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España España · Granada
Críticas de Kikivall
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Críticas ordenadas por fecha (desc.)
7
19 de mayo de 2024
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George y Lennie, dos amigos desempleados, son contratados para trabajar en un rancho durante la Gran Depresión. George es inteligente y generoso, mientras que Lennie, aunque posee una enorme fuerza, tiene limitadas habilidades mentales.

Ambos sueñan con tener su propia granja con huerto y animales, y ahora buscan un nuevo empleo en el Rancho N°3 para ahorrar y hacer realidad su anhelo.

Película que se desarrolla en el contexto de la Gran Depresión estadounidense. La trama gira en torno a las ambiciones de mejora en un mundo implacable, la amistad inquebrantable y la inocencia enfrentada a la dura realidad.

George Milton (interpretado por Burgess Meredith), un hombre inteligente y generoso, y Lennie Small (Lon Chaney Jr.), un grandullón de enorme fuerza, pero limitadas habilidades mentales, huyen en tren tras ser perseguidos por unos hombres armados. A pesar de los tiempos difíciles, ambos sueñan con tener su propia granja con huerto y animales.

Otros intérpretes, muy bien, son Betty Field, Charles Bickford, Bob Steele y Noah Beery Jr. La partitura fue compuesta por el neoyorkino Aaron Copland, siendo su primera para un largometraje. Esta banda sonora fue nominada a los premios Oscar.

La película, basada en la novela “De ratones y de hombres” de John Steinbeck, ofrece una visión conmovedora de la vida en esa época y la amistad entre los protagonistas.

Puede que no alcance la profundidad de otras adaptaciones de Steinbeck, pero sigue siendo un testimonio valioso de la lucha por la supervivencia y la conexión humana en tiempos difíciles.
Kikivall
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7
18 de mayo de 2024
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La película nos transporta al oeste americano, en torno a 1860, poco antes de la Guerra civil americana. Un periodo histórico donde, en muchos territorios aislados, la aplicación de la ley estaba sometida a los caciques que ejercían el control.

Aunque comienza con una escena cargada de tensión y acción, el director Viggo Mortensen acaba por tomar un camino diferente al centrarse en las emociones y las vidas de los personajes, un hombre y una mujer zarandeados por circunstancias difíciles del destino.

La cinta es un western nostálgico rendido a los afectos de sus protagonistas, con una delicadeza humilde y compleja a la vez. Que también reivindica el peso de la mujer, pero sin olvidar por completo los márgenes clásicos del género.

El hombre es un inmigrante danés de mediana edad llamado Holger Olsen (interpretado por Mortensen). Ella es Vivienne Le Coudy (Vicky Krieps), una mujer independiente que se ha embarcado en una relación con él después de haberlo conocido en San Francisco.

Vivienne accede a viajar con Holger a su casa, cerca del tranquilo pueblo de Elk Flats, donde comienzan una vida juntos. Pero no pasa mucho tiempo cuando Holger decide marchar para luchar en la Guerra de Secesión. Vivianne se queda sola en el pueblo a merced del poderoso ranchero Alfred Jeffries y su hijo, el malévolo Weston.

Viggo Mortensen brilla como actor (y director, también como productor, compositor de la música y guionista). También mima detalles históricos como el vestuario, el diseño artístico, la manera de montar los caballos, los paisajes o los dialectos y acentos a la hora de hablar, ello para dotar de rigor al género.

El trabajo actoral de Mortensen, genuino y profundo añade fuste a la película. Vicky Krieps hace una gran actuación igualmente y, además, la química entre ambos protagonistas es manifiesta.

En la dirección Mortensen logra un sólido trabajo, capturando la vastedad y la belleza del paisaje americano. La fotografía de Marcel Zyskind es impresionante, con tomas que evocan la soledad y la esperanza. El uso de la luz natural y los colores terrosos contribuyen a la atmósfera de la película.

Hay también el empleo de una serie de flashbacks en la narración, para llevarnos a distintos periodos temporales llevando la historia adelante y hacia atrás, en un juego que tal vez habría estado mejor en forma lineal.

Un suceso violento en el filme lleva al drama y la tragedia a la vida de Vivianne. Entonces, el guion nos introduce en un relato que oscila entre la venganza y el perdón, una reflexión que, de puertas para dentro, con el silencio y el juego de las miradas de la pareja imponiéndose al diálogo.

