El ejemplo perfecto de que no se necesita mucho para hacer una buena película. Todo aquí está en su justa medida, una localización principal, tres protagonistas y una situación, viajes en el tiempo. Un buen descubrimiento, que me hizo plantearme algo en lo que hasta ahora no había caído. ¿qué pasaría si viajas en el tiempo y no te ocurre nada emocionante? Claro que aquí eso no pasa.

Siendo un profano del género bélico, es cierto que los primeros veinte primeros minutos te absorben, dejándote expuesto en la playa de Omaha en la que tus fuerzas serán acribilladas como uno más.

La película podría haber empezado con la escena de las cartas, pero esa introducción nos presenta el conflicto real, con esa componente aleatoria en la que nadie sabe a ciencia cierta si está a salvo.

Una película que queda a caballo en multitud de géneros, tiene una fuerte carga de cine bélico, bastante de drama y algo de ciencia-ficción y comedia. Todo este barullo de ideas para componer la vida del protagonista hace que todo quede como deslucido y la partes más serias parezcan comedia y las partes de humor te dejen frío.

Quizás lo mejor es la narración de los bombardeos de la ciudad de Dresden, dejando un mensaje antibelicista; pero el hecho de que las escenas previas o posteriores sean viajes a un planeta imaginario llamado Tramalmadore, no termina de ser efectista o todo lo contundente que se podría esperar.

Cuando hablamos de películas de viajes en el tiempo y que no sean duras de mollera, tenemos que hablar de "Jacuzzi al pasado" sin duda. La película más gamberra del género, donde las tramas se van desarrollando de una forma orquestal, dando a cada personaje su momento de lucimiento, para terminarla en la explosión de la coda final.

A mi sinceramente, me divierte mucho esta película.

Con la premisa de que la evolución podría asemejarse a una campana de Gauss, el ser humano ya ha tocado su plenitud y comienza el descenso hacia la estupidez. Los primeros minutos, además de ser lo mejor de la película, sirven muy bien para dar una explicación plausible al futuro que nos presentan.

A partir de ahí, una película de idiotas. Confirmando que en el país de los ciegos, el tuerto es el Rey. Se pueden desprender muchas reflexiones sobre el camino que esta tomando la civilización y sobre el beneficio de los electrolitos.