Realmente es complicado ver secuelas dignas de mención, pero en este caso concreto sólo podemos quitarnos el sombrero ante la increíble película con la que James Cameron nos deleita. la línea argumentativa es realmente sensacional y enlaza a la perfección con la brillante "Alien, el octavo pasajero", pero donde marca sobre todo las diferencias es en los espectaculares efectos especiales que fueron merecedores del Oscar. Con todos estos ingredientes llega incluso a superar a su predecesora por la maestría con la que Cameron combina la acción más trepidante con el terror que caracteriza a la propia saga. En definitiva una genial manera de continuar una de las obras más emblemáticas del cine de ciencia-ficción.

Una película asombrosamente inteligente y descarada, con una profunda carga social que saca a relucir las miserias humanas con un brillante toque de humor. Es sin duda la comedia de este año 2006. ¡Imprescindible verla!

El guión de Tom Schulman es soberbio, no es de extrañar que se llevara el Oscar en esta categoría. A partir de ahí la cosa arranca con mucha más facilidad, y se podía haber quedado en eso, en sólo un gran guión. Pero nada más lejos de realidad, puesto que Weir sorprende con una fantástica película que saca lo mejor que llevamos dentro, a esto tenemos que unir la fabulosa actuación de Robin Williams y las no menos impactantes de Sean Leonard y demás compañeros del club de los poetas muertos. Una película que no debería faltar en las videotecas de todo cinéfilo que se precie.

¿Pero esto qué es? ¿Si el trailer parecía tremendo? Pues eso, una muestra perfecta de cómo un trailer en condiciones puede engañar al espectador y hacerle perder su tiempo y su dinero. Otro bodrio más destinado a hacer caja entre incautos y nostálgicos de filmes como Independence Day.
Después de verla de lo único que te acordarás es de los labios de la protagonista.

No me andaré con rodeos, esta cinta no puede ser fruto de la mente de Ridley, no me lo creo. O le ha han obligado a hacerlo algunos desaprensivos, o simplemente han usado su nombre sin su permiso.

Y es que aún no doy crédito a semejante despropósito. No concibo cómo una idea a priori buena, se puede mandar al garete con tanta facilidad, cómo pueden desaprovecharse así semejantes actores.

La cinta se queda en un cúmulo de diálogos ridículos, de pedantería burda y barata, de conversaciones propias de una pasada de ácido de algún pobre desgraciado, para al final, soltar la clásica lección de la vida harto repetida en tantas y tantas películas. Si juegas con fuego te acabas quemando.

En fin, otros 9 eurazos tirados a la basura, porque no se salva ni el haberla viso en versión original.