Haz click aquí para copiar la URL
España España · MADRID
Críticas de Spark
<< 1 3 4 5 10 370 >>
Críticas 1.846
Críticas ordenadas por utilidad
3
21 de julio de 2009
67 de 111 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una mujer "liberal y atea" llega con su hija "bastarda" a un pueblo francés de cerrados de miras "ultrarreligiosos y ultraconservadores". La protagonista abrirá una tienda de chocolates y afrodisiacos e intentará que todos los pueblerinos abran un poquito su mente, intenten tener un poquito de más alegría y libertad y, si es posible, que tengan una vida sexual más saludable (cosa que me parece estupendo).

"Chocolat" es una cinta con una buena fotografía, entretenida solo a ratos, pero muy decepcionante para mí. Y es que no me gustó en absoluto ese tratamiento tan estereotipado y superficial de sus personajes. Los estereotipos pueden tratarse de forma paródica para denunciar ciertas actitudes, o bien pueden tratarse con cariño y profundidad con el fin de humanizar esas actitudes. Parece que la intención de "Chocolat" era tratar esos aspectos de esas dos maneras, pero no lo logra transmitir en ningún momento. El guión falla y su puesta en escena por medio de las actuaciones falla más. Todos los personajes, sus reacciones, sus acciones y emociones no pueden ser más previsibles y llenas de clichés (a veces rozando la caricatura absurda pero sin gracia alguna). Y de las actuaciones tampoco puedo decir nada positivo, Johnny Depp realiza aquí una de las peores interpretaciones de su carrera y ni siquiera la atrayente Juliette Binoche loga que su personaje me interese lo más mínimo.

Tal vez sea nadar contracorriente, pero la verdad es que no entiendo por qué es tan aclamada (¡incluso la nominaron al Oscar a la mejor película!). Yo solo veo una cinta que no puede ser más tópica, aburrida, lenta, con escenas altamente previsibles y sosas, cargada de clichés trasnochados y que no llega a ser nunca ni comedia ni drama. Lo único que me gustó fue su ambientación.

Lo mejor: La fotografía.
Lo peor: Los tópicos.
Spark
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
5
27 de enero de 2010
53 de 83 usuarios han encontrado esta crítica útil
Continuación de la magnífica cinta de horror espacial e intriga de Ridley Scott. Aquel director combinó a la perfección en "Alien" tenebrismo con suspense en una clásica película de terror para el recuerdo.

Sin embargo aquí Cameron opta por eliminar el suspense a largo plazo en el argumento. No ofrece ningun tipo de misterio aparente en la trama que repite exactamente la misma fórmula de su predecesora haciendolo todo altamente previsible y mucho menos interesante, ya que además elimina la atmósfera intrigante sustituyendola por acción y acción (pues sí, la historia se repite básicamente a pesar de unos pequeños matices que son meras excusas para explotar lo mismo una y otra vez. Y perdonen que no me crea a quien dice que la trama de Cameron resulta más original que la de Scott).

Aunque... si algo hay que agradecer a "Aliens" es que al menos haya dotado al personaje principal de Ellen Ripley de un trasfondo personal y de un pasado interesante que no nos fue ofrecido en la primera entrega (aunque, a mi parecer, es explotado de manera desaprovechada). Aquí el menos se da a su personaje el protagonismo natural que merece como heroína principal... un protagonismo que en "Alien" tuvo que esconderse hasta el final por razones obvias que tan bien funcionaron (de desapercibido personaje secundario a heroína por sorpesa).

Pero eso no quita para que "Aliens" resulte muy poco intrigante respecto a la anterior. Si bien logra una atmósfera tenebrosa gracias a una buena escenografía, sin incertidumbre en su argumento ya no transmite esa sensación de angustia, claustrofobia y desasosiego tan bien. Reconozco que el regreso de Ellen Ripley al planeta del Alien para buscar más muerte y terror se me hizo excesivamente lento (casi tres horas para lo poco que cuenta y lo poco interesante que es, con secuencias previsibles y sin sorpresa demasiado alargadas).

Aquí ya no hay nada por descubrir, ya sabemos como es el Alien, cual es su modus operandi, como se reproduce... y que matará a todo ser humano viviente. Sabemos que solo Ripley mantendrá la cabeza fría y su capacidad de liderazgo intacto. Ya sabemos desde el minuto uno que morirá hasta el apuntador, la única intriga será adivinar quien morirá primero (aunque todos los secundarios son olvidables y nulamente carismáticos. Ni siquiera la cría me despertó interés).

Para satisfacción de los fans, decir que los montruos siguen siendo igual de terroríficos, espectaculares y repulsivos que en la anterior entrega, y que se mantienen las escenas de casquería desagradables. Y además esta entrega es la que nos ofrece más acción de metralletas, disparos y persecuciones.

