El espacio nuevo que nos abre esta película no tiene salida....pero es un espacio nuevo, es decir...un pequeño recinto para soñar, para decorarlo a nuestro gusto, para espejear nuestros miedos...

¿qué nos dice Lynch aquí?...que podemos enamorarnos, podemos soñar, podemos cruzar a ciegas la línea del horizonte...pero siempre habrá algo allá, un pájaro raro, un cortinaje nervioso, un rostro que oculta más de lo que muestra...siempre el PELIGRO de vivir, al lado de la belleza...por eso esta película es ideológicamente peligrosa, como toda gran obra de arte....

...porque en el OIDO INTERIOR nos susurra...."puedes vivir en este mundo, ven acércate, toma un poco de este licor amargo y gelatinoso"...

La he visto cientos de veces y creo que MULHOLLAND DRIVE inaugura una realidad paralela...esto sí que no puede decirse de muchas películas....excepto las mejores, las que pueden verse en muchos niveles, y funcionan en todos....

Parece que el ajedrez no se puede mostrar,
queda muy al descubierto su desnudez, su
hermetismo, la gente no entiende lo que pasa,
un movimiento de dedo o de ojo puede considerarse
casi como el clímax de la acción, se desespera
el neófito o el mal trebejista.

Pero para eso está el cine, para sacar con
cuchara de vidrio la lucha interior y arqueologizar
las ensoñaciones del jugador, traduciendo la
tensión interior en ritmo dramático.

El cine es ideal para representar la turbulencia de
la mente de un jugador, y el ajedrez es ideal para
alejar al cine de su contaminación con las artes
del 'movimiento'.

Mi perro "Poesía" me mete en problemas...hace poco me dijo
que Greenaway era el mejor adaptador literario al cine
y ahora me sale con que Orson Welles...

Hemos tenido una larga discusión multilingüe que me ha costado
salir bajo la lluvia, arriesgándome a una pulmonía,
para traer comida abundante con la que "Poesía"
ha de reponer las fuerzas perdidas.

Así, perrito, que El proceso de Welles es tan kafkiano como
el de Kafka. Así me enredas las cosas. Bueno, al menos me
concedió que la luz metafórica es casi inexistente en el
autor checo, pues él ilumina sus prosas con un viejo
farol de muy abajo de cierta escalera ruinosa.

La luz real en Welles es luz intelectual traducida
en espectro sobre la velocidad del sonido.

Soy monstruoso pues por eso, por mis
críticas monstruosas. Pese a ello, tengo un perro llamado
"Poesía", que a veces hace por mí las críticas.

Estas salen más o menos mejores.

Lo monstruoso es que el silencio me oprime, tiene un colmillo negro.

Libertinamente me doy a hacer críticas y colgarlas en esta página de Espera,
porque aquí todos los que critican esperan, más o menos algo que en el
futuro vendrá, creo que lo más esperado es un Espejo.

La película coreana que acabo de ver es cine saludable por su silencio, porque ya el cine no puede más hablar, a riesgo de morir de sus propias palabras.

Hinchado organismo es este cine que partió mudo y ahora, atrevidamente, se
refocila en sus viejos caminos.

El mejor enemigo es el que nunca aparece
las mejores armas son las que jamás se utilizan
el mejor caballo es el que no tiene jinete
el mejor soldado es el que nunca rasga sus vestiduras
el mejor tártaro es el que yace bajo tierra o bajo la leyenda
el mejor desierto es el que posee una fortaleza inexpugnable
la mejor jerarquía es la que de vez en cuando desfallece
el mejor misterio es el que enseña de vez en cuando sus grietas
el mejor amor es el que se aleja del objeto anhelado
la mejor esperanza es la que mira al más lejano horizonte
la mejor novela es la que jamás podrá ser llevada al cine
la mejor película es la que jamás se rebaja a la literatura
la mejor crítica es la que dice lo que oculta
la peor crítica es la que a sí misma se delata en sus intenciones