Me ha gustado mucho más de lo que pensaba esta película. Llevaba queriendo verla desde que se estrenó y por fín la ví ayer. Me ha parecido emotiva sin caer en cursilerías, su ambientación me ha encantado, su tema musical le viene como anillo al dedo y es precioso y la actuación de sus actrices es impresionante. Me quedo con la joven Nadia de Santiago, es la que más me ha gustado, pero las demás no se quedan atrás. Agradable descubrimiento de Gabriela Pession, creo que ha estado más que correcta. Marta Etura ya me gustó en "Azuloscurocasinegro" pero aquí me ha encantado. De Pilar López de Ayala ya me esperaba su buen hacer, pero Verónica Sánchez me ha sorprendido del todo porque no me la esperaba tan seria y profesional. Luisa Martín y su secuencia en la que corre tras el camión es la que me ha partido el alma y la que me ha ganado, es una pedazo de actriz, a ver cuándo se le da un protagonista a esta maravillosa actriz en el cine. Goya Toledo está correcta y de Leticia Sabater decir que su papel es muy corto y que está correcta, que no le puede sacar ningún y que no se deben de cebar con ella, porque no afecta para nada al buen hacer del film. Adriano Giannini está guapísimo y correcto y Enrico Lo Verso nunca me ha gustado y aquí tampoco me ha hecho cambiar de opinión. Fran Perea no me gusta, no me parece un actor muy interesante, tiene una voz realmente bonita, pero la actuación no es lo suyo, aunque es simplemente mi opinión. La recomiendo encarecidamente, merece muy mucho la pena.

Fresca miniserie francesa que se puede ver actualmente en Netflix y que me recomendó una buena amiga. Está basada en una novela que no me importaría leer porque el argumento es de los que enganchan, se pasa rápido, es una delicia disfrutar de ella en su versión original en francés, las localizaciones son apabullantes y el conjunto de actores que en ella intervienen están perfectos.

La protagonista es Léa, encarnada aquí por la joven de 23 años Raïka Hazanavicius, a la que le toca dar vida con mucho acierto a una chica de 17 años que descubre el cadáver de un joven desaparecido hace 30 años. Raïka es hija y sobrina de cineastas y se ve que lo lleva en la sangre esto de la actuación porque está maravillosa como maravillosa está también la joven y atractiva Marguerite Thiam, una desconocida actriz con un brillante futuro en el cine.

De los chicos no puedo dejar de mencionar al guapísimo Khalil Ben Gharbia, todo ojos, boca y rizos, que enamora a la cámara cada vez que aparece y que da vida al joven desaparecido.

Una muy buena opción para disfrutar de la tv hecha en el país vecino.
Un saludo,
Tess

La verdad es que no entiendo cómo se le ha podido ir tanto de las manos esta película a un director tan interesante como es Alex de la Iglesia. Yo soy de las que alabo al director vasco su originalidad, su pasarse por el forro lo que pueden pensar de su película los críticos de ésto que llamamos cine, su distanciarse de los temas tradicionales del cine patrio. Pero creo que ha echado a perder una película que era ciertamente interesante con su excéntrico por demás tramo final. Yo encuentro normal que De la Iglesia le de a su mujer la oportunidad de lucirse como actriz. Está orgulloso de tener a su lado un mujerón como la guapa Carolina Bang, actriz a la que no le dan oportunidades otros directores españoles y que, sinceramente, no está tan mal como algunos afirman aquí. La rubia aprovecha bien los minutos que su marido le otorga en el guión y hace lo que puede con un personaje no tan bien desarrollado como el de las otras dos brujas, interpretadas por dos debilidades del vasco como son La inmensa Terele Pávez, la mejor de todas sin duda, y la correcta Carmen Maura, en uno de sus papeles menores. Me sorprende muy positivamente la química tan enorme que tienen dos guapos de nuestro cine como son el correcto Hugo Silva y el más que competente Mario Casas. Ellos y su buen hacer le hacen ganar muchos puntos a la película. Macarena Gómez no brilla demasiado aquí, no está todo lo aprovechada que podría estar. Los primeros 45 minutos de la película quizás sena lo mejor de todo, yendo sin duda de más a menos a medida que empieza el aquelarre brujeril. Pasable película española que entusiasmará a los muy fans de De la Iglesia pero que no es para todos los públicos.

La verdad es que esta película me ha parecido una pequeña joya de la cual no se ha hablado mucho, a pesar de haberle proporcionado un globo de oro a Jack Nicholson por su interpretación en ella de Warren Schmidt. La película nos desarrolla, sin aspavientos ni edulcorantes, la situación de apatía vital que desborda el personaje de Nicholson, creo que es la primera vez que veo a este magnífico actor interpretando a un hombre de su edad y no a los chulos y mujeriegos a los que nos tiene acostumbrados. Aquí Nicholson no tiene ningún atractivo, es un ser anodino, sin ilusión por la vida, tacaño y poco cariñoso, y la tristeza que a veces se puede ver en la mirada del gran Jack es impresionante. Jack Nicholson está fantástico, creo que le dieron su premio muy merecidamente, es un actor impresionante aunque es cierto que se le puede achacar cierta exageración en su forma de actuar, aquí está bastante comedido y simplemente borda su papel. No sé a quién se le ha ocurrido lo de que esta película es una comedia, a mí me parece bastante amarga y directa, la vida no es de color de rosa y al final del camino no quedará nada de nosotros. Junto a Nicholson una estupenda actriz, Kathy Bater, maravillosa en su interpretación, como en ella es habitual. Me hubiera encantado que su personaje hubiera aparecido más en pantalla. Su personaje es todo lo contrario al de Nicholson, es todo positividad y optimismo. La actriz se atreve, incluso, con un desnudo. Bravo por ella. Del resto de secundarios, destacar a un Dermot Mulroney que nunca ha sido santo de mi devoción pero que tengo que reconocer que está bastante aceptable aquí, con un look muy peculiar, y a la actriz Hope Davis como hija de Nicholson, bastante correcta. La música acompaña bastante bien a la película en todo momento. Desde luego, no la recomendaría a aquellos que sólo buscan acción y sexo, aquí no hay ni lo uno ni lo otro. Para el resto, creo que es una película que merece la pena.

338 váteres limpios, 7 tipos de ayudas del gobierno, 9 mudanzas, una noche durmiendo en el suelo de la estación de ferris y todo el tercer año de vida de su hija. Todo eso le ha costado a Alex llegar a independizarse con su pequeña, salir del boquete psicológico, sentimental y económico en el que se encontraba y poder llegar a estudiar lo que ella realmente ama, la escritura, en una universidad lejos de su hogar natal.

Muy buena serie, seca, dura, como es la realidad de tantas chicas que lo tienen realmente complicado para seguir batallando día a día y Margaret Qualley se hace dueña y señora de su personaje, Alex, que está pasando, precisamente, por todo ese calvario de salir adelante casi sin medios con una niña de 3 años a la que hay que dar de comer y proteger sí o sí, independientemente de que tengas trabajo o un techo donde cobijarte.

Me ha llamado muchísimo la atención cómo la serie muestra el racismo que hay en Estados Unidos de la comunidad blanca hacia ellos mismos, cómo diferencian a los blancos pudientes de los llamados "Basura blanca", un término cada más frecuente y más escuchado que hace referencia a los blancos sin oficio ni beneficio o que no tienen una posición económica para tirar cohetes, y es que Alex se encuentra con un montón de obstáculos para poder conseguir salir de un hogar hostil y encontrar trabajo para independizarse con su hija, sobreviviendo con los trabajos que nadie más quiere hacer.

Maravillosa Margaret Qualley, como dije antes, se come la cámara cada vez que sale, pero su madre en la vida real y en la serie, Andie MacDowell, no se queda atrás, bella en su madurez y en una de sus mejores actuaciones como Paula, y es que me ha sorprendido muy gratamente ya que nunca ha sido esta una actriz que me haya apasionado.

De los chicos destacar a un interesantísimo Nick Robinson como pareja alcoholizada de Alex y a un Billy Burke, de la saga "Crepúsculo", más que correcto como padre de la protagonista. La niña, Rylea Nevaeh Whittet, está increíble y para comérsela y su química con Margaret Qualley es impresionante, y Anika Noni Rose está correcta como una de las personas que, al final, más acabará ayudando a Alex a salir de su pesadilla.
Un saludo,
Tess