La vi por primera vez en mi adolescencia; me reencontré con ella siendo adulta. ¿Que decir? Es increíble. Bien actuada, hermosamente narrada. Es tan oscura y cruel como bella y seductora. Básicamente cuenta la vida de un adicto a la heroína, su relación con el mundo. Su evolución en la vida.
¿Que motivos llevan a un joven a querer consumir?¿ Que otros lo llevan a querer alejarse de esa oscuridad?
Las imágenes, la música que acompaña... Todo me gusta.
La vi inumerable cantidad de veces y la puedo volver a ver otro tanto. La elijo, la recomiendo, la disfruto.
Es una verdadera obra de arte.

Más que una serie sobre la vida de Carlos Tevez , es una serie sobre la vida en la villa. Sin condimentos, sin nada que contar; carente de una historia potente que cautive. Creo que la única es la del mejor amigo de él. Su evolución es interesante.
Densa, repetitiva, con pocas actuaciones que parecen destacarse.
No viajan en la linea del tiempo, ya que se enfocan solamente en la infancia del futbolista.
No me llegó al alma, me dejó con un sabor soso.
Le sobran imágenes, le falta contenido.
De las actuaciones que nombré anteriormente, en lo personal, solamente me han gustado la de los dos jóvenes amigos (Carlos, y quien representa a su amigo Danilo). Las demás, flojas.
En fin... no la recomiendo. A no perder el tiempo.

Ante todo me ubico en la época en que la película se gestó, produjo y lanzó. Yo en ese entonces tenía 3 años (claramente no era público para esta película).
Pude verla por primera vez a los 24, y cada vez que puedo vuelvo a hacerlo.
Los actores hicieron un protagónico excepcional, valiente y sensible.
La historia que comienza con la más tierna foto de una familia unida, con proyectos y hasta un perrito; se transforma en un thriller oscuro, dramático e intenso; en el que no podemos dejar de ver a nuestro antihéroe (Douglas) como al gran salvador.
Atrapa por su modo de ser contada. Son cosas que pueden suceder en la vida mía, en la tuya o de él.
Fantástica, para ver una y mil veces más.

Recuerdo haberla visto en una trasnoche de cine en mi ciudad natal junto a mi hermana, de casualidad.
Entré sin tener la menor idea sobre que película estaba por ver, lo cual genera menos expectativas. Nunca imaginé que me encontraría con este peliculón.
Salí maravillada, emocionada.
Se convirtió fácilmente en uno de mis films preferidos.
Dan ganas de volver a verla una y mil veces.
Sus escenas y mensajes, hablan por si solos.

Escuche muchas recomendaciones sobre esta película (en la radio por ejemplo). Decidí ir a verla, pensando que me iba a encontrar con un “peliculon”. Es lenta, aburrida, predecible. El argumento es interesante, un obsesivo estructurado, una dama que llega para “desestructurar”. Ninguno me transmitió nada; y aunque de cine se muy poco, si algo tengo claro, es que un largometraje tiene que generar alguna emoción; de no ser así, se descarta.
No vale la pena pagar por ella, tampoco volver a verla. Da sueño y tiene excesos de escenas insignificantes .
Película perdible por demás.