Comedia Francesa que siguiendo la misma fórmula que la primera entrega consigue mas o menos los mismos resultados aunque pierde un poco la frescura de la novedad que supuso la primera.

Repite el mismo director y también el mismo reparto que en la anterior al completo mas alguna nueva incorporación. Y viendo lo bien que funciono en la primera es de agradecer volverlos a ver a todos de nuevo.

El argumento aunque muchos de sus gags son similares a la primera entrega funciona y al mismo tiempo consigue volver a sacar la sonrisa al espectador ante lo disparatado de algunas escenas. Esta vez gira en torno a las hijas y sus maridos del matrimonio protagonista que deciden irse a vivir fuera de Francia para intentar mejorar sus niveles de vida y claro Claude y Marie Verneuil harán todo lo posible para hacerles ver que en Francia no se vive tan mal y esto desembocara en situaciones de lo mas graciosas y disparatadas.

Los actores vuelven a estar todos ellos geniales y se nota la química que tienen entre ellos.

En definitiva, si os gusta la primera entrega esta segunda entrega también os gustara aunque pierda un poco la novedad respecto a la primera.

Mi nota final es de un 7 sobre 10.

La verdad que tras el perfecto cierre de saga que suponía Toy Story 3 esta cuarta entrega se antojaba cuanto menos arriesgada, pues estamos hablando de una trilogía que en su conjunto roza prácticamente la perfección.

Afortunadamente con esta película se ha demostrado que estos juguetes todavía pueden dar mucho mas de sí, y si bien es cierto que esta cuarta entrega no alcanza esas cotas tan altas de calidad narrativa que tenía la trilogía original es un producto mas que digno dentro de la saga.

Y es que a pesar de que la historia que cuentan es buena peca un poco de repetir el mismo esquema que las anteriores películas, juguete que por x razón termina fuera del hogar y hay que ir a buscarlo y recuperarlo. A pesar de ello el guión se las ingenia para que aunque la formula suene a ya vista incorpore las suficientes novedades para que no aburra en ningún momento y para mantener en todo momento la atención del espectador.

También debo confesar que el final de la película peca de romper con las reglas preestablecidas desde el primer momento en la saga, pues siempre se ha defendido que "el mayor honor de un juguete es hacer feliz a un niño", sin embargo aquí eso se rompe, ya sabréis a lo que me refiero cuando veáis la película.

Por todo lo demás me ha encantado volver a reencontrarme con todos estos personajes tras tantos años y la nostalgia ha hecho acto de presencia.

En definitiva, una película que sin alcanzar la magistralidad de las anteriores es una mas que digna secuela y que si siguen con este nivel de calidad por mi pueden continuar con nuevas futuras entregas. Por todo ello mi nota final es de un 7.5 sobre 10.

Magnifica y perfecta en todo lo que muestra, así se nos presenta esta secuela de Blade Runner que además toma como punto de partida el mismo argumento de la primera película pero en esta ocasión expandiéndolo a nuevos horizontes aún sin explorar.

Visualmente es una autentica maravilla, la fotografía de la que goza esta película es digna del premio Oscar, tiene una calidad visual que te transporta por completo a ese universo lleno de luces, penumbras y lluvias y nevadas constantes ya habituales en la estética de Blade Runner. El 3D esta perfectamente implementado y es una autentica gozada disfrutarla en la sala imax, sobre todo en aquellas escenas aéreas dónde se ven vehículos volando.

Las actuaciones están niqueladas, nada que achacar. Todos los personajes cumplen a la perfección su función en la película y todos ellos sufren de alguna evolución a lo largo de la misma. Además la película se guarda varias sorpresas y giros argumentales que ya los descubriréis vosotros mismos pero que os dejaran con la mandíbula desencajada.

La música, sublime, a la altura de lo que una película como esta necesita, recordando por completo a esas melodías de la primera película pero al mismo tiempo dándoles toques algo mas modernos.

Argumentalmente yo diría que no inventa nada nuevo a pesar de sus giros y sorpresas que tiene unas cuantas, pero al igual que la primera entrega no es una película que necesite un guión mega complejo para funcionar como una gran experiencia audiovisual y sensorial, además al igual que la primera película el guión encierra en su interior muchas moralejas y preguntas transcendentales: Quienes somos, adónde vamos, cual es nuestro destino en esta vida, la soledad, la necesidad de comunicación con otros seres, etc... son tantos los temas humanos y psicológicos que toca el guión que no puedo nada mas que quitarme el sombrero ante tal maestría.

