Haz click aquí para copiar la URL
Críticas de seagal4ever
<< 1 10 11 12 20 27 >>
Críticas 133
Críticas ordenadas por utilidad
10
28 de octubre de 2009
18 de 28 usuarios han encontrado esta crítica útil
Épica, monumental, prodigiosa, colosal... Estos son solamente algunos de los múltiples adjetivos de los que los simples mortales podemos valernos para intentar explicar el auténtico desbarre de proporciones bíblicas al que el binomio Woo-Yun Fat nos somete durante los más de 120 minutos de metraje del filme: 182.880 fotogramas impregnados de un saber hacer del que pocos directores pueden hacer gala. Hard-Boiled es una obra capital del cine moderno de acción.

John Woo y Chow Yun-Fat tocaron el techo de sus respectivas filmografías con este filme, y mientras el uno ha perdido parte de su magia en Hollywood, el otro no puede decirse que haya participado en buenos proyectos precisamente. Sin embargo, Tony Leung sí que ha sabido mantenerse en la cresta de la ola, y no es difícil ver su rostro en filmes de prestigiosos directores como Ang Lee, Wong Kar-Wai o Zhang Yimou.

El guión, obra de Barry Wong y Gordon Chan, toma como base una historia del propio Woo. ¿Qué puede decirse de él? Desde luego, carece de la originalidad de los libretos de Charlie Kaufman. En él no encontraremos los elegantes e ingeniosos diálogos de Lubitsch o Wilder. No nos hará reflexionar sobre la vida o la condición humana como hicieran Bergman o Tarkovski. No. Hard-Boiled es un melodrama de acción, típico de su director, pero más atemperado que otros trabajos suyos anteriores, como The Killer o A Better Tomorrow. Nos encontramos ante uno de esos casos en los que el contenido está totalmente supeditado a la forma, al envoltorio. El filme posee un poderío visual avasallador, si bien no se puede dejar de reseñar en la trama algunos de los temas más habituales del director hongkonés. El honor y la amistad están presentes a lo largo de toda la cinta, en lo que es sin duda uno de los rasgos más característicos del director desde que trabajara en los años '70 como ayudante para la mítica Shaw Brothers.

Estamos pues, como se ha dicho, ante una película fundamentalmente visual, un violento y a la vez bello espectáculo pirotécnico que entra por los ojos, por el corazón, y ante el cual la razón poco o nada tiene que argumentar al respecto, salvo situarse en "stand-by" y dejar que el torrente de imágenes penetren directamente hasta lo más profundo de nuestro ser, hasta nuestra parte más visceral, y disfrutar...

En una Hong Kong al borde del colapso, con unos maleantes sin escrúpulos que actúan a sus anchas mientras los policías son incapaces de poner freno a la situación, el inspector Tequila tomará cartas en el asunto y se involucrará personalmente para dar al traste con una peligrosa organización de tráfico de armas.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
seagal4ever
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
30 de diciembre de 2010
11 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Interesante película de aventuras que, más allá de la superficialidad argumental y narrativa que puede aparentar, atesora algunos detalles dignos de consideración que consiguen alejarla someramente de la típica cinta de aventuras ambientada en parajes exóticos.

Nos encontramos ante una de las tantas incursiones que el reputado cineasta Howard Hawks dedicó al contexto de la camaradería masculina. Incursión que suele producirse habitualmente en lugares dejados de la mano de Dios donde se forjan grandes lazos de unión entre los compañeros de profesión, que logran sobrepasar la barrera de la amistad para llegar incluso a simular, o al menos sobreponerse, sobre los mismísimos lazos conyugales, imposibles de mantener en profesiones tan arriesgadas y alejadas de la civilización como la que nos ocupa en este caso: nada menos que aviadores de mercancías en medio de los Andes.

La cercanía de la muerte, tan presente a lo largo de todo el metraje, es probablemente el pilar fundamental sobre el que orbitan el resto de elementos de la obra de Hawks. El sólido guión de Jules Furthman se apoya convenientemente en esa incertidumbre constante sobre si habrá un mañana, estableciendo así un rico mapa de relaciones y emociones que son visitadas progresivamente en el transcurso de la trama.

Y es que, la inolvidable reacción de todos los pilotos ante la muerte de uno de sus compañeros, lejos de resultar banal e intrascendente como pudiera parecer a tenor de ese improvisado cántico que les sale del alma, encierra bajo sí una profundidad y una trascendencia absolutamente brutales y desoladoras. Una realidad tan intensa y cruel que terminará por estallar en esa escena final de Cary Grant, el duro y fuerte Grant nada menos, llorando (o al menos con evidentes síntomas de haberlo hecho) con la mirada extraviada en la nada más absoluta por la pérdida de su amigo. Un momento mágico del cine que, sin embargo, no deja de estar empañado por ciertos lastres narrativos que me dispongo a comentar.

