La tiendita del horror

Estimado Domiciano,

¿Qué no tiene esta película?. Si me dices que es un musical, eso es obvio. Una comedia, por supuesto. Ciencia ficción, no se puede decir que no. Terror (del antiguo, del de serie B), pues claro que también. Romántica, ¿alguién lo duda?....

¿Cómo se pueden encontrar tantos generos en una sola cinta de una manera tan excepcional y sin que chirrie?. Pues con un gran trabajo como éste y buen material.

Un gran ingrediente son las canciones que componen este musical (porque ante todo es un musical). Geniales, en letra y música, empezando con ese "Downtown" coral y continuando con cualquier otra ("Suddenly, Seymour", "Dentist", "Grow for me", etc.).

Rick Moranis, en un papel que le va como anillo al dedo, lidera un reparto en el que también nos encontramos una gran selección de cómicos salidos del popular "Saturday night live" (Steve Martin, Bill Murray, James Balushi, John Candy, etc.).

Por mi parte, a esta película la veo redonda. No le quito ni le pongo nada. Es cine del de disfrutar, del que hace grande a Hollywood y le da carácter (y no esos rollos que suponen el 80 o 90% del llamado cine "familiar").

Vale, vale, me he dejado llevar por la pasión...., pero es que acabo de volver a verla.

Esta película es una joyita dentro de un género, como el musical, que nunca estará pasado de moda (que se lo digan ahora a Tim Burton...). Las interpretaciones son divertidas y correctas, especialmente la ya mítica escena de Steve Martin y Bill Murray; las canciones, pegadizas y bien cantadas, con grandes voces que sorprenden. La planta Audrey es todo un icono de la serie B, con una genial voz (tanto la original que canta como su doblaje en castellano). Y el ritmo es continuo y divertido, sin pausa. Absolutamente recomendable.

Adoro este gracioso y sangriento musical basado en una obra de teatro que a su vez está basada en una película de serie B de los años 50 del maestro ROGER CORMAN.
Cuenta la historia de Seymour, el dependiente de una floristería que adquiere una planta extraterrestre que se alimenta de sangre humana y a la que bautiza como AUDREY II. Al principio, Seymour la alimenta con su propia sangre, pero cuando AUDREY II empieza a hacerse cada vez más grande y a necesitar cada vez más cantidad, se verá obligado a asesinar para poder seguir alimentándola.

Después de colaborar con el malogrado JIM HENSON ( creador de los teleñecos ) en BARRIO SESAMO y las imprescindibles CRISTAL OSCURO y DENTRO DEL LABERINTO, y de haber dado vida al MAESTRO YODA ( animando al muñeco y poniéndole la voz ) en EL IMPERIO CONTRAATACA. FRANK OZ demuestra una vez más su amor por los ''monigotes'' y nos deleita con esta simpática comedia musical donde encontramos también un increíble muñeco animado como es AUDREY II.
Es imposible hablar de esta película sin hacer especial hincapié en los efectos especiales, los cuales, a pesar del paso del tiempo, siguen siendo inigualables. Todas las escenas en las que aparece la planta quitan el hipo. Me parece increíble lo bien conseguido que está el efecto de la boca cuando AUDREY II canta y habla, ¡Si hasta se le pueden leer los labios!.

Mención especial ( por descontado ) a la banda sonora y las canciones de MILES GOODMAN las cuales son todas pegadizas y con unas letras muy graciosas y divertidas. Las coreografías, los actores, los decorados, la ambientación, ¡Todo! Todo en esta película rezuma buen hacer y simpatía. Pero sobre todo, mención especial a la labor tras las cámaras de FRANK OZ, que realiza un trabajo impecable, dándole a la película una estética y un ritmo vertiginoso, que hace que no se haga pesada en ningún momento. ( tened en cuenta que os habla un ser humano al que generalmente los musicales se le hacen un pelín pesados )

No encuentro ningún motivo para ponerle menos de un 10.

Si has pasado un mal día y estás un pelín deprimido/a, te recomiendo que te pases por LA PEQUEÑA TIENDA DE LOS HORRORES y dejes que AUDREY II te cante un par de canciones, pero que no sea al oído o se te comerá la oreja.

Un saludo y que disfrutéis de esta imprescindible JOYA.

Oz convierte con éxito en comedia musical el film de ciencia ficción dirigido por Roger Corman.

Una planta venida del espacio, antropófaga y cachonda mental, atormenta a un pobre y acomplejado florista de extrarradio (Rick Moranis) obligándole a proporcionarle víctimas para sus almuerzos, a cambio de este "favor" la planta dota al chaval de éxito en los negocios y en el amor.

Lo mejor de la película:
- La voz de Audrey II (la planta)
- La visita del paciente masoquista (Bill Murray) al sádico dentista (Steve Martin); tronchante. Y la canción del dentista:
"Cuando yo era joven, sólo un niño malo,
mi madre se daba cuenta de las cosas graciosas que hacía,
como disparar a perritos con una pistola de balines.
Envenenaba a los peces, y cuando terminaba,
encontraba un gatito y le pegaba en la cabeza.
Entonces es cuando mi madre dijo...
Hijo mío, creo que algún día
encontrarás la forma de realizar tus instintos.
¡Serás un dentista!
Tienes talento para causar daño a las cosas.
Hijo, sé dentista;
la gente te pagará para que seas inhumano.
Tu temperamento no es adecuado para el sacerdocio,
y la enseñanza te sería aún menos apropiada.
¡Hijo, sé dentista!
¡Serás un éxito!"

Absolutamente recomendable.

Absolutamente recomendable. La presentación que Steve Martin hace de su personaje es uno de los momentos de cine musical más hilarantamente conseguidos que se recuerdan. Una joya trufada de buenas interpretaciones, buenas canciones y mucho humor.