Me he metido en un cineclub de caspa y esta ha sido la primera recomendación. Presentada como la película de venganzas favorita de Tarantino la verdad es que prometía. De director desconocido, de protagonista más especialista en cine erótico que películas al uso, nos llega la historia de una niña traumatizada desde pequeña por una ¿violación? (la escena es rarísima), lo cual la dejaría muda. Ya de adolescente, ayuda a sus padres en la granja ante las miradas de sus vecinos que recuerdan día a día su tragedia. Tras montarse en un coche con un desconocido (no nos pone muy bien al género masculino la película, el más honorable de todos trapichea con armas, coches y drogas) es arrastrada a la prostitución haciéndola adicta a la heroína, escribiendo a sus padres una carta falsa y quitándole un ojo cuando se rebela con un cliente.

La película es una mezcla extraña entre serie B y gafapastismo. Esperaba muchos más excesos que no van más allá de lo sexual con escenas explícitas que incluyen repetitivos e innecesarios planos de miembros viriles peludos. Tras la fase de prostitución y la posterior preparación para la venganza y cursos intensivos en diferentes disciplinas, me estaba frotando las manos con el festival de sangre y desmembramientos al que iba a asistir, pero en vez de eso, asistimos a muertes exactamente iguales y a cámara lenta, siendo menos disimulado que nunca su aspecto cutre y lo pésimo que es el reparto. Para rematar la faena nos obsequia con una persecución demencial donde los coches explotan con rozarse.

De esas películas que de mala que es tiene su encanto en algunos aspectos pero me deja decepcionado porque no solo no explota sus posibilidades sino que parece que lo haga mal aposta, disfrutando en que el visionado se te atragante. Suscribo lo dicho por algunos de que lo mejor son las tetas de la protagonista.

Nota: 3

Hace unos días “vacilaba” en la crítica de Amen, que pese al palo que le soltaba, no era algo habitual en mi, que siempre intento sacarle cosas positivas a las películas y que no soy muy radical ni en valoraciones ni en dar notas bajas, costándome mucho bajar del 4. Tras ver valorar ayer “Au Revoir Taipei” y venir ahora a comentar esta, eso va a sonar a farol y voy camino de convertirme en el talibán del cineonfest que es el festival de cine online donde he visionado las mencionadas.

Primera película que veo de Todd Solondz e igual la última, aunque veo que la mayoría habla maravillas de Happiness. Sigo queriendo saber que nos quiere trasladar con esta cinta que pese a su corta duración se me ha hecho eterna y muy tediosa. Mucho charloteo pero sus diálogos realmente no dicen nada y había momentos en los que era difícil desconectar y no oír simples “bla bla bla” de fondo. Un personaje principal irritante por su falta de carisma y una personalidad sin definir, una “novia” idem por su carácter y además por en general su más que extraña relación y el surrealismo presente ya no en esto sino en todo el film. Los secundarios no son menos anodinos con idas y venidas sin sentido y aunque el director intente darle explicación o sentido con una epifanía final, ofrece un giro que no arregla nada y quizá lo empeora. Muy pretenciosa, pero sobretodo vacía.

Una de mis grandes cuentas pendientes con el cine y con un género que me gusta mucho aunque cueste encontrar películas que realmente te hagan sentir miedo. Y vuelvo a ser seguramente el que va contracorriente con una película situada en los altares del género pero que vista hoy en día me parece correcta sin más. Valoro su época y lo que seguramente haya supuesto para obras posteriores (aunque hablemos de una película de los 70 y no de 1920, donde ya se hacían de terror). Soy poco impresionable y me cuesta que me perturben y aún así ha habido alguna más reciente que lo ha hecho aunque sea puntualmente y por desgracia esta que nos ocupa no lo ha conseguido.

Una película interesante, con momentos destacables, pero no va a dejar huella en mi memoria. Todo lo que precede a un exorcismo más corto de lo que esperaba, no se hace tedioso, está bien llevado, pero tampoco aporta nada realmente especial al climax. Nos cuenta un poco de cada personaje, pero tampoco nada realmente indispensable. De pequeño me daba miedo verla y me lo tenían prohibido de hecho y lo que más ganas y expectación le tenía era a la famosa posesión, que sin bien es cierto está muy lograda, más que miedo me ha dado risa, no significando por ella que sea ridículo (tiene grandes momentos y grandes frases) pero queda lejos de causar el terror que supongo pretende.

Lo dicho: correcta, bien hecha, pero poco más. Asignatura pendiente tachada de la lista y un 6 de nota para ella.

La madre de Alek se casa y él se va con su pequeña hermanastra a visitar a su tío pese a la insistencia de todos para que no vaya a la casa de una persona non grata en la familia, que no está invitado a la boda y que parece tener un oscuro pasado. Él cámara en mano y con la creencia de que su tío era un miembro peligroso de la mafia albanesa, quiere descubrir su pasado y rodar un documental de ello. Su tío por otra parte quiere enseñarla la tradición de ser “el maestro del brindis”en el próximo enlace.

Lo más interesante de la película es la sinopsis, con una historia que carece de todo interés y resulta insulsa. Hacia el final mejora algo e intenta evocar un mensaje general de nostalgia, la importancia de las tradiciones o de la familia, pero a esas alturas lo que a uno le lleva evocando hace rato son ganas de tomarse alguno de los copazos que van rodando ante tus ojos para hacerla más llevadera.

Nota: 3'5

Casi 48 horas después de haberla visto me es difícil aún calificarla y más aún cuantificarla en una nota. Lo que tengo claro es que es toda una experiencia audiovisual (y casi religiosa) que me alegra haber vivido además en pantalla grande.

Es un viaje "frankensteniano", dantesco y filosófico a los confines de la condición humana, con el personaje de Emma Stone que vive todo por primera vez y sin filtros en un entorno cuanto menos curioso. Visualmente es extremadamente llamativa, con contrastes de luz, color y fina belleza con otros grotescos, mugrientos. Algo así como si Van Gogh, Tim Burton y Cronenberg hubieran hecho un trío y tenido un hijo.

Su rareza es directamente proporcional a su originalidad, teniéndote enganchado durante todo su largo, denso (que no pesado) metraje, en un camino hacia no sabes bien donde, con la inquietud de qué te esperará a continuación, con muchas historias y personajes dentro de la principal, siendo todo altamente gratificante y poco habitual en el séptimo arte.

Sus diálogos son brillantes, en agilidad e ingenio, con un léxico que sonroja y unos puntos de comedia magníficos. Igualmente lo son sus actuaciones con unos espectaculares Ruffalo y Dafoe y con una Emma Stone que no sé ni lo que decir. Apoteósica.

Entiendo que sea una película a la que muchos les cueste entrar e incluso les cause rechazo pero ahora que remato estas líneas más claro tengo de que es de las que hay que ver si te gusta el cine, de esas obras especiales y diferentes, una maravillosa rara avis.

El único "pero" que le pongo es su final...(en spoiler)