Cuando ha terminado la película tenía la sensación de haber estado sentado en la butaca solamente media hora y es que a pesar de su larga duración es una película tan hipnótica que te atrapa desde el principio en un viaje lleno de emociones humanas que se pasa realmente volando de lo sumamente interesante y entretenido que es todo lo que se presenta ante nuestros ojos. Es mas, cuando han terminado los créditos no me daban ni ganas de levantarme del asiento, tenía ganas de mas. Es una película totalmente hipnótica.

Y por último creo que al igual que la primera película va a ser una película que o se la ama o se la odia. Para mi desde ya esta entre lo mejor del año y roza lo que se podría denominar como obra maestra. Estoy seguro que con el paso del tiempo se va a convertir en una película de culto como la primera.

Mi nota final es de un 10 sobre 10. Y me atrevo a decir que desde ya puede recibir la denominación de obra maestra. Necesito mas de esto en los cines.

Con "La Señal" el director William Eubank ya demostró sus buenas dotes para la ciencia ficción haciéndose valer además de un estilo visual bastante marcado y característico en el escenario protagonista. Algo de lo que vuelve a hacer uso en su nueva película estrenada este fin de semana, "Underwater".

Resumiendo brevemente "Underwater" viene a ser una mezcla entre la "Alien" de Ridley Scott mas la "Horizonte Final" de Paul W. S. Anderson. Tanto en estilo como en formas.

El argumento gira alrededor de una tripulación de seis supervivientes que quedan atrapados en una instalación submarina que se está inundando como consecuencia de un incidente. A partir de ese momento su única oportunidad para sobrevivir es caminar a través del suelo marino hasta una lejana plataforma petrolífera abandonada. Pero además de tenerse que enfrentar a los peligros propios de un entorno tan hostil pronto se darán cuenta de una amenaza aún mas peligrosa ya que algo les esta acechando para cazarlos uno a uno...

Decir que la película comienza a toda hostia es quedarme corto, aquí no tenemos presentaciones interminables iniciales de personajes, los créditos iniciales se encargan directamente de contarnos lo justo y necesario para ponernos en situación y que a los escasos cinco minutos del comienzo ya este liada parda y sus protagonistas luchando por la supervivencia, los cuales iremos conociendo a partir de ese momento. Y es que el ritmo de la película es endiablado, sus 95 minutos de duración se pasan en un respiro y todo debido a un montaje desenfrenado en el que no dejan de ocurrir y pasar cosas ni un solo minuto.

El diseño de producción y artístico me ha encantado. La base submarina es una maravilla en cuanto a diseño, con esos pasillos interminables y esas salas. Todo lo que acontece en las profundidades del mar en el lecho marino igualmente me ha parecido muy bien logrado y con escenarios que lograban transmitir tensión y claustrofobia al mismo tiempo. La fotografía de Bojan Bazelli resulta lo suficientemente notable. Otro apunto, a los que os guste la literatura y mas en concreto disfrutéis de autores como H. P. Lovecraft os aseguro que con esta película lo vais a pasar en grande, no digo mas que si no entro en tema spoilers...

La banda sonora a cargo de Marco Beltrami y Brandon Roberts me ha resultado inquietante y solvente, acompañando muy bien a las imágenes.

A menudo suele suceder que determinados actores debido a un determinado éxito en su carrera queden encasillados en un determinado papel y luego les cueste deshacerse de dicha etiqueta, esto mismo le paso a Robert Pattinson por culpa de su papel de vampiro en la saga Crepúsculo. Sin embargo con el tiempo ha demostrado que es algo mas que una cara bonita y que detrás de esa etiqueta que se le colgó en su día se esconde un grandisimo actor capaz de solventar papeles muy difíciles y complejos. Y si saco a relucir a Robert Pattinson por aquí es precisamente por que Kristen Stewart esta al igual que su antiguo compañero comenzando a demostrar que es una buena actriz capaz de enfrentarse a papeles mas complicados para deshacerse ella también de su etiqueta de vampiresa. Aquí es la dueña de la función, es la teniente Ripley de la función, la Sigourney Weaver de Underwater, y así lo demuestra metiéndose por completo en el papel de la principal protagonista. Acompañándola tenemos a otros cinco actores con mas o menos protagonismo, entre ellos cabe mencionar a un Vincent Cassel metido en el papel del capitán al mando y por otro lado a T.J. Miller cuyo personaje será el encargado de poner el contrapunto humorístico en medio de tanta tensión.

