Filme de acción puro y duro, con presupuesto, bien rodado, ritmo frenético y actores de carácter. El guión es meramente funcional, un vehículo para una ristra de secuencias de acción muy bien coreografiadas.

Esto es un no parar de tiros, explosiones, peleas y violencia gratuita que deleitarán a mayores y menores por igual.

Los actores, Ryan Gosling, Chris Evans, BB Thornton y Ana de Armas (lo único salvable de la última de Bond), muy eficaces.

Si lo que buscas es un reto a tus neuronas, ésta no es tu película.

Excelente entretenimiento para estas noches tórridas de agosto. Bendito Netflix.

... es que me resulta imposible suspender a Jessica Biel!

En fin, a la sinopsis de Filmaffinity solo le falta una línea más para completar la película, explicar el porqué de las desapariciones, porque este film es muy simple y plano.

En un antiguo y decadente poblado minero en los bosques del norte de USA desaparecen niños. Las autoridades no se dignan a resolver el misterio, y la chusma que habita el pueblo tiene miedo, atribuyendo los raptos a un "hombre alto". Hasta que se llevan al hijo de la enfermera Biel, y ésta se encarga de aclararlo.

Esto no es una película de terror, no os confundáis: no hay ningún susto. Trata de ser un thriller, lástima que no genere apenas tensión.

El guión es simple y burdo. Falta nervio por todas partes. Los actores, justamente desconocidos. Parece hecha ad maiorem Jessica gloriam, que no en vano es coproductora de la obra. Que buena está esta mujer, todo sea dicho.

Para pasar el rato siempre y cuando no le pidas nada a la peli y no tengas cosas mejor que hacer (salvo que seas incondicional de Jessica Biel, en cuyo caso es de visionado mandatorio).

El título y el trailer de esta película desinforman. De hecho, hasta la sinopsis de esta web (y de otras) induce al error. Anuncian un thriller donde Ethan Hawke, un agente del gobierno del siglo XXI, trata de impedir un atentado terrorista en Nueva York en el siglo XX mediante viajes en el tiempo. El argumento se parece al de una película de Jake Gyllenhaal estrenada en 2011.

En realidad, lo que trata de mostrar esta película es una paradoja que se produce a raiz de estos viajes temporales: ¿Qué fue antes, el huevo o la gallina?

Y no hay más. Noventa minutos de película para enunciar este dilema. Vi esta película en inglés, y no descarto haberme perdido algún giro o detalle relevante, pero lo dudo. Un poco demasiado ¿no?

Trama improbable, ritmo irregular, interpretaciones planas. Dirección de quiero y no puedo. Lo peor es que carece de sustancia. mención aparte Ethan Hawke: este hombre, que en su juventud parecía tener grandes espectativas, confirma que está en un circuito de pelis serie B; es un spoiler con patas: su mera presencia parece garantizar que estamos ante un subproducto.

Solo recomendable a fanáticos del SCI-FI.

Ah! la solución al dilema en el spoiler

Vistos los tres primeros capítulos, en mi opinión la serie no entusiasma y se queda por debajo de las expectativas, pero no es tan mala como algunos compañeros indican.

Hay dos criticas de seguidores de Tolkien en esta misma web brutales, Estelwen y Sotomonte, que son para enmarcar. Crucifican a la serie y la castigan con un 1, y la sentencia es firme e irrevocable: esto no es Tolkien. Y tienen razón al 100%. Si amas y vives el universo del escritor, esta serie te va a sentar como una bofetada.

Yo he leído bastantes libros de Tolkien. Pero mi crítica no va a ir por esos derroteros: quiero considerarla como una obra independiente, y no juzgarla por su fidelidad a los libros o a los apéndices de los que tengan los derechos de autor.

Y el caso es que la serie no me parece que acabe de funcionar. Hay dinero y la producción parece encomiable. Los aspectos técnicos son buenos. A mi entender falla el guión y la dirección. Falta propósito, intensidad, sentido de la épica, ritmo, diálogos, caracteres marcados en los personajes. La narración es delavazada. No acaba de enganchar, no acaba uno de empatizar con los personajes, no acaba de transmitir peligro y emoción. Las relaciones entre los personajes son banales y desestructuradas. Así no se puede construir una historia, y menos que sea épica.

Incorpora muchos elementos de la cultura woke. Amazon no puede sorprenderse de reacciones viscerales negativas: manipular un clásico literario introduciendo elfos, enanos etc negros, eso es política, y deberías entender que una parte de la audiencia se va a rebelar. Y me da que vamos a ver cosas peores en materia woke. Es el signo de los tiempos: las productoras no se cansan de bombardear ideas para educar a la audiencia, y van a conseguir la reacción contraria de lo que pretenden.

No puedo valorarla negativamente porque a pesar de todos sus fallos la serie tiene capacidad para evocar mundos que me atraen. Morfydd Clark y Robert Aramayo me gustan como Galadriel y Elrond. La lucha entre el Bien y el Mal es un clásico intemporal. No puedo dejar de verla, aunque constate que me ha defraudado (de momento).