Film que deambula entre la comedia, el suspenso, el drama y no termina siendo nada, con el problema que realmente es un fiasco. El gran inconveniente que tiene es que los actores evidentemente se lo tomaron en serio creyendo que este film es algo así como Hamlet, quizas si todos se hubieran corrido para el lado de la comedia a lo mejor habría tenido alguna pequeña mejoría. En fín, en lo que a mi respecta no me gusto para nada esta pelicula de superheroes del subdesarrollo con un guión absurdo. La supuesta trama es la investigación de un policía y un particular ayudante de unos crímenes relacionados con comic antiguos. Después es todo irracional y aburrido. No entiendo como Ernesto Alterio, quien creo es un actor superior a la media, se prestó a esto, ni hablar de Leonardo Sbaraglia en un papel breve y caricaturesco que no le suma nada. Desechable.

Thriller sombrío (con un halo a Seven, si me permiten decirlo) todos los personajes son seres pesimistas, en donde casi no podemos hacer empatia por ninguno. Acá encontramos a un asesino serial que viola y mata a ancianas, en medio de la investigación vemos la llegada del Papa Benedicto XVI (que poco tiene que ver en la trama) y dos policías muy distintos uno con una discapacidad que lo hace huraño y reacio a la gente (Antonio de la Torre que tiene un aire a Jose Sacristán) y el otro con un nivel de agresividad a punto de explotar a cada momento. Me quedo por lejos con la actuación de Roberto Álamo quien dota a su personaje de gran credibilidad. No me gusto el final, un poco traído de los pelos y creo con poca lógica. Igualmente es una grata sorpresa este film español, cine del que no soy muy asiduo pero que últimamente me ha dado muchas satisfacciones.

Para destacar la fotografía, los preciosos paisajes de Islandia y después nada más, me quedo con eso como única cosa positiva y rescatable de este film. Después es solo una trama llena de aullidos, gritos y rituales supuestamente vikingos que solo contribuyen a que uno se pregunte cuando realmente se desarrolla el guion y que solo ayudan a aumentar el tedio de un largometraje interminable. La acción se desarrolla alrededor de la venganza (la primer parte increíble sin ningún tipo de lógica) de un príncipe contra quienes mataron a su padre. Así con gritos de todo tipo, apariciones fantasmales, chamanes varios y distintos animales que ayudarán a nuestro héroe a cumplir su cometido. Entre las actuaciones encontramos a Alexander Skarsgard que aporta su musculatura y poco diálogo, Nicole Kidman (de lo mejorcito, desfigurada por el botox lamentablemente) y deambulando con papeles pequeños, de poca importancia Ethan Hawke y Willen Dafoe. En síntesis me quedo con los paisajes antes que los aullidos ensordecedores.

Si uno logra llegar a la primera hora sin pensar que es una película aburrida puede llegar al final sin grandes sobresaltos. Se puede decir que es despareja pero con unos últimos 45 minutos realmente buenos que no alcanzan como para decir que es una película completa pero al menos logra hacer pasar un rato entretenido. La trama se desarrolla en una comisaria alejada en donde llegan un estafador, un asesino y varios personajes estrafalarios, que tendrán motivos diversos para matarse unos a otros, todos ellos bajo la atenta mirada de una policia muy especial que intentará defender lo que cree es correcto. El film cuenta con un buen trabajo de Gerard Buttler y Frank Grillo al igual que Toby Huss como un psicópata muy especial. Hay semejanzas con Tarantino pero en líneas generales quizás con algo de acción en su primer parte podría haber sido mejor.

Comedia con ínfimos momentos graciosos muy lejos de la original, que no era una gran película, pero que tenia como elemento destacado la química entre Kurt Russell y Goldie Hawn que aquí ni siquiera se consigue con los protagonistas. El argumento gira en torno a un malcriado millonario, al que le encanta jugar con las personas valiéndose de su poder, que por accidente pierde la memoria, situación que es aprovechada por una mujer con tres hijas que había sido maltratada por este. A partir de acontecimiento al millonario, sin saberlo, se le cambia la vida. No acompaña el endeble argumento actuaciones que realmente valgan la pena, Eugenio Derbez expresa poco y mal y Anna Faris solo hace mohines alegres o tristes según la ocasión. Desechable.