En definitiva, nos encontramos ante una propuesta que a pesar de recordar a otras películas que se desarrollan en entornos similares consigue encontrar una personalidad propia y una razón de ser. Una aventura épica de terror con buenas escenas de tensión y con un ritmo frenético y que no da lugar a aburrimiento alguno. Como dije al principio de la crítica, si os gustan películas estilo Alien u Horizonte Final con esta os lo vais a pasar como enanos, y si disfrutáis de películas como Leviatán, Abyss y similares esta es vuestra película.

Lo mejor: El diseño de producción y su ritmo frenético de principio a fin.

Lo peor: Algún personaje pasa demasiado de puntillas a favor de ceder mayor protagonismo a otros.

Mi nota es de un 8 sobre 10. Digna de ser visionada en cines.

Uno de los grandes aciertos de la primera temporada de Black Summer es que iba al grano y sin rodeos, una persecución continua dónde los supervivientes sólo tenían tiempo para correr y correr, ocultarse unos segundos para volver a correr para sobrevivir a los primeros compases del apocalipsis zombie. No había tiempo para grandes diálogos, ni para conocer en demasiada profundidad a sus personajes, todo se reducía a una frenética carrera por la supervivencia, y a pesar de ello resultaba tremendamente entretenida y divertida, ya que además la duración de sus capítulos invitaban a ello. No es que reinventada nada dentro del género, ni que fuera novedosa, pero si que era eficaz y contundente en lo que mostraba.

Pues bien, esta segunda temporada decae en comparación con aquella intensa primera temporada, y aunque se esfuerza en seguir manteniendo la misma fórmula la inclusión de enemigos humanos y conflictos entre grupos a mi parecer a perjudicado y mucho a esta segunda temporada, que si, estamos todos de acuerdo en que Thomas Hobbes llevaba razón al decir que el hombre es un lobo para el hombre, pero convertir esta serie en un The Walking Dead con continuos conflictos entre humanos sólo la transforman en un copia pega de aquella, con mas ritmo, pero no deja de ser lo mismo, y claro en comparación con la primera temporada dónde todo se reducía a huir de los zombies pues el cambio choca y mucho. No digo que esto sea malo, ni mucho menos, sólo digo que a título personal yo en esta serie lo que busco es lo contrario a The Walking Dead, ver zombies persiguiendo humanos todo el rato sin descanso como en la temporada anterior, para todo lo demás ya tenemos The Walking Dead.

Repiten personajes, bueno, aquellos que no fueron pasto de los zombies en la primera tanda de capítulos. Así que aquellos que ya hayáis visto la anterior temporada sabréis a que personajes me refiero, no quiero contar tampoco demasiado sobre ello por si estáis comenzando a ver la serie, pero a estos se unirán otros nuevos personajes, algunos con intereses comunes y otros dispuestos a putear a todo ser vivo, cuyo desarrollo vuelve a ser escaso ya que la duración de los capítulos lo hacen imposible. Aún así hay alguna nueva incorporación interesante y que aporta al conjunto de personajes que pululan este mundo apocalíptico un nuevo punto de vista.

La dirección me ha parecido bastante buena en general, con muchos planos secuencias en determinados capítulos dónde la cámara se vuelve loca en medio de la acción y nos muestra todo el caos reinante con todo lujo de detalles, y se vuelve a usar ese modo desordenado de contar la historia, mostrándonos fragmentos del mismo suceso desde distintos enfoques para finalmente todo junto componer un puzle narrativo dónde las piezas encajen. El punto negativo viene en algún capítulo dónde la acción se estanca un poco (al contar los conflictos entre grupos) al contrario de lo que ocurría en la primera temporada dónde todo era un correr sin parar.

La música también me ha parecido correcta, acompañando bien aquellas escenas que así lo requieren y haciendo hincapié en la desesperación que acompaña a los personajes.

En definitiva, si os gusto la anterior temporada seguramente disfrutéis de esta segunda, eso sí, avisaros quedáis de que ahora los zombies ya no son la principal amenaza y que cual The Walking Dead la situación apocalíptica sacará lo peor de los distintos personajes. El sálvese quien pueda. Esto no es que sea bueno ni malo, si no que la hace distinta a la temporada anterior y claro, yo esperaba encontrar mas de lo mismo, no conflictos entre grupos humanos matándose entre ellos.

Lo mejor: Sigue resultando entretenida y divertida. La dirección es muy buena con grandes planos secuencia.

Lo peor: El cambio en la amenaza pasando los zombies a un segundo plano y dándose más importancia a los conflictos entre humanos.

Es por todo ello que mi nota es de un 6.5 sobre 10.