A riesgo de ser baneada, reconozco que "Aliens" no me dió lo que esperaba y me ofreció poco. Esta vez no hizo clic conmigo y casi me duermo al verla. El carisma de Weaver es, a partir de aquí, el único atractivo de la saga y lo que la hace llevadera y pasable para mí.

Lo mejor: Sigourney Weaver.
Lo peor: ...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Spark
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
6
2 de marzo de 2009
28 de 34 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sí, me gustan las pelis de coches tuneados.

Mantiene la misma fórmula que la anterior. ¿Qué es lo mejora respecto a la anterior? pues que las carreras son más entretenidas y esteticamente más lucidas. Los coches han mejorado, y el tunning está más impresionante que en la anterior.

Me hace gracia los que critican esta secuela diciendo que la anterior tenía una trama mucho mejor. Como si la anterior película tuviera una profundidad del copón o un argumento alucinante y enrevesado, cuando solo gastaba minutos en enseñar los coches con música de fondo. En A Todo Gas 2, la trama es igual de poco original y tonta que la anterior (hay un poli y un criminal) incluso es algo menos original si cabe, pero no aburre. Respecto a las actuaciones: el tal Tyresse tiene carisma y aporta algo de frescura ya que Paul Walker es soso como él solo.

Es una buena película de carreras de coches tuneados. Entretenida y lucida. No se la puede pedir más.

Lo mejor: Los coches: más modernos y mejor tuneados. Las carreras.
Lo peor: La trama, las actuaciones
Spark
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
8 de enero de 2014
23 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esto es lo que tiene el cine estadounidense: entre tantas y tantas cintas comerciales e independientes siempre hay alguna al año que resulta ser una "gran pequeña joya" llena de enjundia, talento e intelecto. No falla.

No esperaba que "Dallas Buyers Club" fuera a ser una de esas joyitas, pero el caso es que es una película que me ha sorprendido y personalmente me ha enamorado.

Basada en un hecho real, la cinta se nos presenta como un biopic muy poco convencional, que nos narra la vida de Ron Woodroof: el estandarte de lo que llamamos un "viva la virgen". Este amante de los rodeos, promiscuo, drogadicto, alcohólico, homófobo y machista ve su irresponsable vida trastocada cuando los doctores le diagnostican el SIDA, una enfermedad que en los 80 (época en la que se sitúa la cinta) era tan desconocida como mítica (un virus lleno de mitos infundados que mataba en cuestión de semanas a cientos de personas).

La verdad es que me dispuse a verla sin saber de su argumento y, tras visionar los primeros minutos del largo pensé que me encontraba ante otra cinta de "rollo indie" que no contaba nada, con una interpretación protagonista asombrosa eso sí, pero con acontecimientos rutinarios sobre un hombre reprobable. Pero nada más lejos de la realidad. Es cierto que su comienzo puede resultar un tanto plano, pero en menos de 10 minutos la cinta nos invade con unos hechos tan sustanciosos y variados que empieza a elevarse hasta cotas espléndidas.

La trama se torna totalmente profusa y diversa, con múltiples y perfectos desarrollos de importantes temas. Y con personajes llenos de aristas y desarrollados con inteligencia. Tenemos al enérgico Woodroof, obligado a cambiar a la fuerza y experimentando una transformación vital con mayúsculas (que no tópicamente redentora) purgándose por fuera y por dentro, y al que su adoración por vivir el presente le hace más luchador y astuto. Tenemos las nuevas pruebas de medicamentos de las industrias farmacéuticas, y sus luchas cainitas por hacerse con el "nuevo mercado". Tenemos a los enfermos desinformados que no encuentran la solución en la medicación "oficial" buscando alternativas... todo este coctel de recientes situaciones que impactan en los personajes conforman una historia de averiguaciones y supervivencia excelente.

La cinta toca todos los poros de su temática... y todos los toca con sensibilidad (que no sensiblería), humanidad, viveza, tensión y madurez. Desde la feroz lucha contra la enfermedad, hasta la infinita avidez a la hora de encontrar una cura, pasando por la experimentación de la marginación y la incomprensión por primera vez, o por el entendimiento común y la amistad con un círculo que nunca se pensó el protagonista que llegaría ni a rozar.

Y es que Ron Woodroof tiene el SIDA en los 80, pero no se va a quedar de brazos cruzados sabiendo que hay una salida contra la muerte prematura (tanto para él como para los que comparten su situación) y, siempre con ánimo de lucro (el personaje jamás deja de ser lo que es), Woodroof dará esperanza a los contagiados con el virus y pondrá de morros a la industria hospitalaria y todas las normas sanitarias.

El guión se desarrolla siempre con un enorme acierto en todos sus momentos y ensamblaje, y deja con energía o delicadeza mucha intriga, drama y hasta humor. Y el abanico de personajes resulta ser el modelo de como deben construirse éstos en un libreto.

