Vaya sorpresa y que alegría. Vas sin expectativas y te encuentras un buen thriller con cierto regusto clásico con el que pasas un rato estupendo.

Buena historia y tan bien contada que sus inesperados giros -algunos flipantes- se te hacen creíbles. Giros que te sorprenden y que te estimulan si eres de los que intentan resolver la película antes de que acabe. El final, a mí me sorprendió y ademas consiguió encajar satisfactoriamente todas las piezas.

Muy bien dirigida, con un ritmo interesante, vivo y cercano. El montaje es bueno y sugerente. Las imágenes son buenas, a veces urbanas y otras oníricas. Es una buena historia y una muy buena película.

El reparto está bien, especialmente Hoskins. Pero los tres lucen a un buen nivel y le dan credibilidad a esta alucinante pesadilla. Ojalá hubiera más películas así...

Remake de otro éxito del pasado. Una película familiar que entretiene, divertirá a los más pequeños y que te arranca alguna risa puntual.

Espectacular, con increíbles decorados y escenas de animales generados por ordenador, razonable acción y peleas, una historia ya conocida (y vista varias veces), unos chistes más o menos graciosos y unos personajes definitivamente simpáticos y - en general - muy planos. Sólo el de Jack Black, tiene gracia y destaca. Tanto por su interpretación como lo que representa ver a una popular adolescente metida en el cuerpo de un gordo gafapasta.

Entretiene y gracias al ritmo en la película esquiva los momentos en que casi se descubre que esta película está hueca y que no hay nada detrás de la pirotecnia visual. Un momentito de relajación por parte del director y esto hubiera sido un aburrimiento. Pero se salva la situación.

Una vez entrevistaron a AC/DC y les dijeron directamente: "Oye, siempre hacéis el mismo disco, sólo cambiáis la portada" y ellos respondieron: "Sí, y a la peña le encanta".

Bueno, pues eso mismo pasa con las películas de Statham. Salvo alguna excepción, siempre es la misma película pero cambiando el cuerpo de élite al que pertenece, el/la indefenso/a de la historia y los malos de la misma. Pero...¡a sus fans nos encanta!

Otra ensalada de puñetazos, por cierto, cada vez se lo curra menos. Otra apoteosis de explosiones y de malos histriónicos, frases lapidarias y cierto tufillo moral. Ya lo sabíamos antes de verla y como nos han dado lo que queríamos nos quedamos contentos. Es más de lo que pueden ofrecer otros films.

Producto de diseño algo algo artificial por lo compensado de sus ingredientes. Una buena ambientación noir setentera, una buena historia, unos buenos actores que te acaban convenciendo del buen rollo entre ellos (la que más me convenció fue Angourie Rice), algunos gags muy divertidos y gamberros (y otros que creen ser muy graciosos pero que resultan falsos y postizos).

El desarrollo de la película es interesante y te dejas llevar en la investigación de estos dos simpáticos perdedores. Interpretan bien y la producción es muy buena, se nota que hay dinero para invertir.
Buenos efectos, tiroteos ridículos (sobre todo los del final de la película), situaciones que empeoran la credibilidad del film (de nuevo, hacia el final de la película) pero en el cómputo total se te queda la sensación de haber visto algo bueno. Está claro por los chistes autocomplacientes y las situaciones supuestamente graciosas que los productores se creían que el resultado iba a ser de "muy bueno". Lo dejan abierto a una continuación... yo no la veo, sinceramente. El buen sabor de boca no es para tanto.

Da lo que promete, eso está claro. Acción más toda la parafernalia previa a la boda.
Tiene momentos simpáticos y aunque no llegas a reir en ningún momento, sí que te sale la sonrisa en varios de ellos.
Todo el protagonismo es para la pareja. Así que los posibles desarrollos de los secundarios, aquí se cortan de raíz. Los pobres sólo pueden decir dos frases ridículas para confirmar sus clichés de comedia romántica yankee. Las escenas de acción o peleas son simpáticas y entretienen pero te saben a poco, normal; aquí no van a poder lucirse los extras.

Lo mejor ver a uno de los tíos más molones del planeta, Lenny Kravitz, que tiene un papel tan molón como él y unas frases mucho mejores que las de todos los demás.

Es la típica película que puedes ver en el AVE o en el avión y te entretiene. Pero si compite con otro entretenimiento lleva las de perder.