Sí, ya sé que esta peli tiene cosas bochornosas, como los trapitos de mercadillo de los villanos y la tarántula que se mueve con el cordelillo, pero contiene ese sabor añejo de los films aventureros de antes, con su ingenuidad intacta y ganas de hacer las cosas. Es un poco simplona en su desarrollo, salen bichos, los matan o esquivan y vuelta a empezar. Pero hay que agradecer el entorno en el que está rodada y la presencia de Granger. Sobre la novela en la que se basa, pues poquito, y es algo que quizá debieran haber desarrollado más. Hay que hacer retroceder nuestras mentes más de medio siglo para ponernos en contexto y verla, de otra manera no la disfrutarás, y lo merece.
A destacar la escena de la estampida.

Algo le falta a esta película, que podía haberse metido incluso dentro de los títulos de culto del género B. Tiene buenos actores, una ambientación cuidada, efectos conseguidos, la historia promete... pero se pierde demasiado en cuanto el soldado Todd es echado al planeta como basura no reciclable. Ahí algo falla. La cara de palo del señor Russell tampoco ayuda, aunque tenga que interpretar a un alienado soldado. Falta garra, tensión y emoción, que son baluartes en los que este género se suele amarrar para salir a flote y crear títulos memorables. Eso sí, Connie Nielsen está muy guapa.

Eso le ocurre a todo director que se atreva a meter las narices en un clásico del cine. Por que el film de Carpenter es un clásico en toda regla, y no una película de culto solamente.
El inicio de esta cinta es algo lento. La protagonista es sosa y sin carisma. Le falta oficio y crear más ambientación al director. Guión con lagunas...
A su favor tiene una buena factura técnica, los efectos cumplen, y sobre todo, a mitad de metraje se pone algo interesante, con cambio de escenario al final que se agradece.
Las escenas intercaladas con los títulos de crédito finales preparan adecuadamente al que todavía no haya visto la película de los 80: ahora ya no hay excusa para no verla.

Este experimento no es más que un contínuo homenaje a uno de los grandes de la literatura, el hecho de que esté rodada en blanco y negro y no tenga sonido, sólo música de fondo, explica que su creador estaba a vuelta de todo y que sólo pensaba en homenajear al maestro.
Reutiliza en el cine los caminos que ya usara Lovecraft para crear su literatura, y le ha salido bien. Cuanto menos, es curioso e interesante de ver, ya que a pesar de lo extenso del trabajo de Lovecraft y de sus posibilidades cinematográficas, apenas se le ha dedicado una mínima atención.
Habrá que esperar a ver que hace Del Toro con "En las montañas de la locura". Aunque me aterra lo del 3D. Recemos, no vaya a ser que hagan una chapuza y se despierte alguno de los Primordiales para poner las cosas en su sitio.

Ahora que el señor Snyder ha realizado su propio capricho personal, esperemos que se centre en cosas de mayor calado y contenido. La película ha vendido muy bien sus cartas, mostrando en los tráilers imágenes sugerentes para cándidos como yo. Luego, en la sala de cine, te das cuenta que aparte de las escenas de acción, poco más hay que ofrecer. Sr. Snyder, vuelva al redil, que a pesar de esta fechoría, sigo creyendo de que puede ser uno de los cineastas que más nos pueda ofrecer en los próximos años.