Por culpa de Joel Schumacher y Batman y Robin, el hombre murciélago estaba muerto y olvidado. Hasta que llegó el joven (ahora superestrella) Christopher Nolan que hasta el momento había hecho Memento, que había sido una excelente película pero al mismo tiempo hizo Insomia, una película mediocre, sin más pero bueno uno se preguntaba cuando salia esta película ¿Qué sentido tiene hacer Batman ahora?
Por suerte, el respeto al comic esta presente en cada línea, en cada acción y por fin tenemos respuestas a todas las preguntas sobre el origen del murciélago, tienen sus respuestas de manera prolija y muy bien contada.
Por más que obviamente, cambie varias cosas, Nolan se basó principalmente en el aclamadisimo comic de Frank Miller "Batman año uno", donde nos cuentan los principios en la lucha contra el crimen de Batman y el comisionado Gordon, el espíritu de la novela gráfica esta presente por más que se cambie ligeramente.
En cuanto al reparto, Christian Bale es el Bruce Wayne/Batman, definitivo. Si Michael Keaton podía expresar su incomodidad con una mirada, Bale nos muestra todos sus lados, y si en las películas de Burton esperabamos ansiosos de que Bruce se convierta enseguida en el hombre murciélago, aquí esta tan bien contado, que nos da lo mismo cuando se pone la máscara o es el joven multimillonario.
Michael Caine es el mejor Alfred de todos y Gary Oldman es !Gordon!, por fin se le hace justicia a ambos personajes que en la versión anterior eran personajes que no pinchaban ni cortaban, pero ahora se les da toda la importancia que se merecen y si a eso le sumamos que Morgan Freeman tiene un personaje carismático hecho a su medida, tenemos un gran reparto. Encima a Nolan le gustan los riesgos, porque en vez de mandar a los villanos clásicos que todos conocemos, puso a dos villanos no tan conocidos por los no comiqueros: Ra`s Al Ghul (Liam Neeson) y Espantapájaros (Cillian Murphy), que a pesar de no ser tan malignos o amenazadores, mantienen su cuota de suspenso y misterio hasta el final, no importa el que tiene que lucirse es el mismo Batman. El personaje que menos aporta es el de Katie Holmes, pero no importa porque lo hace bien de todas formas.
Lo único que puedo resaltar como negativo, es que las escenas de acción están filmadas con planos cortos que marean hasta el hartazgo. Y ojo, es una película espectacular, que deja en pañales al 99 por ciento de las películas de superhéroes, pero viendo al personaje que tenían, se podía haber hecho más épica, más emocionante, un poquito más de todo.
En cuanto a la banda sonora, uno por ahí extraña por ahí la banda sonora redundante de Danny Elfman pero igualmente el gran Hans Zimmer, marca perfectamente la humanidad del murciélago.
Pero no importa, porque esto es apenas el principio, que tal si en la continuación, ya desde el principio se borraran los minimos errores de esta cinta y que aumentaran los aciertos a la máxima potencia, lo hizo, y nos dejo un excelente resultado. Gracias Nolan, por fin el encapotado tiene una película a su altura.

Hacer un final de trilogía nunca es fácil, menos si sus antecesoras son dos películas espetaculares.´
Mucha agua corrió bajo el puente desde 2008, desde el final de The Dark Knight, que dejaba un final muy abierto que podía llevar lugar a una tercera parte, y aunque al principio Nolan no estaba muy convencido de realizarla, finalmente encontró una historia perfecta para concretarla.
Inmediatamente los rumores de villanos que salían en la web eran trillones: El Pinguino, Mr.Freeze, El Acértijo, etc etc etc. Obviamente a uno le hubiera encantando ver al Joker teniendo su enfrentamiento final con Batman, pero realmente sería una falta de respeto a Heath Ledger, que tan bien lo interpretó en The Dark Knight así que cuando uno decía, el villano va a ser Bane, realmente me sentía muy entusiasmado porque encima Nolan le borraria a la gente ese mal recuerdo que tenía del gran villano en "la mierda mas grande del universo" digo "Batman y Robin".
Sin más tenemos un arranque a toda orquesta, con una secuencia espectacular en un avión, hecha sin ningún truco digital (dejen eso para Ronald Emmerich o Michael Bay) y se nos presenta al gran villano de la función, Bane, encarnado por un gran Tom Hardy que no supera a Ledger, pero ¿Quién podría?
