El título no es una metáfora, realmente es una ballena, una ballena varada en la playa y no quiere salvarse, es un suicidio lento, solo quiere morir, lo único que busca es la redención, él murió hace ya mucho tiempo y sólo desea el perdón, y cuando lo consiga ya será realmente libre para irse.
Es una obra de teatro muy bien filmada donde destacan todos los actores, en especial y por encima de todos Brendan Fraser, que maravilla de interpretación, tiene una mirada tan limpia, tan inocente, tan llena de ternura que te llega directamente al corazón, una de las mejores interpretaciones de la historia, increíblemente conmovedora.

La primera media hora promete, tenemos un gran torino versión española, pero a partir de ahí no es que vaya hacia abajo, es que se despeña por un acantilado. El contrato del guionista profesional sólo cubría la primera media hora luego las ocho horas restantes de la serie nadie parece que las piense mucho, van rellenando minutos con lo que sea, nada tiene mucho sentido, mención especial merece ese polvazo encima del vagón de tren, es un videoclip malo de los ochenta, y así hasta el último episodio donde todo se resuelve de manera bochornosa y donde tienen la poca vergüenza de proponer una segunda temporada, todo dependerá de la audiencia, seguro.
Se salvan Coronado y Zahera haciendo de Coronado y Zahera, mención especial para éste último que se come haya donde salga la escena pero empieza a correr el riesgo de encasillarse y en convertirse en una parodia de si mismo. También están bien Tallafé y Caro como pareja cómica. El resto de los protagonistas no hay por donde cogerlos, Nelson está estreñido toda la serie, el narco es de chiste....
La banda sonora directamente lamentable

Las dos temporadas son magníficas, te atrapan, pides ver el capítulo siguiente, totalmente adictiva.
La historia es buena, tiene fondo. Los actores están estupendos, mención especial para Candela Peña y Darío Grandinetti que se comen la pantalla, pero por encima de todo, el auténtico protagonista es la propia isla que da nombre a la serie, magníficamente fotografiada, los pueblos, los paisajes, el mar, todo bellísimo, a veces el contenido es tan importante como el continente, dan ganas de irte a vivir alli.
No te la pierdas, disfrutarás.

Hay que ponerse a la moda y hay meter heroínas y heroínes por todas partes, da igual que no haya historia, da igual que los decorados sean de cartón piedra hechos por la clase de manualidades de primero de la eso, da igual que los actores estén completamente perdidos y lo único se les pide es poner cara de palo, da igual todo.
Tenía ganas de ver esta serie, una producción de movistar con un director de campanillas y con una historia que prometía. Con dificultad acabe el primer episodio y sufrí hasta la mitad del segundo, hasta que la vergüenza ajena me hizo apagar la tele, insoportable.
No entiendo como los críticos profesionales le hacen esas críticas, solo se entienden si piensas mal... y acertarás.
Probablemente la peor serie de movistar, aunque sólo probablemente.

Darle un 1 y decir que es una película mala es faltar el respeto a las películas malas. No hay nada que se salve, es un horror la mires por donde la mires.
Viendo esta castaña uno comprende lo gran director que era Mariano Ozores
Se conocen países en donde torturan a la gente obligando a ver este bodrio.