La verdad es que me ha parecido una buena película, realmente bonita y muy, muy agradable de ver. Desborda un sentido del humor distendido que se agradece, con un Hugh Grant que, aunque no se trata de uno de mis actores preferidos, he de reconocer que, aunque se repita mucho en sus típicos papeles de madurito divertido y tierno con verborrea y con tendencia a burlarse de sí mismo, sin embargo no pierde su chispa y le da a su personaje el toque necesario para hacerlo a la vez encantador, natural y bastante creíble. En su línea, Hugh Grant sabe estar a la altura, y aquí convence, o por lo menos está bastante correcto. Aunque la película no derroche originalidad humorística, divierte, y eso es lo importante.
Drew Barrymore nos deleita con un papel sencillo y natural (como también suele ser su línea), y su chispa con Hugh Grant llena la pantalla.
La fotografía es notable. Esos planos de Nueva York al atardecer, de los videoclips ochenteros (que a los que ya tenemos de 30 para arriba nos traen muchos recuerdos) y del Madison Square Garden son impactantes y dignos de ver en el cine.
Pero lo que destaca es la magnífica banda sonora. Tratándose de una película basada en la creación de una canción, la música tenía que ser el centro de todo. Y lo cierto es que esas canciones de los ochenta están muy bien y el tema creado por los protagonistas es precioso y pegadizo. Ah, y el tema de fondo que sale en una escena, ese "Never Ending Story" mítico que marcó mi infancia desde que vi "La historia interminable"; creo que no podían haber escogido un tema mejor. Desde luego, pienso comprarme la banda sonora porque vale la pena.
Por último, la combinación entre la canción que van creando el músico y la letrista novata y la relación que va surgiendo, tienen un paralelismo y algo de alegórico que, no por ser un recurso de típica comedia romántica, deja de ser bello. La música es un reflejo de los sentimientos y surge a la par que éstos y, a través de ella, el desilusionado músico y la insegura y desengañada escritora descubren el amor y se lo confiesan de una forma conmovedora.
Una canción puede ser una de las más sublimes declaraciones de amor, y todos lo sabemos porque seguro que cada cual tiene la suya. Y, si todavía no, tiempo al tiempo.
Bueno, dicho todo esto, ahora les dejo para que puedan despotricar de mi mal gusto por ver algo hermoso en una comedia romántica hollywoodiense, o bien para que aprecien mi opinión sin miedo a descubrir alguna debilidad de carácter por el hecho de que puedan disfrutar viendo esta película.

Estoy teniendo el gusto de leer el libro en el que se basa esta película, y he de decir que la adaptación me parece muy buena, incluso supera mis expectativas en ciertos momentos.
Voy a describir todo lo malo y lo bueno que le veo.
Lo malo:
-No le veo nada digno de merecer ese calficativo. Sus fallos tendrá y no todo ha de ser excelente, pero para mí esos defectos no empañan el vigoroso y sólido desarrollo. Encuéntrenle ustedes todos esos defectos que por ahí dicen que tiene, porque o yo no los he visto o me parecen poco importantes.
Lo bueno:
-La historia engancha desde el principio, si se olvidan de los posibles defectos visuales (de todos modos, nosotros no sabemos exactamente cómo eran aquellas personas, así que no podemos juzgar si el maquillaje y el vestuario son válidos o no, hay que dejarse llevar y ya está, que para eso está la imaginación). La voz en off es necesaria para explicar ciertos detalles. Ah, y el lenguaje con el que se comunican las gentes del Clan me parece muy bien trabajado y creo que le han dado mucha verosimilitud. Al menos, excepto la voz en off, no se oye a ningún neandertal o cromañón hablando en inglés, cosa que le da más valor. Excepto la palabra "mamá" (que no sabemos si ya se utilizaba entonces), no se cuelan palabras modernas. Además, me parece muy bien recreado el lenguaje, mezcla de lenguaje verbal y no verbal, pues parece ser que los neandertales no dominaban el lenguaje verbal articulado.
-Las interpretaciones me parecen buenas y convincentes. La prueba es que no he tenido un momento de respiro, mi atención no ha decaído y yo deseaba que la historia durase más. Para mi sorpresa, Daryl Hannah me ha sorprendido, se ha metido en su papel y posiblemente sea el mejor que ha interpretado en su carrera. Es increíble lo expresivas que son sus escasas palabras, las expresiones de su rostro y sus gestos. Ella brilla aquí de una forma difícil de olvidar. Me ha demostrado que no sólo es una actriz bella, sino que sabe actuar realmente bien cuando se lo propone. Los demás actores y actrices también están a la altura. A mí todos me hacen olvidar que se trata de personas de la actualidad interpretando papeles de gente prehistórica.
