Sangre de héroes

“Puedes pegarme. Puedes tirarme al suelo, incluso escupirme y mearme. Pero, por favor, no me aburras.”

Esta frase dicha por Clint Eastwood durante 'El sargento de hierro' se podría aplicar perfectamente como uno de los mandamientos de las películas que siempre deberían cumplir o proponérselo, al menos. Y es que cuando un largometraje hace que se te pase el tiempo volando, ya es mucho logrado.

En 'Fort Apache' creo que ya contaba con eso, pero cuando llevo ya un buen rato de metraje pasan apenas unas cuantas cosas y ninguna de ellas es para levantarse de la silla. Se ve la presentación del coronel Owen Thursday en su llegada a Fort Apache, como van funcionando las cosas allí y un romance cursi; para llegar a algo realmente interesante hay que esperar hasta casi la media hora final.

No dudo de las intenciones del señor Ford para rodar la historia de esta forma, ya que él y el guionista verían que era la manera de conectar con el espectador; sé también de la buena reputación de este filme, así que creo que yo debo haber visto una película totalmente distinta, o es que mis ideas de una buena película no convergen con lo visto, que es lo más probable.

No puedo poner pegas al reparto puesto es de los pocos elementos salvables. John Wayne y Henry Fonda cumplen con lo que esperan de ellos en cualquier trabajo, el resto de secundarios con roles principales no les van a la zaga; la dirección del señor Ford tampoco puedo ponerle muchas pegas, aunque bien esta vez no dirige escenas que me hayan impresionado. El guion es el talón de Aquiles.

Como dijo otra frase, "a la tercera fue la vencida" y ha sido en el tercer filme de la autoría de John Ford visto este año cuando ha llegado un pequeño bache. Aún así, el balance de sus largometrajes sigue siendo más a su favor que en su contra.

Otro clasicazo decepcionante por obra y gracia de los gafapastas que votan en FilmAffinity, dando dieces o ceros a mansalva según quién sea el director; y van ya... . Así ellos se sienten más inteligentes, y son felices. Es comprensible, son sentimientos muy humanos. Y por suerte para él, John Ford es uno de los dioses del gafapastismo. No esperes aquí una película seria del oeste. La 1ª mitad es una ñoñez, casi una comedia. Después se pone "seria" -dentro de lo que cabe-, pero no arregla el estropicio por culpa de personajes como John Wayne, impertinente y fanfarrón sin descanso desde que aparece en escena, y otros secundarios, que parecen paletos recién llegados del campo con su tractor amarillo. En conclusión, un "wéstern" que apenas produce otra emoción que no sea aburrimiento y vergüenza ajena, totalmente olvidable. Por los paisajes y algo de interés conforme se acerca el final le doy un 5, y creo que puntúo de más.

Típico film del ejercito americano en plan pasivo, western de los clásicos en B/N de los dos John's (Wayne y Ford). Donde estén las BOS, los planos y los argumentos de Sergio Leone... que se quite Ford.