En las siguientes escenas, vemos como pasaron 8 años desde los sucesos acontecidos en la anterior película, vemos a un Bruce Wayne totalmente destruido porque ha perdido toda esperanza de llevar una vida normal y ya ni siquiera Alfred puede ayudarlo. Aquí es cuando ya no admito discución en quién es el mejor Bruce Wayne/Batman, porque aquí es donde Bale se supera a si mismo de una manera increíble, metiendonos de lleno en las sensaciones de un hombre que, gracias a una bomba llamada Selina Kyle (interpretada por una vivaz Anne Hathaway, que me sorpendio, la verdad) empieza a volver de a poco al mundo.
Sin duda el personaje que más expectante me tenía a mi (y a varios supongo), es de Gatúbela, ya que gracias a Nolan, por fin ibamos a ver una adaptación fiel al comic de ella y en ese aspecto no salimos nada decepcionados, en especial gracias a la interpetación genial de Anne Hathaway, en la que últimamente he notado un gran crecimiento en sus dotes actorales (ni hablar de su participación en Los Miserables).
No olvidemos que antes de terminar la trilogía del murciélago, Nolan sacó una película, Inception (El Orígen aquí en Latinoamerica) y uso gran parte del ambiente que esta película tenía, mezclandola con grandes comic como "Knightfall", "No man´s land" y el aclamado "The Dark Knight Returns".
Y en cuanto al ambiente de Inception digo de que por más de que no hayas visto ninguna película de Batman antes, vas a quedar totalmente hipnotizado a la pantalla grande y te vas a entrener igual que los comiqueros. Para hacer la prueba lleve a mi primo, que no había visto ni Batman Begins ni The Dark Knight, y quedó igual de encantado que yo cuando salimos del cine.
Realmente no entiendo a la gente que se queja de esta película porque ve agujeros en la trama que no hay en ninguna parte. El plan de Bane esta perfectamente ejecutado y él lo explica muy bien en la película, que ustedes hayan estado pensando en otra cosa en ese momento es problema de ustedes.

La Bella y la Bestia (1991) fue un fenómeno que hizo que la fórmula que se había impuesto en La Sirenita brillará con todo su esplendor, entusiasmando a tanto público como crítica e incluso siendo nominada al Oscar por Mejor Película. Realmente pensamos que con la anterior película, Disney había dado todo lo que podría llegar a dar, pero nos equivocamos, la casa de Mickey Mouse tenía sacó un año después, una joya más bajo la manga, adaptando el clásico cuento "Aladino y la lámpara maravillosa" dentro de "Las mil y una noches, los directores de La Sirenita sacaron "Aladdin".
Yo partícularmente de pequeño adoraba esta cinta y ya crecido la volví a ver, y no solo me encantó, sino que me gustó muchismo más de cuando era pequeño. Es que una de esas películas que no envejecen nunca sino que mejoran con el tiempo, y mucho que ver tienen persecuciones como cuando Aladdin escapa con la alfombra de la Cueva de las Maravillas o cuando huye de los hombres de Jafar, son secuencias que realmente no tienen nada que envidiarles a las películas de Indiana Jones.
El hilo conductor de la trama, al igual de la anterior película, es la historia de amor que ocupa el tiempo justo y necesario, y no se hace para nada empalagosa. Mucha culpa tienen los personajes, Aladdin es uno de los héroes más humanos y carismáticos salidos de Disney y Jasmine que (aparte del cuerpazo que tiene para ser un dibujito), esta lejos de ser la característica dama que solo tiene que ser salvada por el héroe, sino que es capaz de hacerle frente a cualquiera con tal de conseguir sus objetivos (pero no a la onda Ariel por ejemplo).
Los demás personajes, creo que en son en conjunto aclaró, los mejores secundarios de la década. Jafar, el malvado, que puede ser amenazante, serio y tembile pero también patético e hilarante en varios aspectos y con un complemento genial que es el loro Yago (hilarante). Abú e incluso la adorable alfombra tienen sus puntos cómicos pero nadie le llega ni a los talones al único e inmitable....... !!!!GENIO!! El mejor personaje de la película, desternillante de principio a fin, y lo mejor es que se le da el espacio justo y necesario haciendo de que cada palabra que suelte sepa a risa pura, inconmensurable.
En el aspecto técnico es sin duda, mejor que su predecesora, con un uso del ordenador ni mas ni menos que magnífico en especial con la cabeza del tigre de la Cueva de las Maravillas o la increíble expresión que le dan a una simple alfombra mágica, o sino la espectacular entrada del alter-ego de Aladdín, El Príncipe Alí. En cuanto a la banda sonora, es inferior comparada a la de La Bella y la Bestia, pero sigue siendo igual de genial, eso si los números musicales creo que son en conjunto, los mejores de la década ¿No me creen? Escuchen: "Noches de Arabia", "Hay un amigo fiel en mi", "Príncipe Alí" y "Un mundo ideal y díganme si no me creen.
Y no se si hay mucho más que añadir, un gran clásico que ha aguantado el paso del tiempo de manera descomunal, una mezcla perfecta entre aventuras, romance, fantasía y comedia. Realmente se pensaba que Disney había llegado a su máximo nível con "La Bella y la Bestia" y "Aladdin", pero increíblemente dos años después la capacidad aumentó de manera extraordinaria cuando la odisea de un joven león llamado Simba nos conmovió a todos.

Nueve Reinas fascinó a todo el mundo, tanto crítica como público quedaron fascinados y consiguió un buen número de taquilla (fue una de las películas más vistas del año).
Pero la película de Bieilinsky solo había sido una demostración de la genialidad que tiene el cine argentino, porque un año después Juan José Campanella, gran director de cine, que incluso ha dirigido posteriormente capítulos de series estadounidenses como Doctor House o La ley y el orden y en Argentina tenía como antecedente "El mismo amor, la misma lluvia" que había sido un éxito (como no, con Darín).
Es difícil e incluso raro hacer una crítica de esta película, porque es una pelí muy atípica a la cual es muy difícil describir su argumento, ya que es un drama de un personaje que sufre por muchos costados, lo cual lo hace más tridimensional. Porque las proezas que tiene que vencer Rafael (impecable como siempre Ricardo Darín) son muchas y lo mejor es que cada uno repercute en la otra, lo cual hace una combinación explosiva: la crisis económica argentina que afecta al restaurante que heredó, lo que provoca que este todo el tiempo totalmente esterado, el hecho de que su padre ya viejo quiere casarse con su madre que esta enferma del mal de Alzheimer, la poca atención que le presta a su mujer actual y a su hija, todo ese entralazandose de una manera fenomenal ya que el ritmo del film es totalmente arrollador ya que parece que al final pensamos de que todo duró no más que media hora.
Es que con situaciones tanto dramáticas como cómicas, se desarrolla la evolución del personaje de Rafael a lo largo de la película, bien despacito y a buena letra, empieza a salir del pozo gracias a una terapia intensiva que le cambió la forma de ver la vida, intentando disfrutar más a su hija y ayudar en todo lo que pueda al deseo de su padre pero al mismo tiempo le siguen llegando otros problemas en los que se ponen a prueba su paciencia y de los que gracias a su perfecta evolución los consigue resolver de la mejor manera posible.
No es una película que tenga persecuciones de acción ni muerte, es un hombre tratando de resolver su vida, una comedia dramática a pura letra, con un guión magnifico que tiene tanto comedia como drama (espectacular cameo de Adrián Suar como director) y tiene varios momentos de emotividad: como cuando Darín y Blanco recuerdan los momentos de chicos, cuando Rafael le habla a la novia por el comunicador del departamento, cuando su madre reconoce a su amigo de la infancia de la mejor manera posible (Campanella sos nuestro Spielberg), la foto final, en fin hay varios espacios emotivos ninguno metido con calzador.
En cuanto a las actuaciones, de Darín hay poco que decir a estas alturas , Hector Alteiro le da un halo de dulzura a su padre, Eduardo Blanco destella de carisma con cada aparición (hilarante tanto en el momento de la filmación o cuando finge ser un cura), Norma Aleandro, una de las mejores actrices argentinas (protagonista del primer film nacional en ganar el Oscar, La historia oficial) es simplemente espectacular, emocionando con cada línea , con cada gesto y las protagonistas femeninas no dejan ninguna huella más bien porque su aparición es esparodica. Y la banda sonora es una de las mejores que escuchado en un film argentino, peleando palmo a palmo con otra de Campanella, El secreto de sus ojos.
Como ven una película muy redonda, una comedia drámatica pura y dura, llena de momentos tanto dramáticos como cómicos, con actuaciones espectaculares y una muy buena banda sonora ¿Qué mas se puede pedir?
Obtuvo un éxito tanto de crítica como de público (fue la película más taquillera del 2001, el peor año de la historia argentina además venciendo a otros pesos pesados como "Monsters Inc" y "Harry Potter y la piedra filosofal") y fue nominada a un Oscar por mejor película extranjera, no lo consiguió, no importa porque 8 años después lo conseguiría con una súblime película que sin duda, lo mejor de nuestro cine.