-La ambientación es magnífica. Menudos paisajes, perfectamente escogidos. Y qué decir de las escenas de caza, llenas de tensión y emoción, con esos impresionantes animales salvajes.
-Y, desde luego, me encanta ver cómo, en un clan neandertal donde las mujeres estaban completamente sometidas a la autoridad de los hombres, una mujer cromañón saca a relucir su inteligencia, su habilidad y demuestra que las mujeres pueden hacer cualquier cosa que se propongan, bajando los humos a más de un creído. ¡De sobresaliente! Sigo contando en el spoiler por falta de espacio, no se preocupen que no revelo nada crucial.

Antes de verla, le daba un voto de confianza. Me gustan las historias de amor profundas y complejas, de ésas que te estremecen. Pues ésta me estremece... pero de frío. Expondré mis razones:
-Las actuaciones no me parecen buenas. Todos los personajes me parecen fríos y acartonados. Los chavales protagonistas son poco creíbles y, a decir verdad, unos peñazos y pasmarotes a los que te dan ganas de sacudir para quitarles la diarrea mental.
-Las relaciones entre ellos son distantes. No me termina de dar la impresión de que se trata de familias, sino de extraños que se llevan años viviendo bajo el mismo techo sin saber casi nada unos de otros. Esos silencios prolongados de los chicos protas no me parecen poéticos ni misteriosos, sino absurdos. ¿Cómo esos niños se pueden pasar años enteros casi sin hablarse, pese a estar juntos muchas horas (yo no he conocido niños así, y he visto a muchos)? Menudo soserío. Y después, cuando van creciendo, se van volviendo inaguantables. A mí cada vez me interesaban menos sus avatares y sus desdichas, porque les notaba algo cada vez más frío, más alejado de mí. Me di cuenta de que me había desconectado por completo de la película, de que no me llenaba en absoluto, de que la historia ya no me decía nada. La frescura y la magia que pudiera tener al principio, se diluyó y se perdió. Sería por algo que veía en su actitud, por las inconsistencias de un guión que ya no sabrían muy bien cómo rellenar, la lentitud que no lleva a ninguna parte (que conste que a mí me da igual que una peli sea lenta, mientras me llene). Pero la cuestión es que me estaba aburriendo. Me gustan las películas llenas de sentimiento, cuando lo transmiten, claro. No hablo de sensiblería fácil, sino de auténtico sentimiento, que yo creía que me iba a encontrar aquí. ¿Dónde está? ¿Cómo se demuestra? ¿Con dos niñatos medio atontados que si les sacan un encefalograma, sale plano? Ya ni siquiera el drama de la pérdida que sufre el chico se hace creíble, no me llega. Seré muy ceporra, pero lo cierto es que me he pasado toda la película intentando sentir algo y apenas lo he logrado. ¿La culpa es mía? ¿Soy insensible? ¿Soy un bicho raro porque me emociono y vibro con otras películas, pero con ésta precisamente no?
Señores realizadores, la lentitud no tiene por qué ser sinónimo de aburrimiento ni de lejanía. Yo sentía como si estuviera sentada en mi casa y la pantalla del ordenador donde veía la peli estuviera en el Círculo Polar... Antártico. Ése es el único Círculo Polar al que para mí se reduce esto.
No sé, pero como película de sentimientos, deja mucho que desear. Con creces.
Y que conste que he intentado valorar algún aspecto bueno. Por ejemplo, las imágenes del principio donde se ve el sol de medianoche. Precioso. Los chavales que clandestinamente se citan en sus dormitorios, desnudos y nerviosos, bajo una ventisca. Eso también es bonito. Pero después todo se vuelve insustancial y el guión hace aguas. Sigo en el spoiler.

Es la típica peli para pasar la tarde cuando no hay nada mejor que hacer. Voy a contrastar los que, a mi parecer, son sus defectos y sus virtudes.
Empezaré por los defectos:
-Mucha superproducción y un poco larga. Aunque la trama es interesante, tampoco es que una esté al borde del infarto viéndola, por lo que una se va cansando de tanto nuevo giro y tanta pirueta del guión para alargar algo que no merece tanto metraje.