Como temas y mensajes principales, esta cinta explora la lealtad, la pérdida y la búsqueda de un lugar al que pertenecer. La película nos recuerda que, incluso en tiempos difíciles, el amor y el vínculo humano pueden resultar salvadores.

Un western atípico que se aleja de los clichés del género. Si aprecias las historias íntimas y bien actuadas, esta es una excelente elección. Western que prefiere el terreno de la delicadeza, concentrándose en los detalles y el silencio.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Kikivall
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7
18 de mayo de 2024
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Estamos con una familia italiana, un barrio pobre de Roma, un país que ha perdido la guerra, la ciudad en ruinas, omnipresente el ejército norteamericano y entrando en la primavera.

Están alborozados por el compromiso de la hija mayor, Marcella, una muchacha que ansía casarse rápidamente con un chico de clase media, Giulio, para librarse por fin de su incómoda familia en la cual el padre es un tirano y la esposa una esclava que lo sobrelleva con paciencia.

Al inicio, Ivano (Mastrandrea), el marido de Delia, la protagonista (Corteselli), propina un gran bofetón a su mujer. Esta, acostumbrada a las palizas, ni se inmuta. Cuando sale a la calle esconde los moratones para que nadie se entere. Un largo travelling sigue a la mujer que va a sus trapicheos para ganarse la vida: cose, pone inyecciones, etc.

Amigos y familiares saben lo que está pasando en esa casa, pero nadie interviene. La película subraya constantemente la tiranía de una sociedad patriarcal donde los hombres deciden todo y se espera que las mujeres guarden silencio.

Primera película como directora de la actriz y guionista Paola Corteselli, una obra que ha tenido enorme éxito en su Italia natal por la historia que cuenta, por la manera original y encantadora de contarla y por el magnífico reparto que tiene.

Está vertebrada por un excelente guion de Furio Andreotti, Giuglia Calenda y la propia Corteselli, un libreto planificado y escrito en forma sobresaliente, sin dejar librada a su suerte ningún detalle del relato. A través de su narrativa, la película aborda temas relevantes y logra capturar la esencia de la Italia de postguerra, así como la problemática de la mujer en aquellos entonces en los cuales el varón tenía un poder absoluto.

Tiene un reparto muy bueno, con la propia Paola Corteselli en el rol de la madre paciente y sometida; Valerio Mastandrea es el esposo ludópata, bebedor y maltratador; y acompañan Vinicio Marchioni, Romana Maggiora Vergano, Giorgio Colandelli y otros. Interpretaciones sólidas y auténticas. La directora logra extraer lo mejor de cada actor, transmitiendo emociones y el peso de los conflictos, de manera convincente.

Historia sentimental de sufrimiento y autosacrificio, pero Cortellesi la ejecuta con estilo. La violencia doméstica infligida por Ivano es, en ocasiones, coreografiada en un baile grotesco y sorprendente. Los momentos románticos más exagerados se ven socavados por un humor seco, y así.

A pesar de su tono a ratos divertido, logra reivindicar la dignidad de las mujeres que vivieron bajo el yugo de la sociedad patriarcal de mediados del siglo pasado. La historia se enmarca en un barrio romano, donde una familia humilde sobrevive gracias al ingenio y la astucia de la mujer de la casa.

Es una cinta que se disfruta viéndola, y destaca la excelencia del reparto, la magnífica fotografía de Davide Leone (B&N) y una música que arropa la historia armoniosamente, de Lele Martichelli.

Podría ser comparada, pero con reparos, con el neorrealismo italiano, destacando el uso del blanco y negro para abordar la penosa situación del momento. Y a pesar de la crudeza de las imágenes y la temática de la violencia doméstica o la pobreza, la directora introduce humor y música como contrapunto, creando una experiencia que se visiona, como decía, con agrado.

El filme subraya temas universales y la importancia de las pequeñas luchas para avanzar hacia la libertad y la igualdad. La Cortellesi lleva al cine la denuncia de la violencia de género y reivindica los derechos de las mujeres. Nos recuerda que incluso en los momentos más oscuros, siempre hay una oportunidad para el cambio y la esperanza.

En suma, es una obra cinematográfica que combina elementos técnicos sólidos con una narrativa emotiva. Una propuesta interesante para los amantes del cine social, que logra tocar la fibra sensible y que plantea cuestionamientos relevantes. Y con sorpresa final.
Kikivall
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7
17 de mayo de 2024
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Conocida en inglés como “The Last Command”, es una película que se sumerge en uno de los episodios más emblemáticos de la historia de Estados Unidos: la batalla de El Álamo.

Este western dramático, dirigido por Frank Lloyd, ofrece una representación de la resistencia texana frente a las fuerzas mexicanas en 1836, un evento que ha sido fuente de inspiración para numerosas obras literarias y cinematográficas.

La película se centra en la figura del coronel Jim Bowie, interpretado por Sterling Hayden, y su lugarteniente, el abogado Bill Travis, quienes lideran la defensa del fuerte de El Álamo durante el asedio de las tropas del general Santana.

A pesar de contar con un presupuesto limitado, la producción logra transmitir la intensidad y el dramatismo del conflicto gracias a un reparto convincente, una banda sonora impactante compuesta por Max Steiner y un equipo técnico que consigue recrear la magnitud de la batalla con gran espectacularidad y una fotografía sensacional de Jsck A. Marta.

Es destacable la habilidad de la película para mantener un respeto hacia la historia real, optando por omitir detalles cuando la verdad histórica no puede ser contada de manera estricta.

Esta decisión de utilizar “sabias elipsis” ha sido vista como una forma inteligente de manejar las limitaciones narrativas y presupuestarias.

A pesar de que la película ha sido eclipsada por otras versiones más famosas de los hechos de El Álamo, “La Última Orden” sigue siendo reconocida como un genuino western americano que ofrece una mirada realista a los eventos históricos.

La dirección de Frank Lloyd es considerada magistral, y la película es apreciada por su capacidad para presentar la tragedia de la guerra y los problemas de una nación dividida.

En resumen, una obra que, aunque puede tener sus detractores en cuanto a la precisión histórica y la convincente representación de algunas escenas de acción, sigue siendo una película emocionante y bien realizada que merece ser recordada y valorada dentro del género western.
Kikivall
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7
16 de mayo de 2024
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Esta película es un remake de la icónica cinta “La diligencia” (Stagecoach) dirigida por John Ford en 1939. Aunque la versión de 1966, dirigida por Gordon Douglas, no alcanza la misma trascendencia que la original, tiene, empero, sus propios méritos y cualidades.

La trama sigue a un grupo de pasajeros variopinto que viaja en una diligencia hacia Cheyenne, enfrentándose a la amenaza de los sioux liderados por Caballo Loco.

A medida que el viaje avanza, las tensiones entre los pasajeros se intensifican, y todos deben unirse para defenderse de los ataques indios, y preservar que una mujer en estado avanzado de buena esperanza dé a luz.

La película ofrece una representación realista del Salvaje Oeste y construye personajes convincentes de todos los colores y cataduras morales.

Es digno de elogio la autenticidad histórica y la ambientación, aunque por momentos parezca que no alcanza la maestría de la versión original. La música de Jerry Goldsmith contribuye al ambiente del filme.

Gordon Douglas asumió la dirección en esta versión de 1966, y aunque a distancia de la maestría de John Ford en la original, Douglas ofrece una visión respetable del clásico. Es una película digna que rinde homenaje al clásico original.

El guion sigue la estructura básica de la película de 1939, pero con algunas modificaciones. La narrativa se centra en los conflictos y las relaciones entre los pasajeros de la diligencia.

En cuanto al reparto, Alex Cord interpreta al forajido Ringo Kid, un papel que John Wayne hizo famoso en la versión original. Aunque Cord no alcanza la presencia carismática de Wayne, su actuación es suficientemente sólida y solvente. Ann-Margret, como Dallas, mujer de la vida, aporta una mezcla de vulnerabilidad y determinación. Su química con Cord es palpable. Otros miembros del elenco, como Red Buttons, Stefanie Powers y Bing Crosby (como el médico borrachín), también desempeñan sus roles con competencia.

La película captura la vastedad y la belleza del Salvaje Oeste. Las escenas en el desierto y las montañas son visualmente impresionantes. La fotografía en Technicolor de William H. Clothier realza los paisajes y los detalles de la época.

La partitura de Jerry Goldsmith, compositor de renombre, crea una sonoridad memorable para la película, lo cual es un punto destacado. Esta música evoca la aventura y la tensión del viaje en la diligencia.

Película, en fin, que merece ser vista por los amantes del género western y por aquellos interesados en la historia del cine. A pesar de su predecesora de 1939, esta ofrece una experiencia entretenida y nostálgica.

Temas como la convivencia forzada, la diversidad de personajes y la lucha contra la adversidad, son principales.
Kikivall
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