Debut en la dirección del brillante guionista Taylor Sheridan (Sicario, Comanchería) con este notable thriller de excelente fotografía y un guión, escrito por el mismo, que simplifica la investigación al máximo para centrarse en las miradas y silencios de su hierático protagonista, un excelente Jeremy Renner.

Como ya ocurría en su célebre libreto para Comanchería, la historia no presenta muchas novedades ni será una película que revolucione el género, pero lo que cuenta lo hace muy bien y no hay ningún apartado, ni técnico ni artístico, que desmerezca al resto. Recomendadísima.


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El tándem formado por el director Patrick Brice y el actor (y guionista) Mark Duplass repiten la misma fórmula en esta secuela demasiado autoconsciente de Creep.

Los seguidores del mumblecore y de su protagonista disfrutarán a ratos de la propuesta, al resto puede que se les hagan largos sus poco más de 75 minutos de metraje. Espero que no sigan exprimiendo una broma que no daba para dos largometrajes.

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Nueva fantasía de Guillermo del Toro que consigue sorprender transitando por caminos ya recorridos gracias a un notable guión que sabe definir a la perfección a sus personajes y sacar todo el provecho posible a sus aires de fábula romántica.

El reparto cumple con creces (destacando, como siempre, un sensacional Michael Shannon) y el conjunto final es imposible que decepcione a nadie, notándose al director muy seguro de lo que quiere contar y permitiéndose incluso una broma privada muy obvia al primer Torrente de su amiguísimo Santiago Segura.

Junto a La bruja, de las mejores películas inaugurales que se recuerdan en Sitges. A ver si mantienen el nivel.


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Entretenida ciencia ficción de serie B que parece ambicionar crear toda una nueva saga de películas pero que se ve lastrada por su bajo presupuesto y por un guión tópico que no siempre es coherente con la historia que está contando.

El elenco, al mismo nivel que sus bajos recursos económicos, no ayuda a quitarle el aire de piloto de serie de televisión al filme.


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Desaprovechada comedia de terror que no sabe utilizar los diversos recursos de los que echa mano y se queda como una floja sátira del narcisismo juvenil y del uso que hacen estos de las redes sociales.

Vamos, como un remake bastardo de Scream 4 pero en malo.


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