-Muchas cosas se las sacan de la manga. ¿Cómo una señorita fina como es Elizabeth, que se ha pasado la vida como niña rica y cómoda de papá, de repente se convierte en una pirata experta, en contorsionista y en una superwoman? Por no hablar de un montón de otras cosas absurdas. En fin, qué le vamos a hacer, se trata de una peli de fantasía y supongo que todo eso entra el el término. Ahh, ya lo entiendo: la señorita Swann, cansada de su mundo pijo, con el que no pega (eso del corsé no le va), se ha querido apuntar a la moda pirata, que eso sí que le va porque los piratas son superguays de la muerte (qué romántico y heroico eso de ser pirata).
-Una acaba mareada con tanto código de piratas, tanta revuelta y tanto lío. Mucho lío por minuto. O yo soy muy lenta o en la peli son demasiado rápidos para nosotros, la gente corriente. Y claro, como los protas son lumbreras, lo pillan todo al instante y son tan megalistos que reaccionan en fracciones de segundo y siempre les sale todo bien. Ya quisiera yo tener esos reflejos.
-Vale, que ya sé a lo que me enfrentaba. Sólo quería confirmar mis sospechas. No tenía muchas ganas de verla, porque cada vez me van menos las pelis de mucha acción pero vacías. Pero, lo confieso: la he visto nada más que para tener otra peli que poder criticar a gusto en Filmaffinity.
Ahora, sus virtudes:
-La trama esconde sorpresas y, aunque los personajes son más planos que una tabla (incluso el colgadillo Jack Sparrow es predecible) y ya una se imagina más o menos los derroteros que van a tomar, a tu pesar esperas el final con interés, aunque sólo sea por lo mucho que se lo han currado (y, seamos sinceros, para que se acabe de una vez, que tampoco es para tanto).
-La peli es divertida e irónica y a menudo parece reírse de sí misma, lo cual le hace ganar puntos, porque deja claro que eso es lo que pretende: entretener y divertir. Y ese cometido lo cumple. Y hay que añadir que, aunque a la larga es predecible, consigue hacer funcionar un poquillo nuestros cerebros de vez en cuando.
-Hay que reconocer que se han currado bien la peli. Los efectos especiales son buenos y las actuaciones, correctas y distendidas, sobre todo la de Johnny Depp. Se han tenido que poner en buena forma para tanta pirueta.
Se deja ver y, si lo que quieren es ver algo emocionante que no sea nada del otro mundo ni memorable, pues véanla. Otra peli más de piratas y aventuras para ver y olvidar.

Por qué será que cada vez me huele más a chamusquina el exceso de maniqueísmos en las películas. En ésta, hay tanto afán por mostrarnos "malos malísimos" y "buenos buenísimos" que, la verdad, le resta brillantez.
Tras tener que aguantar un considerable número de escenas extremadamente violentas y desagradables, lo cierto es que a una se le van quitando ya las ganas de seguir, porque es muy agotador presenciar escena tras escena angustiosa y desagradable sin descanso. Y opino que se podían haber ahorrado tantísima violencia gratuita. ¿Era realmente necesaria? ¿Siempre tienen que sacar a al típico prototipo de tíos absolutamente malvados que torturan atrozmente a la gente? ¿Es que no pueden tirar más hacia un término medio, hacia un ser humano más del montón, como somos la mayoría? ¿Por qué se empeñan tanto en mostrarnos lo más radical y lo peor de cada bando, como si fuese lo único que hubo? Que conste que yo no defiendo ningún bando, en todos se cometieron atrocidades. Los politiqueos en las películas y el ver las ideas simplonas y maniqueístas en las que se basan muchas, ya me empieza a hartar (una se cansa de esas modas cinematográficas en las que las películas nos quieren mostrar verdades absolutas). Por lo visto, lo que más vende en el cine es mostrar a "buenísimos" y "malísimos", y a la gente normalita que la zurzan.
Si algo tiene de bueno esta película, es esa niña de bellísimo rostro que nos da un respiro sólo con verla, aunque sea un respiro pequeño. Su mundo fantástico es tan cruel y repulsivo como su vida real, así que ella brilla porque en sus ojos vemos el valor y la entereza de una niña que sabe que está condenada a sufrir y a pasar duras pruebas, tanto en un mundo como en el otro. Y si se esperaban algo parecido a "Alicia en el país de las maravillas", pues chasco. Ni siquiera el mundo fantástico nos alivia de la opresión.
Conclusión: Se mantiene una angustiosa tensión y hay no pocas escenas que hieren la sensibilidad del espectador, de tal forma, que una se queda dándoles vueltas a esas imágenes, y eso hace que decaiga la atención durante un rato y se quiten las ganas de seguir viendo la película. Sigo en el spoiler.