Es increíble comprobar como en el cine mudo se alcanzo tal maestría a la hora de contar historias sin palabras.
Tenemos de todo, desde todo tipo de travellings (hay uno especialmente impresionante en el Folies Berger que bien lo podría haber firmado Scorsese), planos aéreos,... hasta hay un plano con la cámara en un columpio.
Es curioso comprobar como había una inquietud, un interés, una curiosidad por mostrar las cosas de manera diferente pero siempre adaptadas al relato de forma diegética, ahora muchos reputados directores se conforman con contar la historia, así nos va.
Todo ello lo llevaban a cabo sin perder de vista la historia ni el ritmo e incluso a veces nos regalaban secuencias para el recuerdo: las batallas aéreas con aviones incendiados volando no tienen precio y otra escena de un bombardeo a un pueblo (aunque es modesta y cortita) haría enrojecer de vergüenza a Michael Bay y su Pearl Harbor porque amigos, aquí vemos la bomba caer del bombardero y explotar encima del edificio y SIN EFECTOS ESPECIALES.
Las interpretaciones son bastantes correctas teniendo en cuenta el estilo exacerbado que se llevaba por aquél entonces en el cine mudo.
En resumidas cuentas una película que demuestra el buen hacer hollywoodiense de la primera época.

P.D.: Atención a la aparición de un jovencito Gary Cooper o la secuencia que nos demuestra que el tunning empezó hace muchos, muchos años lo cual hace plantearme si el ser humano está evolucionando o retrocediendo...

Todo es narrativo, todo es ameno, no hay didactismo molesto que entorpezca la narración... una obra maestra que dura y perdura en el recuerdo, todo ello acompañado de una banda sonora increíble.
Imprescindible.

Es curioso como un director que debuta con una película tan interesante, como la que nos ocupa, puede acabar dirigiendo bodrios dos décadas después como "Snuff Movie"...
No nos vamos a engañar, tampoco es que Bernard Rose sea un director genial pero en "La Casa de Papel" cuenta una historia de evasión de la realidad con toques de terror de una manera amena y con algún momento verdaderamente interesante sin perder el pulso narrativo en ningún momento, otros con más nombre lo han intentado (me viene a la mente Gilliam con su Tideland y no sé por qué) y el pastiche resultante era de vergüenza ajena.
En resumidas cuentas, una película estimable que sin ser la octava maravilla dejará un buen sabor de boca para los amantes del terror clásico que detestan, como yo, la casquería imperante en los últimos años en el género (se creerán que metiendo más vísceras y sangres se hace un buen guión, en fin....).
Pegas, un evidente ochenterismo que a estás alturas canta la traviata, pero me temo que es algo inherente a esa década.

...y no por la violencia, todos seguro que las hemos visto más violentas (incluso a veces un noticiario puede ser más desagradable) sino porque el guión parece escrito por un adolescente estúpido, teoría que no descarto, con una primera media hora sonrojante propia del peor cine "s" de Esteso y Pajares y la hora siguiente no sube el nivel sino que lo hunde más.
No se dan cuenta que para meter miedo lo primero que hay que crear es una historia minimamente verosímil (aún dentro de la fantasía cinematográfica)... pues va a ser que no, no me hubiera extrañado encontrarme con un platillo volante en mitad de la película... no malgasteis vuestro dinero ni vuestro tiempo, ni siquiera es recomendable para fans acérrimos del género...

Siempre le pasa lo mismo a Johnie To, pone toda su maestría a la hora de elaborar secuencias de acción con una planificación milimetrada (aunque eso no evite que no sepamos en muchos momentos quién dispara a quién, fallo que considero punible en éstos casos y que en obras maestras como, por ejemplo Heat no pasa) con una tensión asfixiante y agobiante pero se olvida por completo de trenzar un guión medianamente inteligente.
Será capaz alguien de decirme cómo demonios se puede crear una secuencia introductoria de 17 minutos donde tres personajes se lían a tiros y no pasa absolutamente nada porque a continuación se ponen a cenar amigablemente...
Siempre estoy con lo mismo pero juro por dios que eso lo hace un director español (en el caso hipotético que el cine español hiciera películas de acción) y los mismos que ensalzan a To le darían capones hasta en el carné de identidad.
Si Leone levantara la cabeza...