argumento es un secreto indescifrable.
Los personajes no conectan para nada con el que, en un esfuerzo de paciencia, aguanta en una butaca, que cada vez encuentra más incómoda.
Los traductores poseen unas voces insoportables.
Y además quedan más...Sólo 1ª parte.
Es una lástima porque la idea es buena.

Si juntamos la colección de insensateces, unos actores que no convencen y que incluso causan risa, junto a un guión muy mal estructurado y con temas totalmente ilógicos unos con otros, obtendremos el resultado que querían al hacer esta película: una gran tomadura de pelo. Sí sobreviven a ella, ¡felicidades!

Interesante porque no deja vacío a nadie. Unos alucínan, otros bostezan, y los que no hacen ni una cosa ni otra se preguntan que "narices" estan haciendo alli.
La lentitud de las escenas cual caramelo dulce, puede provocar en el espectador un poco más maduro, un análisis exahustivo de la sociedad en la que vivimos y a los extremos a que llegamos. Las otras escenas pueden despertar al dormido, o quizás cambiar el entresueño del ausente.
Todo lo cual es un ejercicio mental exuberante, sea cual sea la reacción del observante, que después de luchar por una entrada, queda sentado muy relajado en su pequeño trono.

Excelente demostración de cine sin pretensiones, y mucho mejor que sus "homólogas" americanas. Los tres protagonístas, bordan su papel. El guión tiene momentos de "obra de arte". Y el humor es simple, profundo y efectivo.
Lástima que siempre hay que "pasar por el aro", e intercalar cameos de famosos, que no le hacen ninguna falta al desarrollo inmejorable que realizan los actores menos "hollywoodienses".

Una obra de arte. No le falta de nada. Aunque si sobra un poquito de lagrimeo final.
Emmerich ha conseguido apasionarnos con escenas imposibles que demuestran lo que es un buen cine. Atrás quedan aquellos ejemplos de catástrofes, (no esencialmente de él), demasiado "caseras" y consigue crear un enfoque maduro y universal.