Y sus interpretaciones no hacen sino engrandecer el conjunto. Matthey McConaughey jamás había estado mejor, esta es la interpretación de su vida (al menos hasta el momento) y por primera vez demuestra que es mucho más que un "tío bueno" que luce palmito en banales cintas de aventuras y comedias románticas. Su interpretación es de Oscar, dejando de lado su impresionante transformación física (que es superlativa y recuerda a John Hawkes el año pasado en "Las sesiones), el actor aporta una perfecta naturalidad, unos manerismos maravillosos y consigue un carisma que jamás se le había visto. Y desde Jennifer Garner como agradable y perspicaz doctora hasta Steve Zahn como ese compañero "australopitecus" están de 10. Pero quien más destaca y sobresale en "Dallas Buyers Club" es Jared Leto (al que ya le deben de estar grabando el nombre en el Oscar a mejor actor secundario del año) como el adorable, tierno, carismático y dulce Rayon (un personaje que tampoco es ningún ángel y que también está roto por su enfermedad y sus conflictos internos, pero con el que siempre se querría estar acompañado). Leto jamás se sale del personaje, y aporta una sensibilidad y complicidad arrolladoras, resulta memorable.

La dirección por su parte es muy grande, con un acierto en todos los ángulos de los planos (la mayoría de ellos cerrados o subjetivos) hiperrealistas, un despliegue de medios maravilloso, una fotografía deliciosamente desvencijada y un buen sonido.

En definitiva, "Dallas Buyers Club" es un largo dramático de libro en su conjunto (pero no de estilo academicista para ganar Oscars). Totalmente disfrutable una y otra vez, siendo suspicaz y emocionante, y no intentando sacarnos la lágrima de modo facilón pero sí invitándonos a muchas reflexiones.

Lo peor: Sus primeros 7 minutos.
Lo mejor: Jared Leto y Matthew McConaughey.
Spark
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
6
13 de diciembre de 2013
22 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
No es la primera vez que el cine se acerca al proceso que una familia aparentemente "convencional" debe pasar durante en un divorcio, en cuanto a la custodia de los niños se refiere. Con esta temática se nos han entregado dramas donde los críos son tratados como un producto de mercancía al mejor postor.

El mejor ejemplo de este tipo de dramas sigue siendo "Kramer Vs. Kramer", pero "¿Qué hacemos con Maisie?" nos acerca al asunto desde una perspectiva inusual pero necesaria: la perspectiva de la chiquilla.

En el largo nos ponemos en la piel de Maisie (una cría achuchable, bondadosa y encantadora interpretada con naturalidad, calado y hechizo por Onata Aprile), y experimentamos con ella como parte de la rutina la dejadez y negligencia con la que "regalan" a Maise sus enfrentados padres. Vemos el efecto que tiene el divorcio de unos padres despreocupados en la niña y vemos como Maise en cuestión observa en silencio, analiza y sabe quien se preocupa por ella y la ama de verdad.

A "¿Qué hacemos con Maisie?" se le puede reprochar con no ponga más esfuerzo, firmeza y complejidad a la hora de construir a sus personajes adultos. El film deja su punto de vista claro y nos retrata a los padres como unos egoístas incapaces de sacrificar sus vidas para adaptarlas a la crianza de su vástaga. Pero ese punto de vista no resulta demasiado convincente, ya que al final sabemos poco de las motivaciones y tribulaciones de estos personajes adultos. Todo lo vemos desde una perspectiva infantil y esos padres acaban siendo un tanto caricaturescos (aunque las siempre impecables interpretaciones de Julianne Moore y Steve Coogan acaban aportando el toque de dignidad que sus personajes piden a gritos).

Lo mismo sucede con la pareja que ejerce de cuidadores con mucha más honorabilidad y amor que los propios padres. También resultan personajes simples y trabajados en la superficie (aunque de nuevo las interpretaciones de Skarsgard y Vanderham hacen que nos resulten de lo más amables).

Otro punto flaco del guión es que acaba desembocando en una historia un tanto irreal en cuanto al cuidado de Maisie (el final más parece una fábula que una realidad).

Pero, aunque el libreto no sea lo completo, profundo y lo maduro que una historia de estas características necesita, "¿Qué hacemos con Maisie?" se puede disfrutar de manera deliciosa y con cierto deleite al contar con una puesta en escena estilosa y luciente, con una fotografía encantadora, una dirección avezada, una bella banda sonora y unas interpretaciones realmente buenas (en especial las de Onata Apriles y Julianne Moore).

Al final la enseñanza y el drama se nos queda a medias. Pero al menos hay el suficiente talento artístico como para que el espectador se pueda entretener y recrear durante la cinta sin apartar los ojos de ella.

Lo mejor: Onata Aprile y Julianne Moore. La dirección. La fotografía.
Lo peor: Su guión a medio construir.
Spark
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 3 4 5 10 370 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow