Detrás de este título que roza el humor negro se encuentra una película que roza el buenismo. Aunque yo creo, que aquí la mayoría hemos venido a ver la leyenda viva del cine que es Sophia Loren, así que quejas, más bien pocas. Ella consigue dar luz a una historia y un desarrollo bastante convencional, que por su tono desdramatizado podría haber quedado en una película fácil de olvidar y, sin embargo, logra cautivar.

Se agradece cuando no te hacen llorar a punta de banda sonora, que en este caso no puede ser el envoltorio más perfecto y que, aunque culmine con un precioso tema de otra leyenda viva, en este caso de la música italiana, la emoción llega porque todo está en sintonía para ir cocinando ese sentimiento a fuego lento, en muchos casos con un toque de comedia y, sobre todo, con una sólida base de actuaciones que dan consistencia a un plato que llena, pero no empacha.


Se me caerían los anillos si hablara de su actriz principal que fácilmente, después de más de una década sin verse en un cine, podría hacer de la película dirigida por su propio hijo la última actuación en la gran pantalla, en este caso, mayoritariamente de plasma. Aunque bien hubiese merecido un estreno en cines como dios manda, pero gracias al pase especial que hizo la plataforma en la Academia y a algún que otro cine que proyecta películas de autor fue posible la experiencia completa, sino, siempre nos quedará Netflix, que para eso paga.

No me quiero quedar sin aplaudir tanto la interpretación del niño senegalés, Ibrahima Gueye, como la vecina del gremio, Abril Zamora que, de hacer, en general, pequeños papeles en pequeñas producciones, ha pasado a compartir escena, larga parte del metraje, con la mismísima Sophia Loren. Abril nos regala uno de esos compañeros de viaje del protagonista a quien no cuesta coger cariño, gracias a un bonito personaje vestido de una actuación sincera y carismática.


Así que, aunque todo pueda parecer un marco del regreso por la puerta grande, y quizás adiós, de un mito del cine con un papel al que, los premios ya le quedan pequeños, sería en cualquier caso un marco de lujo con vida propia, que la dignifica a mucha honra.

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Una vez más las apariencias engañan.

A veces lees una sinopsis y te parece original y luego no saben como ejecutarla de manera correcta dando como resultado una película desastrosa.

Otras veces lees sinopsis de ideas que a priori te parecen absurdas y te llevas la sorpresa de que gracias a una buena imagen, unas más que decentes interpretaciones y un saber aprovechar los momentos de tensión para dar uno que otro susto, hace que te quedes con un buen sabor de boca al ver una película como esta, con una idea original tan poco terrorifica como la de unos niños asesinos. Que se me venia a la cabeza el muñeco diabólico y a mi las personas/seres tan pequeños no me resultan creibles dando miedo. En este caso me resulto creible y se me hizo muy agradable ver películas como estas en el FanCine.

Sobre los spoilers precisamente quiero empezar. Basta ya de sinopsis y trailers que destripan las películas, no sé quienes se dedican a esa labor, pero me parece importantísima y no se debería desvalorar, porque es el gancho, es la oportunidad de convertir a una persona que desconocía tu producto en un potencial consumidor, quizás por eso mismo tiren del “todo vale” y te desvelen todo por tal de que compres la entrada. Yo dejé de leer sinopsis y de mirar trailers cuando en muchas, muchísimas ocasiones, la película llevaba mas de una hora y media, o tres cuartas partes del metraje y aun no habían pasado cosas decisivas que ya sabía y suponía que serían introductorias, no reveladoras.

Todo esto viene a que sé que pulula por los cines un trailer que prácticamente te destripa esta película hasta las entrañas y probablemente si la ves con tanto conocimiento pierda su mayor baza a favor. Get out empieza llevándote a un estado de desorientación, después de ver tanto cine se agradece no saber que es lo que va a pasar, que rompa un poco con los esquemas de siempre. No diré mucho más pero me parece que dentro del género de thriller psicológico es realmente buena y dentro del terror pues no es que de mucho miedo pero si perturba con una trama tan retorcida.Film Title: Get Out

Destacar que me ha alegrado mucho ver a mi segunda actriz favorita de la vida, Catherine Keener, haciendo un papel que nada tiene que ver con su perfil de dramas independientes como todas las películas de Nicole Holofcener y Tom DiCillo, algunas rarezas con Spike Jonze (tres enormes directores), o ese perfil hippie que tanto le pega como en Hacia rutas salvajes (Into the wild) o Paz, amor y malentendidos, en fin, que es una diosa de la actuación y tiene un gusto exquisito escogiendo papeles, no he visto una película suya que sea mala.

También Allison Williams demostrando que le queda mucha carrera después de Girls y yo que me alegro.

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Lo he pasado peor pensando en como se estropeaba la película en ciertos momentos que metiéndome en la piel de los personajes.

El ambiente estaba muy conseguido, una muy buena fotografía, cámara muy bien usada, unas interpretaciones bastante notables, una banda sonora bonita bonita, un slasher de los que a mí me gusta... y un guión estúpido. Seguro que cualquier niño de diez años lo hubiese hecho mejor, por macabro que suene. En ocasiones las reacciones de los personajes son impropias de la situación, totalmente ilógicas y eso echa mucho para atrás a la hora de involucrarte en la película y tomártela en serio y "en serio" eran dos palabras que yo decía entre interrogantes cuando en vez de preocuparse por sobrevivir decían de llevar a una desconocida al hospital cuando tenía un agujero en el estómago por el que le cabía la cabeza y en muchas otras ocasiones de un guión totalmente inverosímil. Y no os desvelo gran cosa, eso pasa en los primeros diez minutos.

Es una pena porque en el resto de aspectos la cinta es buena, y yo, que soy muy benevolente con mis notas, se lo voy a perdonar, pero objetivamente se merece el suspenso.

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Aunque existan muchos grados podría clasificar todas las películas en tres clases: Las buenas, las malas y las que no merecen llamarse películas.

Y es obvio en cual grupo meto a "esto".

Me pregunto si conoceis "Empire" de Andy Warhol. Pues este artista grabó durante 485 minutos al Empire State Building y lo llamó película. Yo acepto hasta que se pueda llamar arte, pero no película.

Este caso es parecido y el ejemplo me viene que ni al pelo porque "Empire" tiene un argumento más sólido que esta mediocridad... ¿exagero? si, pero lo realmente penoso es que no exagero demasiado. La calidad de imagen no dista mucho una de lo otra teniendo en cuenta que se llevan cuarenta años de diferencia. Otra cosa que comparar... el presupuesto usado, ahí si que no exagero en que se gastaron más en cintas grabando las 8 horas del bonito edificio que en producir "esto".

Simplemente no es ni infracine, es un vídeo casero de mala calidad en cuanto a imagen, guión, interpretación, dirección, sonido...

¿Como se puede hacer larga durando poco más de una hora?

Mi nota es muy injusta, no se merece un uno, en esta ocasión echo de menos que no se pueda votar con un cero patatero.