La película es un Must para aquellos que, como yo, disfrutamos con los viajes en el tiempo. Es correcta, bien hecha, con una buena historia y actores que cumplen. Pero de la mitad hacia delante, la historia pierde fuelle, o al menos el giro de los acontecimientos me resultó inesperado, y algo flojo en comparación al inicio del film.

En cualquier caso, y sabiendo las dificultades que entraña realizar una película de estas características, y alejada totalmente de cualquier promoción mediática, es una película que entretiene, divierte (además no es muy larga) y, para variar en este género, te vuelve a provocar pensar sobre los viajes en el tiempo ('¿y si me sucedieran a mí?'). Un 7, pero con ligeros cambios hubiera llegado al 9 perfectamente.

La película en general está bien montada, con un Elijah Wood (Frodo, para los amigos) que cumple como siempre, y un argumento correcto, sin florituras. Creo, sin embargo, que es una película 'sólo' apta para futboleros, pues más allá de las continuas referencias a la eterna rivalidad West Ham-Millwall (que este año se verán las caras en 2ª, por cierto), la historia no llega muy lejos.

Eso sí, refleja un aspecto real de la vida futbolística británica, como es la cultura hooligan, aunque un poco desmesurada, desde mi punto de vista.

La película, seamos serios, no vale nada. Creo que también es culpa de la propia historia. Si se hubiera vendido como cine de comedia, y se hubieran cambiado muy pocas cosas, la película habría sido un éxito. Pero de terror no tiene absolutamente nada. Stephen King fracasa estrepitosamente, salvo en un aspecto, la banda sonora. Y es que contar con AC/DC es todo un acierto, a pesar de que el grupo no se movía por aquél entonces en sus mejores años.

En resumidas cuentas, si eres fan de AC/DC, es de obligado cumplimiento ver el film y escuchar el álbum Who Made Who. Si no lo eres, quizás no quieras malgastar tu tiempo. Si le doy un 5, es por el aspecto sonoro.