Llena de pretensiones que resultan postizas, falsas.
Ya está bien, ¿no puede nuestro maldito cine contar historias y contarlas bien?
Entre tantos intérpretes hay de todo, pero algunos están tan sobreactuados que da grima.
Y que si un solo planosecuencia, bien, eso es un instrumento pero si dentro de ese plano lo que hay es plano lo que resulta es un plano plano.
Hace falta más sencillez, más sinceridad, menos quererse hacer el interesante... Sin serlo.
Todo drama, gente friki, riñas, sin un motivo de alegría. ¡Qué pesadez!
Moralista de la peor especie hecha de tópicos.
Malas lecciones de psicología barata.
Política de Podemos y chorradas varias. Antipolicía.
No he visto tontería mayor en mucho tiempo.

Le pongo un siete para subirle la nota. No es justa esa media de cuatro. Es una comedia sin más, corta, con una idea inicial buena, la de la mesa de los "varios" en la típica boda. En total son seis, distintos, con historias diversas. Y aparte de algún que otro gag gracioso, es una comedia romántica a su modo.
Nada del otro jueves, la verdad, pero rodada bien y a veces con algún toque entrañable.
Se pasa bien viéndola, entretiene, sin basteces de las acostumbradas en algunas comedias americanas... y españolas.

Películas mediocres tienen en FA decenas de críticas. Por favor que alguien escriba algo para comprobar si estoy equivocado, al considerar esta película un milagro y un misterio y una prueba de la buena racha del cine rumano.
Rodada con mucha habilidad, con sencillez y belleza de planos, ¿qué nos quiere decir?
Una joven novicia, la guapísima Ioana Bugarin, de la que acabamos de saber que está embarazada, es violada cuando vuelve al convento después de un examen médico.
Interviene un inspector de policía para aclarar el crimen. Y a partir de ahí unos giros de guiones que no se entienden si no se tiene en cuenta el trasfondo de la película: si son posibles los milagros.
Un final sorprendente, que deja abierta cualquier interpretación.
Una película inquietante, que no se olvida. ¿Que ha pasado en realidad?

Película que mantiene continuamente el interés no solo por el tema que trata -la hambruna en Ucrania a causa de la política exterminadora de Stalin- sino también por el modo en que está rodada, con un buen ritmo y un guión inteligente, que aúna esta historia del periodista Gareth Jones, que denunció la tragedia con la escritura de Orwell de “La granja de los animales”.
Muy bien interpretada por James Norton, Vanessa Kirby y Peter Sarsgaard entre otros. La fotografía, sobre todo en los parajes nevados de Ucrania, es muy buena y contribuye a dar idea de aquella situación desoladora.
Gareth Jones merece ser recordado. Murió antes de cumplir 30 años, eliminado muy probablemente por los soviéticos en 1935.

Desde el principio se nos dice que esto va de desierto, silencio, tranquilidad, belleza.
Si se acepta eso, la película, aunque sin momentos de interés dramático, está llena de imágenes admirables, de relaciones cercanas, siendo la mejor la del más que criado protector Fatuh.
Es cierto que algunas escenas huelen un poco a cartónpiedra, pero se perdona.
La Kidman, sin llegar a la genialidad, cumple muy bien, dentro de sus conocidas limitaciones, entre ellas cierta falta de expresión.