Magna obra que satisfará los más altos paladares
El cine ya tiene un espejo donde mirarse toda película que desee destacar.
La síntesis de la que hace gala nos permite recibir toda la información en un escaso pero valioso espacio temporal, 86 minutos de la esencia cinematográfica.
La recomiendo a todo aquel que desee gozar de no una buena película sino de una obra maestra, de la cual debieren aprender todo el que pretenda llamarse director.
A la altura de los mejores capítulos de la serie. Para ser sincero deja a la serie a la altura de la suela del zapato.
Reúne todo lo exigible a una obra que pretende y conseguirá revalorizarse en el tiempo como los buenos vinos.

Hay una quinta de actores que con mejor o peor suerte tratan de mantenerse en candelero. Gente como Stallone, Willis, Ford… que ha fuerza de repetir personajes o esquemas pueden y saben alargar su charrera de una maneras más que honrosa.
Los Indy, McClane, Rambos y Rockys aun siguen dando guerra pese a que sus intérpretes les quedan muy lejos aquellos años de esplendor, sobretodo en lo referente a lo físico.
El caso que aquí tratamos no difiere demasiado. Nicolas Cage ha sido sin lugar a dudas uno de las grandes estrellas del cine de las ultimas dos décadas, .Ha sabido conjugar por un lado excelentes películas dramáticas, Leaving las Vegas, con espectaculares cintas tipo La Roca. Películas de acción de inmenso presupuesto con pequeñas obras de arte de cine independientes.
Pues aquí este buen hombre ha conseguido arrejuntar sus dos vertientes pero por el lado oscuro del asunto. Ha hecho una pequeña e independiente película de acción con aires metafísicos de escaso presupuesto y mínimas ideas.
Esta película tiene dos grandes lastres, Uno son las pésimas escenas de supuesto drama, rodadas sin ningún sentido del ridículo, recién sacadas de un culebron de las tres, sin ningún tipo de nexo con el resto de escenas, Vamos en resumen un montaje de pena.
Y por ultimo el gran handicap es su increíble protagonista. Me había prometido no referirme a su apabullante alopecia pero es que el gato disecado que lleva en la cabeza no puede ser omitido. Es imposible tomar en serio a este buen hombre con esas melenitas recién sacadas del matadero gatuno. Me pregunto yo si no tendrá algún amigo, familiar, conocido…. que le advierta del resultado desastroso de tan aventurado apéndice capilar.
Pese a ello no creo que esto sea la causa de su desaguisada interpretación. Esta es sin lugar a dudas la creencia que para interpretar a un hombre impasible no hay mejor solución que una ritidoplastia o lifting facial que no permita gesticular emoción alguna.
Esperemos que el señor Cage aun nos de alguna alegría pero con esta película, imitación mala de León el profesional, claramente equivoca el camino.

Película que equivoca claramente el enfoque. Se decanta por un camino ligero y tibio que nada favorece a la película.
Con el nivel de actores que tiene, el trasfondo histórico, caída del muro de Berlín, fin del comunismo…. en que se mueven los personajes, espías de mucho pasado y poco futuro, daba para una historia mucho más elaborada y profunda.
Con todo no deja de ser una peli de espías amena, solamente eso “amena”.

Creo poder decir, en voz alta y clara, que esta es la mejor comedia que se ha hecho con estos intérpretes en la historia del cine.
Todo en ella logra crear un ambiente de unanimidad, desde sus inequívocas elecciones en la casting, no puedo más que aplaudir ese cúmulo de acierto a la hora de juntar tamaño nivel actoral.
Pasando por un guión de elevadas perspectivas. Este versa sobre ese difícil proceso de la aceptación materno filial. Los personajes muestran una serie de actitudes que dejan muy claro la aptitud del guionista para con su profesión.
El director aparta de el todo instinto de realizar una obra que cambie el concepto de cine elaborado hasta ese momento optando por realizar una obra de magnitudes más bien limitadas.
En la carrera del protagonista marco un antes y un después, ya nada fue igual en sus siguientes obras. Siempre hubo un tenue recuerdo de su participación en esta interesante muestra de sonidos e imágenes que concurren armoniosamente en la pantalla de cualquier televisor de nuestros hogares.
Espero que estas palabras puedan ilustrarte sobre la decisión más sabia a la hora de elegir entre el visionado de esto y las múltiples posibilidades que te da la vida.
Solo puedo citar esas hermosas palabras que un compañero mio llamado Paco Mason que citó en algún momento de profunda inspiración: El cine sin esta película y el caballero negro seria otra cosa.

Creo que es el mayor, cutre, alegato a la derecha cafre más reaccionaria que he visto en mi vida. Son capaces de cargarse a un negrito con un trabuco para elefantes y mostrarnos la felicidad inmensa de todo un barrio casas por casa, demostrando que la solución para todo problema es la mano dura de un buen señor, pálido de piel a poder ser.

Aquí todo el mundo esta acongojado, incluido la poli, por unos paletos con la cara pintada y con un muy mal consejero en el tema de peluquería, el jefe lo es por que le pone más coraje en este tema con una raya en el medio que ni el canal de Panamá.
Entre ellos casualmente hay una gran variedad de razas predominando la negra y los latinos, ni que decir que el llongueras jefe es blanquito.
Tampoco quiero olvidar el gran acierto que supone el vestuario pues se puede diferenciar con facilidad a los malos gracias a unos ridículos disfraces de payaso heviatta desfasado. Remarcar los tops a que me lleva un negrito acelerado que le permiten mostrarnos sus abdominales y su poco sentido del ridículo.
Pues con estas pintas estos buenos personajes se dedican a atemorizar a una población variopinta en la que caben parejas de latinos, judíos, negros y algún blanco con pasado militar. Cierto es que la lían de todas las maneras posibles con robos, violaciones y asesinatos. Lo único que quizás sorprenda es la actitud de mico mareado en dia festivo cada vez que realizan alguna fechoría.

Todo esto tiene una solución y esta no es otra que un vejestorio Charles Bronson de capa caída. A estas alturas de su carrera el tío mas que recordar a un action hero ochentero parece mas una versión en yanqui de Arturo Fernández. A duras penas aguanta el pistolon como para pedirle que se luzca con algún movimiento tímidamente espectacular.
Su actuación quizás carezca de algún matiz, tanto da que este ligando con una muchacha que podría ser su hija como que le estén matando a un viejo amigo, el tío ni siente ni padece. El hombre pone todo su empeño en el noble arte de lograr una interpretación que muestre todos los estados de un proceso comatoso. En esto tampoco se salvan el resto de ¿interpretes? pues ellos si que logran avergonzar al espectador más despistado cuando asienten los métodos y muestran su euforia tras la muerte de cualquier malo malote a manos del pasado de rosca de turno.

Otro punto a destacar es la coreografía en los tiroteos, parecen sacados de un capitulo del equipo A,
Charles dispara el malo se lo piensa un ratito y alegremente decide morir, no siempre es necesario que nuestro héroe dispare, hay alguna muerte por imposición divina.
Con toda esta reflexión solo quiero invitarte a ver cualquier carta de ajuste antes que intentar distraer tus sentidos con esta magnánima obra.