Tras la gran "El mito de Bourne", llego a las pantallas del cine su secuela que sigue los patrones de la anterior, es decir, acción a raudales y ritmo trepidante.

Paul Greengass no da tiempo para el respiro y los diálogos no se desarrollan parados o quietos, si no moviéndose o corriendo debido a los peligros que acechan.

Matt Damon sigue estando genial en el papel de Bourne y el resto de los actores en sus papeles, destacando a Edgar Ramirez en un papel que compartieron Karl Urban (El mito de Bourne) y Clive Owen (El caso Bourne).

Si la anterior era guapa, esta lo es el doble o el triple de lo era la anterior, a su favor es el cambio de director, el testigo se lo pasaron a Paul Greengrass un realista director que supo darle a la secuela de Bourne lo que necesitaba.

Hay grandes dosis de acción y espectaculares persecuciones de alto voltaje y incluso me atrevería a decir que esta secuela es más oscura que la original, gran trabajo de los actores y la dirección de cámara.

Es una de mis favoritas.

El caso Bourne evoca a las mejores cintas de espías de los 70, pero eso si tiene acción actual y en buenas dosis.

El film esta dirigido por Doug Liman procedente del cine indie, quizás por eso el film tuvo éxito en taquillas, porque supo conjugar las dosis de acción necesarias con dosis de suspense sin llegar a aburrir como otros.

Matt Damon conjugo un personaje mítico que daría de hablar en el mundo del cine y respaldado por un reparto inusual en el cine palomitero.

Es la mejor película española que he visto en años y miedo me daba que fuera un bodrio de los grandes, pero no ha sido así.

Todo es genial, excepto una cosa Alberto Ammann no me ha convencido nada, sin embargo Luis Tosar es el puto amo de la peli, se los come a todos con patatas.

El diseño de producción es soberbio y espectacular para una película que es muy dura y realista.

Daniel Monzón, tu te ganas el puto 10 porque tu eres el mejor director del cine español actual.

Genial Película.

Estamos supuestamente ante el sucesor de HP y como ha tenido exito en Estados Unidos seguramente tendremos secuela, de esta "película de entretenimiento".

Para empezar es de esas de cuando la terminas de ver, se te olvida al terminarla, ¿a que se debe?, sencillo, no hay momentos memorables, ni química en los protagonistas y unos efectos especiales que a veces no producen el impacto deseado, es que todo es ligero y roza a veces el aburrimiento con diálogos tópicos y lo peor si la comparas con Harry Potter sale exclusivamente perdiendo, ¿porque?, Harry Potter ha alcanzo la seriedad y el epicismo que jamás alcanzara Percy Jackson y ahora a rezar para que Furia de Titanes sea mejor que este infantilismo.