Y seguramente Belén Rueda sea de las peores actrices... Diría que la causa de que la película sea tan mala está en el actor Hugo Silva, que no se le entiende cuando habla, entre otras taras.

Me pregunto ¿quién habrá puesto el dinero para hacer esta película?

Sobre el papel parecería que iba a ser rentable... Probablemente lo haya sido... Esto demuestra que la gente está atrapada en sus casas, quieren salir y se meten en la sala del cine, quieren escapar de su realidad. Se aburren tanto que no pueden hacer otra cosa, no se les ocurre hacer otra cosa... El negocio no tiene ningún mérito. Yo lo veo como una auténtica canallada: hacer que la gente vaya al cine a ver una película como esta, con unos actores tan malos...

Y el guión todo él una trampa. De esos guiones hechos a imitación a los peores del cine de Hollywood.
¿El director? Sé que puede llegar a tener una carrera exitosa: o sea, que es malísimo. ÑoÑo a tope.

No tarda en ser estúpida. Y al ser estúpida siendo una porquería. Revienta porque Javier Gutiérrez está bien. Solo se puede ver por su interpretación. Sí, este actor no debe de saber leer bien los guiones para elegir las películas. Una pena. ¿O es que todos los guiones que le llegan son malos? Yo hace tiempo que me pregunta qué es lo más importante en un actor. Creo que lo más importante es no equivocarse a la hora de elegir la película en la que participar.

Debe de ser lo más difícil hacer una película de este género que se vea con interés. Creo que esto lo digo porque la mayor parte de las películas que veo de este género son muy malas. Cuando aparece una que no es una continua tontería me llama mucho la atención y corro a valorarla aquí para que no se me olvide. Después de haber visto muchas películas que tienen planteamientos parecidos al de esta me parece que el truco está en el guion. Si los personajes dicen chorradas o tienen reacciones poco verosímiles entonces la película se va desinflando y acaba siendo un bodrio.

Se podría decir que es una película extraña y eso ya es un punto. Extraña porque el público que se pone a ver una película de género espera que delante de sus ojos pasen cosas a las que ya está habituado. En esta película suceden alguna de esas cosas, solo algunas, muy pocas. Los dos personajes femeninos hablan mucho entre ellas y eso siempre hace que el espectador pueda llegar a estar más interesado en lo que les pase. Este truco raramente es utilizado por los guionistas o directores. Me pregunto cuál será la causa. ¡Es un truquillo que funciona!
Todo lo demás es aún más inesperado...
¡Qué pena que la mayor parte del cine de terror se haga pensando en los adolescentes!
Esta es buena porque parece hecha sin pensar en el público de menor edad. Lo malo que los productores (que buscan ganar dinero) a lo mejor ya no vuelven a confiar en San Patton. ¡Qué pena!

Esta frase la dice el personaje interpretado por Samuel L. Jackson. Una buena frase. Además dicha cabalmente, es decir, en el momento justo, como deben de ser dichas las buenas frases. Porque hay algo peor que esas escenas que se ruedan simplemente porque a alguien (al directos casi siempre) le parece que en ellas se produce un buen diálogo. El cine está lleno de esas escenas. Son repugnantes porque se ve al pedante, osea, al pretencioso. Esta frase, en cambio, parece que debió de estar en el guión y me imagino que a Samuel le habrá gustado y no me extrañaría que fuese uno de los motivos por los que se animó a aceptar a hacer la película.

Creo que la película se ve bastante bien. Claro que no tiene nervio pero tampoco tiene diálogos estúpidos ni un guión de esos en los que el espectador siente que su inteligencia está siendo hundida en un lodazal. Además, está Luis Guzmán, haciendo un buen papel. La película crece cuando está él en la pantalla. No cuando está Ed Harris. Lo cierto, es que es difícil de entender qué hace Ed Harris en esta película. Él tampoco debió entenderlo muy bien porque se le ve desganado, como ido.