El cine argentino es un poco subestimado injustamente por nosotros los argentinos, ya que tenemos un buen puñado de películas de alto nivel, muy buenos actores, muy buenos directores y un par de Oscar ganados.
Pero para mi el encargado de llevar al cine argentino a un nuevo nivel, cuyo guión nada tiene que envidiarle a los películas estadounidenses fue Fabián Bieilnsky, ganador de un concurso de guionistas en 1999 con el título de "Nueve reinas".
Lo primero que puedo pensar al ver esa película es que hijo de su madre que era este Bieilinsky, pocas veces he visto un guión tan atrapante, que te deje confundido todo el tiempo, dejándote falsas pistas que te mantienen a la incertidumbre, dejar frases tan geniales y memorables como en el momento en que el personaje de Darín menciona como maniobran algunos chorros, y más haciendo esto con frases y vivezas 100 por ciento argentinas, cosa que no siempre funciona y que acá esta cohesionada a la perfección.
Impresionante como indaga en la Argentina catastrófica del año 2000, y como nos muestra cosas simples como la viveza criolla y trucos simples de estafadores ineptos que buscan desesperadamente dinero en la crísis económica más grande de la historia de la argentina pero si la introducción en la que los personajes de Darín y Pauls se conocen era fantástica, hay que ver el magnífico ritmo que agarra desde que son encargados de vender las nueve reinas.
El guión juega con el suspenso de manera implacable, como cuando pierden las nueve reinas y luego tienen que volver a comprarlas, todas las acciones que reparte Marcos, saber que esconde Juan, porque parece que detrás de esa carita de buenito hay algo escondido (en especial por las escenas en la que interviene en el ascensor o para conseguir las fotos de la señora), todo el tiempo el guión esta jugando con nuestra expectativa para ver que sucederá al final, y en cuanto al final tiene un giro de guión simplemente soberbio que no deja con preguntas a nadie y que además tiene asegurada varias risas.
En cuanto a las actuaciones, Ricardo Darín, debe ser raro que alguien en la Argentina lo odie. Darín es como Morgan Freeman o Johnny Depp (no en cuanto lo actoral, me refiero en cuanto a lo que transmite) todos lo adoramos. Valoro muchismo su espectacular trayectoria, ya que dudo que haya elegido alguna vez mal un proyecto pero creo sin temor a equivocarme que de toda su carrera este es el papel donde más se luce. Porque simplemente Darín se come la película, con un personaje que no tiene prácticamente nínguna virtud, y es tan estafador que ha cagado incluso a su familia cuando tuvo la opurtunidad, y Ricardito se encarga de darle un carisma arrollador que se lleva por delante la película. Gastón Pauls no se queda atrás, y eso que como actor me parece bastante inexpresivo, pero aquí su inexpresividad es perfecta para el halo de misterio del personaje que compone y más para la revelación final. De los personajes secundarios, ninguno se destaca en especial ya que la película muestra casi todo el tiempo a Darín y a Pauls, y los que aparecen son solo personas que intervienen de alguna forma o otra en su búsqueda, pero al final, todos formaban parte de otro plan que termina por comprobar que redondo es el guión. Si tengo que mencionar a otros actores que se destaquen además de los dos principales nombraría a Leticia Bredice a quién creo que nunca después se la vio tan linda de como sale en esta película.
Como ven, una película redonda, con un guión magnífico que no solo nos muestra toda la mierda en que puede llegar a ver en la Argentina, sino que te atrapa, te deja pistas falsas y cuando menos te lo esperas llega al maravilloso final.
Sería nominada y acreedora de varios premios internacionales pero injustamente no nominada al Oscar y ni siquiera fue elegida por nosotros para participar (ganó "Felicidades", una simpática película con el gordo Caseros que no le llega ni a la suela de los zapatos a esta joyita), pero no importa porque fue con Nueve reinas, donde la gente empezó a tomar en serio al cine argentino. Tanto que los estadounidenses quedaron fascinados con el magnífico guión e hicieron una remake llamada "Criminal", que obviamente fue bochornosa ya que Nueve Reinas es un producto 100 por ciento argento.
Cinco años después Bieilinsky sacó otra película llamada "El aura", que no he visto todavía pero que me gustaría ver y lamentablemente un año después falleció, que lástima con solo ver esta película me doy cuenta de que tenía un gran futuro.
Apenas un año después, el gran Juan Jose Campanella demostró que el nivel exhibido en "Nueve Reinas" no fue solo un golpe de suerte, pronto estaremos ahí con "El hijo de la novia".