Atenas, años 90. Sin motivo aparente, varias personas sufren un ataque de amnesia que les hace olvidar todo su pasado. Las que no tienen identificación son llevadas a un centro en el que se les asigna un número y esperan hasta que algún familiar les reclame y les ayude a reconstruir su vida. Al resto, que no tienen a nadie que les eche en falta, les introducen en un programa para aprender a vivir de nuevo.

...sin duda hubiese sido mejor título.

Santa Bárbara, 1979. En esta fecha y lugar conviven en una misma casa 5 personas y un gato:
- la propietaria de la casa: una mujer hecha a si misma en un mundo de hombres, fuerte pero insegura.
- su hijo Jamie, un chaval de 15 años rodeado de chicas.
- Julie: amiga y amor platónico de Jamie. Una chica precoz y con personalidad. En sus tiempos libres calienta a Jamie.
- Abbie: alquila una habitación en la casa. Fotógrafa, punky y feminista.
- William: a quien le importa quién es William?

La peli te muestra las diferentes visiones que tiene cada habitante de la casa sobre la sociedad de la época. Y luego está el joven Jamie, debil y sobreprotegido, que todavía no tiene una personalidad propia y se ve aturdido por la voluntad de todos de moldearla a su antojo.

Los distintos personajes son interesantes y sus personalidades están bien interpretadas aunque la película es lenta y te deja algo tibio.

Si lo he entendido bien, la peli consiste en humillar a los dos papeles masculinos para dejar claro que las mujeres han llegado al poder. Supongo que es una revancha justa después de muchos años con los papeles invertidos pero...

Recuerdo que, de pequeño, cuando le preguntaban a mi hermano qué quería ser de mayor, respondía que "ladrón". Finalmente, no pudo cumplir su sueño y acabó en un trabajo de oficina. Pero la cosa podría haber sido diferente si hubiese tenido la oportunidad de ver Sapo SA en aquel momento.

Y es que la serie es una oda al ladrón de guante blanco. Un hombre entrenado en la Armada y en los servicios secretos de varios países que decide usar su preparación para cometer delitos en España, en ese momento, el pais con las leyes más laxas para este tipo de crímenes.

La serie resulta muy adictiva al mezclar los testimonios del Sapo sobre sus fechorías ya prescritas, el de los policías encargados del caso y las noticias de la época. Da detalles interesantes sobre la preparación de los atracos, sus compañeros de robo y algunas pinceladas sobre las cloacas del estado.

Lo mejor de la serie es claramente el personaje de El Sapo, un psicópata muy carismático, soberbio y que te engancha con la mirada y su acento francés.

El último capítulo lo arruina todo. Si estás a tiempo, ahorratelo. Es un corta pega de trozos de episodios anteriores increíblemente largos junto a apariciones del director gustandose sobre lo bien que ha hecho las entrevistas al Sapo y explicándonos lo que hemos visto en los otros capítulos como si no lo hubiésemos entendido por nosotros mismos. Absolutamente innecesario.

El síndrome del impostor es un fenómeno psicológico que hace que aquellas personas que lo padecen sientan que nunca se encuentran a la altura de las circunstancias o que sean incapaces de aceptar que merecen lo que han obtenido como fruto de su trabajo.
Entiendo que esto es lo que debe sentir Ryan todas las mañanas al levantarse. Al menos eso espero...Tocó techo en la película Drive, en la que el director, consciente de las virtudes del actor, le pidió que pusiese cara de seta (su cara, vamos) y no hablase durante los 100 minutos que dura. La verdad es que lo clavó. Desde entonces su carrera ha ido cuesta abajo y sin frenos.
En cuanto a la película, Ryan es el que mejor lo hace, imagínense el nivel... Película fast food sin ser siquiera demasiado entretenida. Guión horroroso y 200 millones de presupuesto para un fail total.

Bienvenido a Bacurau, un pueblo perdido al oeste del estado de Pernambuco en Brasil, una piedra en el zapato para el alcalde de Sierra Verde.
Según nos acercamos al pueblo nos topamos con la muerte, que será la principal protagonista de la película.
El inicio es lento, todo apunta a que podemos estar ante un tostón épico. Pero aparecen los guiris para romper el desequilibrado equilibrio del pueblo, sacarnos del letargo y traernos un río de sangre. Se topan con Lunga y Pacote que con la ayuda de los tripis y el espíritu mágico de Bacurau no se lo pondrán fácil.
Película sorprendente, aritmica y sangrienta, que muestra distintos registros, algunos tonos tarantinianos y te acaba dejando algo frío. Buena banda sonora.