Esta película dirigida por el irlandés John Crowley, deja el sabor de significar una exaltación patriótica (irlandesa) que por momentos se va de cauce. Tiene una aceptable reconstrucción de época y sin duda una muy buena actuación de Saoirse Ronan mostrando buenas dotes como actriz dramática. La historia en si misma parece por momentos una novelita rosa con pequeñas inflexiones sin mayor destaque. Si la intención del guionista fue tratar el tema sobre la emigración europea a los Estados Unidos en la década del 50 se queda corto en la profundización del mismo pues, en esta materia habría mucho más para presentar al público; si en cambio, la intención era mechar un romance algo conflictivo en ancas del tema anterior, no pasa de ser una novela más donde el amor de los jóvenes va y viene con fluctuaciónes que ya conocemos bastante.En el spoiler me explayo un poquito sobre otros aspectos que hacen bastante a lo dicho.

La realidad por lo general choca con la verosimilitud, y si a ello le sumamos un exceso de efectos especiales todo se termina transformando en una epopeya digna de otro mundo.
Reitero: por más real que Alejandro González Iñárritu haya pretendido hacer aparecer esta historia, la secuencia de sufrimientos y calamidades sufridas por el personaje que, más que renacido parece "renacido y recargado" (igual que Matrix por hacer una mala comparación), y hasta tiene algo de "Terminator", pues no hay enemigo, arma, clima, tormentas de nieve, indios extremadamente salvajes o precipicios y cascadas que puedan destruir ni amilanar a este personaje!. Hoy,15 de enero de 2016, ya conocidas todas las nominaciones de esta película y los premios del Globo de Oro otorgados al director González Iñárritu y a DiCaprio, deseo expresar que , como a tantas otras les ha ocurrido ( y por ello aun mantengo algo de credibilidad en esa premiación anual), esta película no merece llevarse premio mayor ni mediano en la próxima entrega de premios "Oscar" de la Academia el próximo mes de Febrero 2016.
Es un guión anunciado, previsible, sin suspenso, sin mayor drama y con un DiCaprio al que apenas se le ven los ojos (tiene pelo largo y barba tan crecida durante todo el desarrollo que solo se le notan algunos rasgos personales que recuerdan su carita angelical de otros films). El grupo humano que protagoniza la peripecia en este film, atravesando montañas, ríos, y montes en busca de pieles tiene en su conformación los clásicos personajes que siempre encontramos en una expedición como tal, esto es: el malo y perverso, el moralista y correcto, el joven crédulo, el joven lírico, el despistado y por supuesto nuestro héroe que siempre las sortea todas. Es una película que no logra sobrecoger al espectador, se trata de un film clasico de aventura como se han filamdo tantos con la diferencia actual de que hoy existen multiplicidad de efectos especiales para camuflar otras carencias!. Y finalmente me permito copiar textualmente el comentario de Chris Nashawaty: Entertainment Weekly, que grafica gran parte de lo que he pretendido expresar cuando escribe en esta misma página : ". . . Es una película tan centrada en deslumbrar a tus ojos que nunca encuentra el camino para llegar a tu corazón"

Lo del título: todo y todos los demás están de relleno en esta trama llevada a cabo de principio a fin por un magnífico Tracy que, actúa con tanta naturalidad y facilidad de gestos y tonos que captura la atención a extremos de rebobinar escenas para no perderse detalle de su histrionismo y frases. Interpreta un personaje que sale de abajo, bien de abajo de los estratos sociales, y debe luego "encontrarse" en la vida ocupando un imprtante cargo público de una ciudad, con los detractores que no le toleran tanta coherencia en sus errores o en sus aciertos, en su bondad ciudadana o en su autoridad ejercida con astucia, rigor y sin conceder nada a nadie. Ahi está casualmente el valor interpretativo de este personaje que no sería nada fácil para cualquier actor tratar de trasmitir tanta actitud. Notable film que cabalga a caballo de este extraordinario actor. John Ford una vez más ofrece una producción que muy bien vale el costo en boletería.-

Cuando me recomendaron que viera este western con Dustin Hoffman como protagonista, imaginé de inmediato que haría el papel de barman, de cochero de diligencia, de empleado de tienda o de bobo de la city. Nunca pensé que cumpliría muchos y tan heterogéneos papeles en el desarrollo de esta historia del viejo oeste. En efecto, el Director Arthur Penn le saca el máximo jugo a un joven actor de tan peculiares características: de baja estatura, con forma de caminar que refleja defectos, con cara de "ido", con gestos de autista (recordemos el soberbio papel en Rain Man), y logra llevar adelante un guión de estas condiciones donde todos los demás personajes "normales" quedan a la sombra de este excelente actor. La trama, que posee de todo: violencia extrema y explícita, erotismo manifiesto, humor negro, humor fresco e ingenuo, acción y sangre, toques de sentimentalismo, despliegue escénico sin retacear nada, montajes soberbios con muy buena fotografía y un vaivén de la historia que va y viene a lo largo de dos horas y media que me resultaron cortas. Hay ritmo, hay mensajes, hay filosofía de vida, hay enseñanzas. Por momentos se pasa de lo serio a lo cómico y viceversa con una fina ductilidad que hace apetecible cada escena, y también del drama fuerte a la acción cotidiana sin transición con sobresalto. En conclusión: nunca pensé que un western o al menos calificado así, me iba a producir tales efectos que he tratado de explicar de la mejor manera que me resultó posible, y confieso que no ha sido fácil expresar todo y claramente lo que esta película presenta y la hace recomendable.

En principio: su contenido de humor mitiga. Para muchos: desagradable; para otros muchos: divertida; para los siguientes muchos:puro humor negro sin pausas. Para mi: un gusto agridulce es lo que me dejó esta película, que, no muestra otra cosa que todas aquellas facetas (debilidades, flaquezas, fortalezas, miserias, complejos,etc) que los seres humanos "normales" anhelamos poder animarnos a cumplir algún día y nos morimos en el intento frustrado de nunca haber dispuesto de tal oportunidad. Son 6 pequeñas anécdotas que, en principio no aburren, por el contrario despiertan una mórbida curiosidad creciente a medida que pasa una y otra. Seis acontecimientos diferentes en su contenido van provocando disímiles sensaciones en el espectador. Me atrevo a pensar que: un 33% sale de la sala con cierta repugnancia (son aquellos a los que no les agrada ver la realidad desnuda); otro 33% salen satisfechos de ver con algo de morbo realista las situaciones a las que tarde o temprano podemos enfrentarnos, lo deseemos o no, lo esperemos o no; y finalmente el restante 33% (dentro de los que me ubico) trata de observar las cosas con la mejor objetividad que su capacidad le permite y pondera y ubica todas las situaciones en su estricto sitio: en el de la REALIDAD, presentada con desfachatez y sin escrúpulos. Me permito recomendarla para un 33% de ávidos espectadores. Cada uno elija en cuál de los tercios se encuentra.