A decir verdad es bastante fiel a la obra literaria, obra que me gustó sobre todo en su primera mitad. El problema de esta cinta es la diferencia que existe interpretativamente hablando entre las dos protagonistas. Está claro que la intención del realizador es la de contraponer la fuerza de Bárbara Lennie a la inocencia y cierta inseguridad (en la ficción) de Inma Cuesta, pero es que la primera ensombrece en demasía a la segunda, tanto que llega a desdibujarla y a querer saber más de la trama anclada en el pasado origen de la trama principal que la investigación en el presente. Sé que esta diferencia entre ellas, por guion, debe ser como se nos muestra, pero es tanto el abismo interpretativo... Se deja ver, un tanto lenta en ocasiones y poco más. Sigo prefiriendo el libro.

Entiendo que hay que seguir trabajando y haciendo cine. Entiendo que estrellas del celuloide deban poder seguir produciendo para pagar su supuesto alto coste de vida. Pero someternos a esto. Mala, peor interpretada y con una conclusión más que lamentable. Por destacar negativamente (metiendo aún más el dedo en la llaga): cómo es posible que una asesina a sueldo de élite no sepa ni hacer footing, cómo es posible que a veces los secundarios (en el cine por ejemplo, la niña pequeña de Collin,..) miren directamente a la cámara en un descuido de posproducción, cómo es posible esa escena final en el hotel,... Por favor que vuelva el cine de acción de verdad.

Película llena de tópicos. No hay en ella nada que no hayamos visto antes en cualquier otra película. podría decir incluso, que aún con más artificio como es lógico, es uno de esos montajes de cuarto milenio que acompañan los testimonios de los invitados al programa a contar su experiencia paranormal. Lo mejor pues quizás la recreación de otra España no muy lejana (aunque sin ahondar demasiado) y lo peor pues lo demás. No la recomiendo, ni por los actores ni actrices ni por el tan manido argumento. Un 3 por el esfuerzo.

Busca el ser humano más allá descuidando aquello que tenemos más cerca. La película ha creado expectación. Creo que el público en general se esperaba una obra de ingeniería cinematográfica, como Interestelar, y en cambio se ha encontrado con una cinta intimista y que destaca, por encima de todo, por la maravillosa interpretación de Brad Pitt. Es dificilísimo echarse una película así a la espalda y conseguir este resultado. Quizás es demasiado para una premisa tan simple, pero eso es lo que hace el ser humano en definitiva, complicarlo todo en exceso, cuando muchas veces todo es más sencillo que eso. Lenta, un tanto larga pero con significado. No la vería de nuevo, pero la vería por primera vez otra vez si pudiera olvidarla.

Aunque sea una película que comienza de una forma interesante y original, luego no tiene sentido. Los protagonistas son unos seres humanos inmaduros y el único que muestra un tanto de cordura es el niño pequeño. Me gustan las películas que cuentan cosas del día a día, cotidianas, sin demasiado artificio. Es algo que caracteriza al cine francés. Pero lo que no entiendo es que no haya un giro de guión, algo con enjundia y el planteamiento se resuma a algo tan trivial y mal resuelto. No voy a entrar en valoraciones de actores ni actrices. Todo es demasiado simple, plano y sin fundamento. No merece lo más preciado que tenemos, que es el tiempo.