Sugerente compendio de imágenes- varias por segundo, a lo Michael Bay - de fragmentos reales de restos vegetales-hojas, tallos, pétalos de flores- a modo collage, todo muy tupidito. La película tiene un total de 2496 fotogramas, según Wikipedia, y dos fondos, blanco y negro, como un tríptico, como "El Jardín de las Delicias" de El Bosco, que parece ser le inspiró. Naturaleza proyectada o naturaleza disecada, ya que está muerta, apastada entre dos celuloides. Su verde canto de cisne, pues con el tiempo se secarán.

Corto no demasiado brillante de Brackhage, que parece buscar o recrear el resplandor de una tormenta tras las nubes. O eso parece. También hay algún destello. Frente a una casa de esas que da miedo y junto a un ulular que parece de un cachorro perdido. Pero el conjunto no está nada logrado.

Lo único aprovechable es la elegante presentación. Interesante tipo de letra. Lo único. La película es una especie de mockumentary que no llega ni a eso, en la que unos reporteros dicharacheros de la GNN se van a una ciudad en la que los robots gestionan todo - policía, mantenimiento, cuidadores - y, posiblemente por un sabotaje, empiezan a matar a todo quisque. El problema del filme es que todo se reduce a los problemas y relaciones de los periodistas allí destacados y su jefe, y su supervivencia frente a los robots, siendo testigos de lo que hacen los robots, pero poco, ya que no hay medios. Algunos cadáveres por el suelo y ya está. Pero demasiado diálogo estúpido. ¡Por favor, podría haber sido como la purga 2, versión robótica!

Resulta patética la historia en todos sus conceptos - no hay ejército, el empresario y su compañía de robots se reduce a dos tipos frente una pantalla y ya está ¡con eso monitorizan a los cientos de robots!, las conexiones en directo de los periodistas ... nada es creíble y sí muy postizo. Y los efectos especiales son de pena - CGIs casposos con unos robots demasiado digitales.

En fin, no pierdas el tiempo. Ni como serie B vale.

A veces te sorprenden. "The fisherman" es un corto perfecto. Rodado con la maestría del primer Spielberg, que sabe tanto escudriñar en los personajes como dirigir magníficamente la acción y el misterio, un soberbio montaje, una gran fotografía, sobretodo de noche y en el mar, que sabe jugar con el cielo encapotado, las aguas oscuras y las luces submarinas, un guión para chuparse los dedos - donde nos esbozan, con pocas líneas, la trayectoria vital del protagonista, sus cuitas, retos y fracasos- una interpretación que te cautiva y con la que el espectador empatiza, y aunque la veas en chino subtitulado en inglés sigue siendo intensa y profunda- buenísimos efectos especiales y, por último, una banda sonora que sabe transmitir in crescendo la intensidad y emoción de la historia.

Todo encaja, como un engranaje de un reloj suizo. Todo está en su sitio. Nada sobra ni nada falta. Es inmejorable. Una maravilla digna de profesionales como la copa de un pino. Espero saber más de este equipo. Lo valen, y mucho.

Amnesia. Sospecha. Una situación límite. Despiertas, sin memoria, en la que parece tu nave, perseguida y atacada. Tu compañera lucha por su vida. No sabes. Recuerdas cosas. Pero ¿es cierto lo que ves? ¿es cierto lo que escuchas? ¿es cierto lo que recuerdas? ¿quién eres tú? Buen trabajo de Kendall, a los mandos de este corto - tanto en dirección como en guión. El corto mantiene el interés hasta el final. Ambientación correcta, al igual que los efectos especiales. Convincentes interpretaciones. Diálogos creíbles. Vale la pena dedicarle unos minutos de tu tiempo.