"Sólo los ángeles tienen alas" no me parece la obra maestra que muchos críticos y espectadores ven en ella. Y no lo es, básicamente, porque la conjunción entre película de aventuras y romántica no termina de cuajar en ningún momento. Concretamente, está segunda trama (la romántica) me parece estar forzada, como si de manera continuada fuera a contrapiés, sin llegar en ningún momento a ponerse a la altura de la película.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
seagal4ever
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10
3 de enero de 2011
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Escribo estas líneas con los ecos de la grandiosa banda sonora compuesta por Morricone aún resonando en mis oídos. Pocas melodías tienen tanto poder como el que se desprende de esta imborrable composición, esas brutales distorsiones, esa epicidad desbordante que es capaz por sí sola de destrozar los sentidos y provocar arrolladores delirios. Y es que, contando con una sinfonía tan brutal como la que el maestro Morricone regaló a la humanidad, no quiero decir que sea fácil, pero no es tan complicado cargar de emotividad y trascendencia un duelo a muerte bajo el intempestivo sol de la frontera de Utah. Y Leone no es que sea manco, precisamente.

Más allá de la trama, más allá del contenido (que haberlo, lo hay), más allá de todo, está la forma. Un lirismo imperturbable de la imagen como pocas veces se ha visto en el cine. Un despliegue de dirección tan sumamente portentoso que consigue deslizarse suavemente a través de nuestras retinas mientras somos testigos de excepción de una composición pictórica apabullante. Leone imprime su indeleble sello personal a cada uno de los fotogramas del filme dotándolos de una significación tan sumamente recargada y virtuosa que logra eclipsar por completo el resto de elementos del filme.

Sin embargo, bajo ese eclipse, bajo esas sombras en que se transforman el resto de elementos de la cinta, encontramos maravillas como las magistrales interpretaciones de Charles Bronson, Jason Robards o Gabriele Ferzetti. Pero si hay alguien que sobresale por encima de todos ellos, alguien que logra crear un personaje absolutamente inolvidable e imperecedero, ese no es otro que Henry Fonda.

Con su impagable recreación del despiadado Frank, Fonda sube algunos peldaños más en su particular periplo por la escalera hacia el paraíso interpretativo en el que merece sin duda estar. Esa continua sensación de ambigüedad que se desprende de sus miradas; esos ademanes tan parsimoniosos pero tan letales, esa suficiencia con la que mide cada una de sus palabras.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
seagal4ever
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3
13 de septiembre de 2010
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Definitivamente, el tiempo es relativo. Y de qué forma puede llegar a serlo. Ver de manera ininterrumpida esta confusa obra de Victor Halperin es una de las experiencias más cercanas que el ser humano puede experimentar sobre la relatividad del tiempo.

Y es que, pese a que objetivamente hablando este filme tiene una duración de poco más de una hora, la dura realidad es que el tiempo que el espectador ha de cargar sobre sus espaldas supera ampliamente esta cifra, multiplicándose como mínimo por tres. Así que, estudiantes del mundo, una recomendación: en época de exámenes, cuando más pillados vayáis con los plazos y veáis que el tiempo no da para más, hacedme caso, poneos esta película y comprobaréis como vuestro tiempo de estudio se multiplica hasta límites que creeríais inimaginables. La realidad se curvará ante vosotros y conseguiréis asaltar al mismísimo tiempo para robarle unas valiosas horas de estudio.

Pero tras esta necesaria revelación, vayamos al asunto en cuestión. "La rebelión de los zombies" es un filme humilde. Muy humilde. Tres o cuatro decorados que sirven como escenario para una historia total y absolutamente incomprensible cuyo principal culpable es un guión tan vago como difuso. Un puzzle narrativo de dimensiones estelares en el que los acontecimientos se desarrollan con la más despótica de las libertades, dejando de lado toda coherencia interna posible.

En medio de todo este caos argumental, nos encontramos (en algún punto indeterminado del metraje) con que todo gira en torno a una historia de amor (lo descubriremos bien avanzada la trama; eso suponiendo que hayáis aguantado lo suficiente hasta llegar a ese instante sin sacar el DVD del reproductor y prenderlo fuego). Tras unos interminables minutos que parecen horas empezaremos a atar poco a poco todos los cabos sueltos que el filme había ido sembrando a lo largo del metraje. De verdad que hay que echarle mucha imaginación para unir todas las piezas del rompecabezas y crear algo coherente y consistente.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
seagal4ever
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10
22 de diciembre de 2009
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
"El muelle" es una pequeña joya del cine francés que, afortunadamente, con el paso de los años ha ido ganando cada vez más adeptos, sobre todo a raíz del estreno en cines de la película americana "12 monos" (dirigida por el inclasificable Terry Gilliam, y con Bruce Willis y Brad Pitt de protagonistas), un remake de la historia que nos ocupa.

La obra de Terry Gilliam extiende y amplía los horizontes de la historia que narra Chris Marker en "El muelle" y, personalmente, he de decir que logra un resultado muy por encima de la media en cuanto a filmes de ciencia ficción se refiere. Pero Gilliam juega con ventaja, y es que el mediometraje de Maker es en sí mismo tan poderoso y rico en matices que, una vez visionadas ambas obras, queda la sensación de que partiendo de un material tan original, lo complicado habría sido echarlo a perder...

El filme de Maker narra los viajes a través del tiempo de Davos Hanich, un superviviente de la Tercera Guerra Mundial que es enviado en repetidas ocasiones al pasado y al futuro con el objetivo de obtener información y tecnologías que ayuden a la decadente raza humana a evitar su extinción. En uno de esos viajes conocerá a una inquietante mujer y, poco a poco, logrará ir desentrañando los misterios que se esconden detrás de una enigmática imagen que desde que se grabó en su mente cuando tan solo era un niño, no ha hecho sino atormentarle insistentemente.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
seagal4ever
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 10 11 12 20 27 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow